Tras la decisión del concejal de izquierda Samuel Huerga y de un importante grupo de luchadores y trabajadores de Orán de sumarse al MST, tanto Política Obrera (ex PO Tendencia) como el Partido Obrero (PO) han salido a criticar tal decisión, en ambos casos con una catarata de falsificaciones que son tan evidentes, como el notorio malestar que tienen por la decisión de esta combativa militancia de Orán e Yrigoyen de sumarse a la militancia de nuestro partido.
En el caso del Partido Obrero, que junto a nosotros integra el FIT-U, pretende llevar el debate a una especie de impugnación de la participación de esta militancia y del concejal Huerga en nuestro frente. El dirigente Pablo López de PO de Salta arranca su nota criticando que el MST haya “incorporado a sus filas a Samuel Huerga, actualmente concejal de Orán, y a un grupo de personas que lo acompañan”. Así, con sesgo despectivo hacia trabajadores con años de militancia en la izquierda a los que le llama “personas”, López arranca una nota plagada de falsedades.
Sin sacar ninguna conclusión política del derrotero de su partido en toda esa región, ahora pretende tapar su propio retroceso político con impugnaciones a nuestros avances, escribiendo sobre un cúmulo de balances de posiciones e intervenciones previas en esas ciudades, en las cuales han sido precisamente PO y Política Obrera los responsables. Todo lo referido hacia el pasado es en todo caso un balance de sus propias equivocaciones políticas.
Un método burocrático para tapar el retroceso de PO
A la vez López pretende que si un militante de izquierda como Huerga y sus compañeras y compañeros, quieren organizarse políticamente, primero tienen que jurarle a PO que se autocritican de todo lo que vienen haciendo y opinando, un método bastante lamentable y por cierto, ajeno al trotskismo, que no es ni será nunca pensamiento único. ¿Desde cuándo para opinar o proponer, hay que pasar primero por el visto bueno del Partido Obrero? El método que propone López y PO es escandalosamente antidemocrático.
Falseando la realidad, López pretende ubicar a Samuel Huerga como alguien que hace “acuerdos espurios”, toda una canallada y un método de calumnias repudiable e inconcebible. En lo que va del año, es decir de su mandato como concejal, hay una larga lista de luchas obreras y populares que han recibido el apoyo de Huerga con su presencia en acciones, piquetes, marchas, junto a la compañera y referente docente Josefa Cardozo. Y esos reclamos han sido llevados al Concejo en lucha contra otros bloques políticos. Todo esto oculta López, porque le conviene.
A la vez, en su crítica a las y los compañeros de Orán, inventan que por su culpa se impidió la conformación de la Multicolor por vetar a Tribuna Docente. Algo muy lejos de la realidad. Lo que no acepta la combativa docencia autoconvocada de Orán que es parte de la Multicolor, es que PO pretenda hegemonizar un movimiento de lucha docente en la región, donde no tiene ninguna incidencia. Ya nos referiremos a esto en un texto aparte.
Altamira y PO en las legislaturas ¿De eso no se habla?
Como escribí en mi artículo anterior sobre el tema, hay una equivocada formación político-teórico de PO en torno a la intervención en ámbitos parlamentarios, ese legado es su responsabilidad y no de la militancia de Orán. Tanto es así, que no nos asombra que ahora, una vez más, ni en la nota PO ni en la de Política Obrera, opinen sobre nuestra crítica al escandaloso proyecto presentado por Altamira en medio del Argentinazo, donde propuso un gobierno de todos los bloques (burgueses en su mayoría) de la legislatura. Esta capitulación asombrosa al régimen democrático burgués en medio de un proceso revolucionario, de la cual Altamira y PO jamás se autocriticaron, es de nuevo tapada ahora, con silencio, por ambas direcciones. ¿Será que siguen pensando que estuvo bien hacerlo, pero no conviene decirlo en medio de este debate? Como sea, en este tema que marcó la propia historia de PO cuando estaban unidos, parece notarse cierta solidaridad entre ambos, para mejor “no hablar de ciertas cosas”. Ante esto, parece que los principios de los que habla López son un tanto adaptables a su conveniencia.
