Sobre el filo del año y en una maratónica sesión, finalmente el PJ – Frente de Todos, con la derecha de Juntos, votaron la cuestionada reelección de los intendentes. Además del Presupuesto 2022, un mayor y multimillonario endeudamiento, el nuevo paquetazo impositivo, la reforma a la ley de ministerios y distintas designaciones de cargos como parte de la transa para acordar todo este bodoque de leyes de ajuste que envió Kicillof y fueron votadas por “Todos y Juntos”, haciendo honor a los nombres de ambas coaliciones.
La mega sesión es toda una muestra del escandaloso funcionamiento de esta pseudo democracia, al servicio de los ricos y corruptos, en el mayor distrito del país. Disponiendo de manera escandalosa de los recursos de casi 18 millones de habitantes por más de 3 billones de pesos, (es decir, de 3.1 millón de millones de pesos). Un nuevo endeudamiento por casi $ 180.000 millones, entre los créditos en dólares y en moneda local. Y toda la carga impositiva que se sigue descargando en el pueblo trabajador, mientras los ricos, las corporaciones y familias dueñas de la Provincia no pagan, evaden o tienen una carga impositiva sumamente regresiva, en relación a sus inmensas riquezas.
Los intendentes por sobre las necesidades sociales
La maratónica sesión estaba convocada originalmente para las 15 hs, luego de que realizáramos una nueva e importante protesta con el Frente de Izquierda Unidad y distintas organizaciones sociales. En la que volvimos a cuestionar y rechazar este paquetazo de leyes, de repartija de cargos, con reelecciones y privilegios de la casta política gobernante, más la nueva y mayor hipoteca que paga siempre el pueblo trabajador.
Pero el Presupuesto 2022 o “ley de leyes”, se votó en poco más de 20 minutos de “tratamiento” en Diputados, a eso de las 0:20 hs, ya muy entrada la noche. Y el Senado lo convirtió en ley luego, a las 2:45 hs de la madrugada. Mucho más que “entre gallos y medianoche” como suele decirse.
Igual, desde el punto de vista del capitalismo semicolonial y dependiente en el que estos gobiernos colocan al país, estaba todo bien. Ya que el marco ordenador lo daba el acuerdo con el FMI que exige estos mayores ajustes en las cuentas públicas de Nación y las provincias. Sobre esto hemos desarrollado distintas notas para entender los niveles de ajuste que implican.
Pero el tema de la reelección de los intendentes, verdaderos señores feudales que se sienten dueños de sus municipios, era la prioridad N° 1 en la agenda de esta casta política del sistema. Algo completamente alejado de las necesidades sociales, del 43,8% de pobreza, que sube al 51.6% en el conurbano bonaerense y se eleva al 64,9% en las infancias y adolescentes.
Muy lejos también de la acuciante falta de trabajo y del enorme salto en los contagios de COVID, pese a que el Presupuesto 2022 dejó de incluir las partidas que se destinaron este año para atender la emergencia sanitaria. Es así luego de «decretar» que la pandemia habría terminado y estábamos en una nueva normalidad, la que claramente no es tal. Con lo que consagran un presupuesto para salud a la baja.
Como no había acuerdo cerrado en el Frente de Todos ni en Juntos sobre cómo votar las reelecciones, los intendentes de ambas coaliciones, para estar seguros de perpetuarse en el poder, pusieron como condición que primero saliera esta ley para después votar el resto del paquete.
Privilegios repugnantes de casta, en un proyecto unificado entre el PJ y la derecha
Querían tener garantizado que todos se pueden volver a presentar en el 2023 y seguir atornillados muchos años más en los sillones. Por eso todo se fue retrasando y la primera ley que se trató y aprobó fue la que les permite reelegirse. Sobre la medianoche y más, se terminó votando el Presupuesto y la ley impositiva, es que en eso había acuerdo en ajustar.
Así en escaso tiempo en el Senado y de forma exprés en Diputados se acordó aprobar un proyecto que unificaba las dos leyes para las reelecciones, presentadas por los senadores de Juntos Juan Pablo Allan y Joaquín De la Torre y del Frente de Todos, Gabriela Demaría.
Para tener en claro cómo funciona esta democracia para los ricos y corruptos, vale seguir el supuesto debate en las «sesiones» de ambas cámaras. Porque evidencia que todo es un circo, una parodia o puesta en escena, ya que todo lo arreglan por detrás. Se cocina en los pasillos y oficinas, en los telefonazos y las bajadas de línea para ordenar el “levanta manos” de ambas coaliciones pro capitalistas.
