Este miércoles 31 se trató en la legislatura de Córdoba el proyecto de Rodrigo Agrelo, legislador de Encuentro Vecinal y representante del portal de Belén, para suspender la vigencia de la Ley de Interrupción voluntaria del embarazo en nuestra provincia.
Este, junto a otro proyecto para establecer la obligatoriedad a los efectores de salud de ofrecer una ecografía previa a la prática del aborto, la cual debía ser realizada por un equipo profesional alternativo al que atiende el caso, fueron tratados en la comsiión de salud que emitió dos despachos: uno en mayoría, rechazando las iniciativas de Agrelo y otro en minoría que recomendaba rechazarlos.
Ambos despachos entraron en la sesión pasada y todo parecía indicar que el rechazo iba a ser ampliamente mayoritario, sin embargo en la reunión de Labor Parlamentaria, varios bloques mostraron dudas: la UCR, el Frente Cívico, y el PRO dieron libertad de acción y Hacemos Unidos por Córdoba dijo que no sabía cómo iba a votar.
Eso encendió las alarmas y por todos los grupos feministas comenzó a circular la preocupación, varias compañeras incluso se acercaron a la sesión. Finalmente por 46 votos afirmativos contra 18 negativos y 6 abstenciones se rechazó la propuesta de Agrelo.
Quienes votaron en contra del rechazo, es decir a favor de prohibir la IVE en Córdoba, fueron: Carmen Pereyra (presidenta de la Comisión de Género), Juan Peirone, Nancy Almada y Walter Nostrala del Frente Cívico. Miguel Nicolás, Matías Gvozdenovich, Alfredo Nigro, Lucas Valiente,Víctor Molina, José Bría, Carlos Brinner, Ariel Grich, Graciela Bissotto y Carlos Carignano de la UCR. Patricia Botta (PRO), Hernandez Maqueda (Mejor Futuro), Spaccesi (LLA) y el autor del proyecto Rodrigo Agrelo. Además 2 de las abstenciones fueron de Hacemos Unidos por Córdoba, 3 de la UCR y 1 de Construyendo Córdoba.
Bastará una crisis
Nunca debemos olvidar las palabras de Simone de Beauvoir “bastará una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres vuelvan a ser cuestionados”. El debate de este proyecto así lo demostró, no sólo porque se reabrió esta discusión que creíamos saldada, sino porque muchos dudaron. incluso Hacemos Unidos por Córdoba votó el rechazo del proyecto fundándose solamente en que es una ley nacional, que regula en materia penal y que Argentina tiene centralizada la penalidad, a diferencia de países como EEUU, y por ende no correspondía que la provincia fuera en contra de una ley aprobada por el Congreso. Pero no se posicionó en defensa del aborto legal, seguro y gratuito.
Bien sabemos que cuando esa ley se trató en el Congreso el peronismo Cordobés se opuso, en esa oportunidad Alejandra Vigo dijo “Sostener como principal argumento que el aborto es un derecho de las mujeres y de su autonomía consagran una visión individualista sobre el tema”, y se quejó del tratamiento exprés, en un tema que tuvo más de 800 expositores y un debate popular permanente en la sociedad.
Por el contrario, la legisladora Luciana Echevarría (MST-FITU) sostuvo la defensa de este derecho que conquistamos con tanta lucha y esfuerzo. Y dedicó parte de su intervención a explicar cómo esta ley no sólo garantiza el derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos sin ser criminalizadas y condenadas a la clandestinidad, sino también el acceso a la salud pública “Veo que les preocupa mucho el tema de cuántos abortos se practican al año, hemos visto los afiches del Portal de Belen, “tantos abortos se realizaron en Córdoba en lo que va del año”… y qué nos dice ese dato? Así suelto, nada. Sólo sirve para seguir estigmatizando las decisiones. El verdadero dato de salud pública, es si se pudo o no reducir las muertes maternas por aborto. Y en eso podemos afirmar categóricamente que sí, tan sólo en el primer año de implementación, las muertes maternas por aborto descendieron casi en un 50%. Otro gran dato es si descendió o no la tasa de fecundidad adolescente (10 a 19 años) y las estadísticas muestran que sí, que desde el 2020 a 2022 descendió en un 34,5%. Sin datos certeros de salud pública, este debate no es más que un cúmulo de prejuicios, creencias y suposiciones. Situación en la que estuvimos durante años las mujeres y la historia muestra que lo único que eso garantizó fue la imposición sobre nuestros cuerpos de las decisiones que siempre tomaron otros Iglesia, maridos, familias, etc.etc”.
Y cerró su participación en la sesión diciendo “Hoy más que nunca vamos por la separación de una vez por todas de la iglesia del estado. la misma que históricamente se enfrentó a los derechos más básicos, al uso del preservativo, de la educación sexual integral, de los anticonceptivos, de la ley de divorcio, del matrimonio igualitario. Es una lista interminable.
A todos los que van a levantar la mano les decimos “la maternidad será deseada o no será” y a la clandestinidad no volvemos nunca más”