lunes, 6 mayo 2024 - 19:01

La marcha universitaria tuvo efecto. Milei sintió el golpe y el Congreso tuvo réplicas de la jornada del 23A

Con un posteo en X, el presidente Javier Milei, publicó un comunicado, titulado “Causas Nobles. Motivos Oscuros”, en donde, por un lado, intenta dejar en claro que el gobierno no quiere cerrar las universidades y, por el otro, busca deslegitimar la histórica jornada que se registró el 23 de abril en todas las calles del país. Horas antes de esta publicación, la Cámara de Diputados, en una sesión especial, no consiguió el quórum necesario para discutir el presupuesto universitario, dejando a la vista de todos, el oportunismo de algunos legisladores de la oposición dialoguista.

Causas nobles, motivos oscuros

La jornada del 23 abril, encabezada por el movimiento universitario y acompañada por varios sectores, tuvo su efecto y empieza a hacer retroceder al gobierno, a tal punto que el presidente tuvo que salir a aclarar que este gobierno libertario no viene a cerrar las universidades.

En ningún momento el gobierno nacional insinuó la intención de cerrar las universidades nacionales. Lejos de eso, ya el día anterior a la manifestación de ayer estaban hechos los giros de recursos para los gastos de funcionamiento de todas las universidades nacionales.” Estas fueron las palabras de Milei para intentar calmar las aguas, luego de la demostración popular que se vio en la calle, pero al mismo tiempo miente con la existencia del giro de los recursos para los gastos de funcionamiento, algo que no ha sido oficializado y tampoco respondería a solucionar el recorte presupuestario de las universidades nacionales que el mismo aplica.

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En el texto publicado, el presidente busca deslegitimar la manifestación que se replicó a lo largo y ancho del país. “Así es como ayer vimos las mismas caras de siempre de aquellos que quieren que la Argentina no cambie para defender sus privilegios. Massa, Cristina, Lousteau, Yacobitti, la CGT, la CTA, el radicalismo cómplice, y todos los demás actores de la clase política que se oponen a cualquier cambio porque han sido los principales beneficiarios del antiguo régimen.” Milei intenta apoyarse en la presencia de ciertos actores políticos, que se hicieron presentes en la movilización, para decir que la histórica jornada del 23A estuvo orquestada por estos dirigentes para defender sus intereses de casta, y en donde, además, todos los que salieron a la calle fueron utilizados.

Si bien, es obvio que hay actores que se mueven de forma oportunista, empujados por la defensa de sus privilegios, el presidente libertario, obvia el proceso de construcción democrática por abajo que tuvo esta movilización, en el cual las asambleas, las clases públicas, los banderazos y los abrazos masivos fueron abriendo el camino para que suceda esta acción, que por un lado demostró la defensa férrea que existe hacia a la universidad pública y por otro, dejó bien ilustrado el hartazgo que tiene la gente con este gobierno ajustador.

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La sesión en diputados

En el día después de la movilización, la bancada de Unión por la Patria, llamó a una sesión especial, en la Cámara de Diputados, para el tratamiento de la situación del presupuesto universitario. Dicho llamado no consiguió el quórum necesario para que se realice la sesión, con la particularidad de que legisladores que marcharon el 23 de abril no se presentaron a la discusión.

Fueron 124 legisladores los que se presentaron en la Cámara Baja para respaldar el inicio de la sesión, pero eran 129 los necesarios para su comienzo. Con los diputados de la bancada del Frente de Izquierda presentes, se buscó habilitar el tratamiento de los proyectos para aumentar el presupuesto universitario, restituir el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) y la actualización de la fórmula jubilatoria.

Lo llamativo de esta fallida sesión fue el faltazo, consciente, de algunos diputados, que en el día anterior habían dado el presente en la marcha universitaria. Aunque la presencia de alguno de estos personajes fue totalmente repudiada en el momento que los encontraron en la calle.

Una de las ausencias más escandalosas, por su nivel de oportunismo demostrado el día anterior, fue la del radical cordobés, Rodrigo de Loredo, quien fue abucheado en la marcha y en el congreso. Otros nombres fuertes que pegaron el faltazo fueron: Miguel Ángel Pichetto junto con los diputados de su bloque, tampoco dio quórum la diputada Margartia Stolbizer, los diputados peronistas de Tucumán y los legisladores cordobeses que responden al gobernador Llaryora.

Algunas de estas ausencias, como la del bloque dialoguista de la UCR, se enmarcan en las negociaciones que se están realizando con el gobierno para el tratamiento del paquete de leyes que quiere y necesita aprobar el gobierno de Milei. Claro está que toda la bancada libertaria y la del PRO no se hicieron presentes en la cámara.

Queda claro, por las acciones realizadas por parte del gobierno y del presidente, luego de la Marcha Federal Universitaria, que la masiva acción tuvo su efecto en la gestión libertaria la cual sufrió un duro sacudón del que puede llevarle un tiempo recuperarse. Al mismo tiempo la masiva acción callejera le dio vida a un proceso de movilización que puede jugarle en contra tanto al gobierno, como a las direcciones burocráticas opositoras, demostrando que la idea de que la gente no quiere luchar es falsa. Es por esto que cualquier movimiento, como el que la UCR realizó en el congreso, puede empezarle a salirles demasiado caro al conjunto de las direcciones políticas y sindicales de los partidos tradicionales.

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