Este sábado 3 de noviembre se llevó a cabo la caminata de exploración y de reconocimiento de especies nativas en el Parque la Vida, donde dialogamos con algunes de les vecines organizades por la preservación del parque frente al intento del avance de proyectos de cementación urbana por parte del gobierno municipal y provincial de Córdoba.
El Parque la Vida representa hoy el segundo pulmón verde de Córdoba, es bosque nativo integrado por árboles autóctonos, una diversidad de flora y fauna que es habitada -y hoy defendida- diariamente por les vecines de los barrios aledaños.
El primer intento de avanzar sobre el parque se dio por parte del Club Atlético Barrio Parque. Con este primer proyecto se pretendía privatizar una parte del espacio público para la construcción de canchas y vestuarios privados, donde solo accederían quienes paguen la cuota del mismo. Cabe mencionar que la construcción prevista incluía la tala de numerosísimos árboles añejos. La resistencia a este proyecto funcionó como motor de organización por parte de la comunidad, quienes lograron frenar este primer intento.
Sin embargo, hoy quienes pretenden intervenir en el espacio verde son los mismos gobiernos municipal y provincial, quienes presentaron el megaproyecto “Mi Parque de la Vida”. Les vecines denuncian al mismo por su ilegalidad, ya que no se consultó ni se informó a la comunidad aledaña, es decir a los principales afectados por este cambio del uso del espacio verde, como tampoco se realizaron los estudios de impacto ambiental correspondientes.
“La persona que está en el territorio es la persona ninguneada, que se entera cuando viene el camión o la topadora, como en el caso de las sierras, que estamos viviendo lo mismo y le está volteando el árbol donde juega su hijo -haciendo referencia al proyecto de autovía de Punilla-. Recién ahí se entera y la ley es bastante clara en este punto, por que es obligatorio primero consultar y después informar en la consulta y la audiencia pública y todos los pasos que prevé la ley, y finalmente se decide. Pero bueno, en la obra pública hay todo el negocio, sabemos que no hay voluntad de que el vecino opine, no hay voluntad de eso”. (Entrevista realizada a Mari, vecina del barrio).
Cabe mencionar que la municipalidad ya en 2017 anunció y avanzó en la construcción de un polideportivo en la zona sur del parque, incluyendo canchas y hasta una pileta pública, sin embargo pasaron los años y la misma aún está en obras. El nuevo intento de avanzar sobre el parque no retoma estas construcciones abandonadas, sino que continúa en otros espacios verdes.
La respuesta al reclamo conjunto y organizado por parte de les vecines, quienes ya habían logrado frenar el avance del club privado fue la promesa parte de Miguel Siciliano, secretario de Gobierno y de Gestion Gral. de Gabinete, de que “nada se iba a hacer sin el consenso de los vecinos” y que iba a convocar a los centros vecinales y otras instituciones. Sin embargo, a pesar de que les vecines no volvieron a recibir ninguna convocatoria ni llamado por parte del gobierno, hoy están viendo avanzar camiones y máquinas sobre el parque.
¿Qué se puede esperar del burro más que una patada?
El avance de la cementación urbana en Córdoba es moneda corriente por parte del gobierno del PJ, tanto es así que hoy, siendo una ciudad extensa, cuenta con una superficie verde por habitante muy por debajo de lo recomendado por la OMS, que establece 15m2 por habitante; mientras que hasta el 2020 los datos muestran que solo tenemos 8m2.
Con el correr de los años vemos perder flora y fauna autóctona, vemos quemar frente a nuestros ojos el bosque nativo. Los números hablan por sí solos: a principios del siglo XX nuestra provincia tenía 12 millones de hectáreas de bosques nativos originales. Al día de hoy solo quedan unas 300 mil hectáreas en pie. Es decir que hemos perdido, o mejor dicho se ha desmontado, más del 95% de nuestro bosque. Nuestra provincia tiene el triste récord en las últimas décadas de ser la que más ha deforestado en todo el país, presentando la tasa de desmonte más elevada.
Los mecanismos de destrucción del agua, la tierra, el aire y la biodiversidad han sido variados, pero siempre hay un denominador común: la sed de ganancia de los empresarios que con el aval de los diferentes gobiernos han avanzado sobre el ambiente, prometiendo un mal entendido “progreso” y destruyendo todo a su paso.
Se hace indispensable tomar decisiones a favor de la conservación en todos sus aspectos, y el aumento de las superficies verdes; la conectividad entre ellas y la conservación de la biodiversidad deberán ser sus ejes primordiales, ya que de ellos dependerá en gran parte, el abastecimiento hídrico, la calidad del aire y la mitigación de los efectos del cambio climático.
Sin bosques no hay vida. Parece obvio, pero hoy nos encontramos en lucha para defenderlos. Y esto se logra tomando medidas concretas de protección y preservación que sean definidas y controladas por las comunidades, que son las que realmente están preocupadas por el ambiente y vienen, en los hechos, ejerciendo el cuidado durante todos estos años, como hemos visto en el Parque la Vida, donde les vecines ponen el cuerpo y el corazón, pero también el hombro y la fuerza para enfrentar a estos gobiernos que toman decisiones a nuestras espaldas y que devastan lo poco que nos queda.
Acompañamos y luchamos, junto a les vecines organizades en el colectivo Preservando el Parque la vida quienes concientizan, visibilizan, resisten y activan en el lugar tratando de salvar de la destrucción de este pulmón verde natural, enfrentando la voracidad desarrollista con su cementación voraz.
Tal como nos comentó Mari: “Hasta último momento vamos estar acá poniendo el cuerpo en el parque, reconociendolo, abrazándolo. Las maneras de luchar son diversas, tan diversas como nosotres, estamos decidiendo cómo es el Parque que queremos y exigiremos que los gobiernos se hagan eco de nuestros pedidos . Nos vemos en las calles”.
Tenemos el desafío de hacer primar los intereses de todes por encima de los negocios de unos pocos. La solidaridad sobra, por eso esta jornada contó también con la presencia de Maru de “Fuera Porta”: “Porque creemos y estamos concientes que las luchas no se hacen en solitario sino en red, nosotros tenemos que estar presente aquí y como los del Parque de la vida tienen que estar en otras luchas por que todos los intereses son los mismos, luchamos contra el mismo monstruo”.
Ana Nieto y Emanuel Oliva