Otras declaraciones de guerra. El presidente, luego de su gira por Europa, volvió a dar una entrevista radial. En el programa de radio Rivadavia que conduce Jonatan Viale, Milei volvió a hacer gala de su política contra los trabajadores. Dejó en claro que no piensa convocar a la paritaria docente a nivel nacional y no va a dar ningún aumento del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVyM) tras la frustrada reunión en el día de ayer.
Mientras la inflación está horadando los salarios que no aumentan, el presidente, cuando le preguntaron si iba a aumentar por DNU el salario mínimo, dijo: “No creo que un político pueda determinar un precio a mano. Ni se me ocurre. ¿Yo voy a emitir un decreto fijando un precio?”. De esta manera busca hacer uso de la “licuadora” con gran cantidad de ingresos, principalmente las partidas destinadas para el programa Potenciar Trabajo, que es apenas la mitad de un salario mínimo. Dicho monto, ayer, en el Consejo del Salario, no se aumentó por desacuerdo entre las partes empresariales, sindicales y gubernamentales. Sin embargo, más allá de las críticas, desde la CGT y las CTA no hay ninguna convocatoria a una acción en concreto. Como dijo Pablo Moyano “no sé la fecha”, mientras el ajuste corre.
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A lo dicho, entre anécdotas que Milei le relataba a sus bufones de la prensa tradicional, que no es más que la sentencia de que el salario mínimo siga retrasado escandalosamente en comparación con la canasta familiar, también sumó más nafta al fuego al decir que: “La gran mayoría del DNU está en funcionamiento y uno de sus éxitos rotundos es en los alquileres, donde se duplicó la oferta y en términos reales el precio de los alquileres se está desplomando”. Para el presidente una de las pesadillas más grandes de los trabajadores, como pagar el alquiler que, ahora, por sus políticas aumenta cada tres meses, es todo un éxito de su gobierno. Claridad conceptual en el bando que se ubica y los intereses que defiende, el lobby inmobiliario.
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Como si todo esto fuera poco, el mandatario también se refirió a la paritaria nacional docente. Haciendo alusión a una idea perversa de “federalismo”, dijo que la educación corre por cuenta de las provincias. Por tanto, negó que vaya a convocar a una paritaria. Una contradicción con lo que, tiempo después, anunciaba su vocero Adorni, quien decía que se había acordado una cita para destrabar el conflicto docente y asegurar el inicio de clases. Toda una contradicción de este gobierno a la que en dos meses ya nos acostumbra a estas prácticas
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Lo cierto es que las expresiones de Milei son una denostación a los trabajadores en general y a los docentes en particular. Su anuncio de vouchers para las familias que manden sus hijos a las escuelas privadas (subsidiadas por el Estado), es una muestra de desprecio a la educación pública.
Todas estas declaraciones del presidente grafican el modelo de su gobierno. Donde la única libertad que avanza es la de la ganancia empresarial, mientras se destruyen los salarios y cualquier tipo de derecho laboral. Un plan de gobierno pensado al servicio del 1%, en contra de las mayorías trabajadoras y populares. Milei y su gobierno, en suma, para quienes pensaron que iba a ser un cambio por su grito contra la “casta”, está siendo una estafa y, a la vez, continúan la guerra contra todos aquellos que viven de su trabajo.