Pese al agravamiento de la pandemia, el intendente de San Miguel sigue descargando un fuerte ajuste sobre el Hospital Larcade. Con más de 300 camas de internación y terapia intensiva, sus 950 trabajadores permanecen de paro desde hace 15 días. Bancando la emergencia sanitaria y luchando en defensa de sus derechos y la salud pública.
El 12 de mayo el equipo de salud del Htal. Larcade se vio obligado a recurrir a una medida que debió discutirse muchas veces en la asamblea general. Las medidas de lucha, los intentos de diálogo con el municipio de todo tipo, las intermediaciones, todo, absolutamente todo lo que hicieron en estos meses no logró que el intendente Méndez y el municipio abran un canal de respuesta a los reclamos de las y los trabajadores. Así fue que votaron paro total de actividades y llevan 15 días con esta medida.
El conflicto comenzó por las conocidas y ya famosas “chinches”: pase a planta permanente, recomposición salarial, paritarias ajustadas a la Provincia de Buenos Aires y carrera médica. Pero Jaime Méndez decidió no escuchar y aumentar el conflicto a escalas impensadas, por ello, a esas “chinches” se sumaron: basta de violencia laboral, basta de perseguir a lxs que luchan, reincorporación inmediata de la compañera Soledad Dreise y reinstalación a sus puestos de trabajo a lxs compañerxs desplazadxs.
El gobierno municipal de Juntos por el Cambio decidió mantener su postura de no reconocer a ATUHL como los verdaderos representantes de los trabajadores y a CICOP como el gremio elegido por los mismos.
Ante esto, el equipo de salud del hospital vota parar por tiempo indeterminado, y después de más de 10 días de paro se siguen sumando sectores que rompen con el miedo, van a las asambleas y deciden organizarse en ATUHL. Hasta la fecha son los sectores de Clínica Médica, Laboratorio, Pediatría, Cirugía, Cardiología, Rayos y otros los que se encuentran parados en su totalidad, sumando a ello un sector de enfermería, administración y residentes que se organizan y garantizan tanto al cese de actividades como el cuidado ante posibles nuevas actitudes violentas de la dirección del hospital y de la patota del municipio.
La asamblea permanente como método de lucha
Ante la situación de crisis, el equipo de salud responde con más organización y se declara en estado de alerta y asamblea permanente. Con algunos días mejores y otros no tanto, como en todo proceso de lucha, alrededor de 150 compañerxs se reúnen casi todos los días a las 11 en el pasillo central, donde se dan informes sobre el estado del conflicto, se escuchan las novedades diarias y desde allí se deciden tanto las medidas a tomar por el conjunto, como las respuestas de cada sector ante el hostigamiento diario de las autoridades del hospital.
En las asambleas se escuchan todas las voces sin distinción de función o profesión. Se discuten los métodos a utilizar y cada una de las propuestas es lanzada a viva voz y votada a mano alzada. La mayoría decide y la totalidad del lxs trabajadores lo ejecuta golpeando como un puño cerrado con unidad y convicción. Reconocemos y destacamos este accionar porque desde Alternativa Salud / MST estamos convencides de que este es el rumbo. “Que la base decida todo” no es solo una consigna, sino un camino que debemos seguir como trabajadores si deseamos que triunfe nuestra clase. La postura de ATUHL permanece impermeable a los métodos burocráticos que rondan otras organizaciones sindicales y que algunos sujetos acercan con el fin de corromper y desviar esta lucha. El equipo de salud en forma independiente y en unidad escribe su destino.
El municipio es responsable pero la provincia los deja hacer
Desde que empezó la lucha, el municipio no solo no responde a las demandas de lxs trabajadores, sino que los agrede y los amenaza. El 4 de marzo mientras ocurrían las elecciones de CICOP, una patota del intendente Jaime Méndez intenta secuestrar las urnas. Representantes de ATUHL se reunieron con el Dr. Kreplak, vice ministro de salud de Bs. As. y con el jefe de Gabinete, Salvador Giorgi y se comprometieron personalmente -hace 83 días- a entablar un diálogo con el intendente, mostrándose voluntariosos a resolver el conflicto y a fortalecer la salud pública de San Miguel. También ofrecieron todas las herramientas que estén a su alcance para repeler las hostilidades continuas del municipio, que remontan a épocas dictatoriales.
La fuerza de la lucha y la interpelación al gobierno provincial para que se comprometa a una solución de un conflicto que también involucra la salud de la población derivó en una serie de audiencias de conciliación por parte del Ministerio de Trabajo. El municipio se retiró de forma intempestiva de la primera reunión aludiendo que no reconocían a CICOP como sindicato y solicitan la presencia de los sindicatos municipales. Pese a que en la última audiencia se accedió a que Intendencia asista junto a sus “amigos” de los gremios municipales, persistieron en su postura de no reconocer la existencia de un conflicto colectivo de trabajo, ni a CICOP ni a ATE. El Ministerio de Trabajo solo “hace saber” al municipio que no se pueden adoptar medidas que modifiquen las relaciones y condiciones laborales existentes hasta que finalice el conflicto, se les “recuerda” la prohibición de despidos decretada por el Poder Ejecutivo Nacional y se les “solicita” el cese de hostigamientos y persecución a lxs trabajadorxs. Asimismo, no cede a sus reclamos de “cerrar el expediente”. Muchas palabras lindas, pero mientras tanto siguen las sanciones, el acoso laboral y el desplazamiento de trabajadores.
Van muchas audiencias, muchas reuniones, pero el Ministerio no obliga al municipio a retrotraer todas las medidas contra el equipo de salud. Y menos a considerar los reclamos laborales. El municipio ataca a lxs trabajadores y es el responsable, pero desde la provincia de Bs. As. los dejan hacer.
Lxs trabajadorxs del Htal. Larcade han pedido por diferentes medios y en diversas oportunidades la intervención inmediata de Provincia en la gestión del hospital e incluso la provincialización del establecimiento. Pero no han tenido respuestas. Exigimos al gobierno de la Provincia de Buenos Aires que intervenga ya y solucione el presente conflicto de manera inmediata ante el marco de una pandemia que deja a San Miguel sin su hospital central.
Estamos en una lucha larga, muy dura y muy difícil. Pero la fuerza y la unidad del equipo de salud, sus asambleas democráticas, su organización ATULH y la unidad con que se asumen todas las medidas votadas, nos convocan a seguir esta pelea hasta ganarla.
Voces de un paro histórico
Yanina Cisneros, médica residente de Clínica: “Llevamos 15 días de paro y nos decidimos a esto porque estamos cansados del nivel de violencia laboral ejercida por la directora Gladys Amantia, por Héctor Calvente y por la falta de respuestas a nuestros reclamos”.
Dr. Marcelo Morato, jefe de Rayos: “El paro es un derecho constitucional y la máxima expresión de protesta de los trabajadores que consideran agotadas las instancias de diálogo”.
Dr. Sebastián Motrel, cirujano: “El paro es un llamado de atención a las autoridades municipales, ciegas, sordas y ausentes ante el reclamo de derechos laborales de sus trabajadores de salud”.
Candela Ramírez