Además, se nota a las claras cierta volatilidad en los principios que López dice defender. Le recordamos que su partido, en un claro problema de principios, votó tiempo atrás en la legislatura porteña a favor de una declaración sionista, de la cual tuvo que autocriticarse cuando desde el MST como parte del FIT-U le marcamos tan importante error político. Pero nunca pedimos que se impidiera a nadie seguir actuando en el frente ni en la legislatura a nombre del FIT-U, pese a tan grueso error. Precisamente porque tenemos otro método de cómo encarar los debates, incluso cuando se comete algún error importante. A esto podemos agregarle que en la legislatura de Chaco el diputado de PO le dio quórum al gobierno de Capitanich en una sesión donde votaron el presupuesto de ajuste. Y en última instancia, en relación a Salta, lo que está detrás del debate actual, es que de haber tenido una enorme oportunidad política años atrás con fuerte representación política y legislativa, PO retrocedió cada vez más y más hasta dividirse y perder trabajos históricos, producto de una política sectaria por un lado y oportunista en los hechos al no utilizar correctamente en favor de la clase obrera y el desarrollo de la izquierda, la oportunidad que tuvo y dilapidó. En respuesta a su propio fracaso, es que ahora pretende obstaculizar y calumniar, ante el desarrollo de otra fuerza del FIT-U en la provincia.
La militancia de Orán en el MST y el FIT Unidad
De nuestra parte, somos muy claros políticamente sobre lo que opinamos del debate inicial en torno a la presidencia rotativa del Concejo, una propuesta que no compartimos. Y esas conclusiones las debatimos con las y los compañeros de Orán e Yrigoyen sin imponerles nada sino construyendo ideas y conclusiones comunes hacia adelante, y debatiendo los hechos pasados también con claridad y pacientemente, marcando que cuando se comete un error, hay que asumirlo y aprender para no repetirlo. Y así lo entiende y lo comparte el propio compañero Samuel Huerga, quien, en sus palabras, además agrega una pura verdad: que ese error político fue una propuesta de Política Obrera y que luego su dirección pretendió hacerse la distraída.
Ahora, insólitamente Pablo López y PO, nos dicen que: “Teniendo en cuenta esta divergencia de principios, la decisión del MST de incorporar a Huerga representa una crisis para el Frente de Izquierda, ¿en nombre de qué va a intervenir Huerga en el Concejo a partir de ahora? ¿Lo van a presentar como un concejal del FIT-U cuando reivindica métodos completamente ajenos a los del frente? ¿Qué implica haber incorporado sin conclusión ni balance a un grupo que desarrolló una política completamente hostil al FIT-U? Se trata de una posición de ruptura con los principios políticos del Frente de Izquierda”.
López evidentemente se cree poseedor de un “dedo” con el cual pretende decidir el derecho de admisión al FIT-U salteño. Contra ese método, está la realidad y un sano método obrero y socialista. En primer lugar Samuel Huerga y un importante grupo de militantes obreros y populares comenzaron una experiencia con el MST, se integran a nuestro partido y por lo tanto al FIT-U. Y en los próximos días el bloque en el Concejo de Orán pasará a denominarse MST en el FIT Unidad, en un nuevo paso adelante de nuestro partido y de nuestro frente. La incorporación de todas estas valiosas compañeras y compañeros de larga tradición de lucha son un salto para la izquierda revolucionaria salteña y de ninguna manera es una crisis para el FIT-U. Si hay crisis, López tendrá que buscarla en otro lado o puertas adentro de su organización.
Fortalecer al FIT-U sin sectarismo
Finalmente, unas palabras sobre un debate político nacional. Una vez más los compañeros del Partido Obrero intentando confundir el debate, vuelven con el cuento de que el MST quiere “disolver al FIT-U por la vía de ampliarlo hacia el centroizquierda”. A esta altura su incomprensión política es total. En medio de la crisis enorme del país, volvemos a insistir en nuestra verdadera propuesta; que el FIT-U deje de ser solo un frente electoral, que actúe en común en la lucha de clases, que se convierta en un gran movimiento político común de tendencias o corrientes organizadas, que se abra a miles de independientes y referentes sociales e intelectuales de la izquierda. Que dialogue hoy con miles y miles de trabajadores y jóvenes decepcionados con el gobierno invitándolos a luchar juntos contra el ajuste. Que hagamos lo que tenemos que hacer si alguna vez queremos ser una alternativa de poder; partiendo de la necesaria unidad de la izquierda lograda, convocar, abrirnos, impulsar más acercamientos al FIT-U en base a nuestro programa anticapitalista y socialista, y no dar la penosa idea, de que todo aquel que no comparta el 100% de lo que quiere PO, no pueda ser parte de nuestro frente.