El reflejo que fueron dejando las redes del senado y de diputados se puede ver que, recién pasadas las 19 hs, arrancó la sesión del senado. Y que de manera rápida, después de haber tratado algunas designaciones, a las 20.30 hs se aprobó la ley que habilitó las reelecciones. El proyecto pasó formalmente a Diputados, donde la sesión arrancó a las 20:13 hs una vez que estaba claro que salía el acuerdo en el senado. Ahí, en Diputados, a las 20:29 hs juró Martiniano Molina y al toque, a las 20:42 hs se aprobó la ley para las reelecciones. Todo muy exprés, muy cocinado en la trastienda.
Como explicamos en otra nota (ver aquí), para eso se modificó la ley 14.836 aprobada en 2016, con la que se limitaba a dos mandatos seguidos para poder reelegir a intendentes, legisladores, concejales y consejeros. Al cambiar el Art. 7° de aquella ley, dejaron en claro que todos podrán ser reelectos por un tercer período consecutivo. En un acuerdo que no es menor ya que se necesitaba una mayoría especial de los dos tercios de ambas cámaras para poder tratarlo y luego aprobarlo.
Así, en 2023, se calcula que entre 90 y 100 intendentes se podrán volver a presentar por tercera vez, aunque tenga dos mandatos seguidos, regenteando sus municipios. Así en el 2023 cumplirán 20 años al frente de sus municipios unos 10 intendentes; otros 5 lo harán por 15 años, 10 intendentes por más de 10 años. Y más de 60 que debían irse, se podrán volver a presentar.
Esta exigencia de los barones del conurbano y los caciques comunales del interior implicó tener a toda una legislatura frenada, transando para asegurarle a ese puñado de políticos del sistema, que tendrán unos años más en el manejo discrecional de sus intendencias. Si bien no se votó la reelección indefinida como planteaba el proyecto del PJ, es cierto que esta limitación de las reelecciones queda bajo un «respirador artificial». Y que la corporación política bonaerense aprovechará estos años para volver a la carga y tratar de derogar incluso esta limitada ley.
Sólidos acuerdos entre el PJ y la derecha
Los argumentos del PJ son de un cinismo absoluto, la senadora Teresa García, ex ministra de gobierno de Kicillof, “puso en valor el rol de los intendentes” y los ensalzó como «figura muy importante para la construcción del poder político y los espacios constitucionales». En igual sentido hablaron otros dirigentes del Frente de Todos, llenándose la boca sobre la “voluntad soberana” del pueblo para elegir, la autonomía de los municipios y la defensa de “la autodeterminación de los pueblos”. Inaudito.
A esta gente no les interesa el pueblo ni su autonomía y menos su autodeterminación, todo lo contrario: solo mantenerse en el poder para seguirla vulnerando con esta democracia amañada, para ricos y corruptos.
Incluso, como muestra del sólido acuerdo con el PJ, en la derecha de Juntos solo 11 de sus 41 diputados votaron en contra, implicando un nuevo y duro fracaso de la ex gobernadora Vidal quien intentó, con la poca tropa que le queda, defender su «legado» legislativo.
Un asco lo de Vidal, que se cansó de atacar a docentes, estatales y demás sectores y se desnuda ahora en los videos de su ex ministro de Trabajo, como la armadora de causas y ataques a los trabajadores y sus conquistas. Su “legado” fue hundir aún más a la Provincia, en la mayor de sus crisis. Claro que eso lo hizo con el aval del PJ que cogobernó con ella en sus 4 funestos años, al votarle a Vidal todos sus presupuestos, paquetazos impositivos, leyes de ajuste y el mayor endeudamiento de la historia.
Hasta Fabián Perechodnik, quien fuera secretario General de la Provincia con Vidal, se le dio vuelta. Ahora responde a Garro y Santilli, igual que otros que también avalaron. Además de los que reportan a Jorge Macri; quienes están con Patricia Bullrich, con Angelici, Emilio Monzó y el radical Facundo Manes. Acá no hay grieta.
Desde el Frente de Izquierda Unidad se votó en contra del tratamiento sobre tablas de este proyecto repudiable. Ni siquiera había pasado por el respectivo tratamiento en Comisiones. Es decir, a la hora de bancar los privilegios se saltan todas las formas. Solo que, una vez puesto en consideración, el PO votó también el rechazo a esta ley que habilita la re reelección de funestos personajes en 2023. Pero IS, sin debate previo y pese a compartir horas antes una nueva acción conjunta del FIT Unidad, decidió abstenerse, lo que mostró una equivocada votación dividida del Frente. Cuando el resto de las fuerzas del FIT-U descontábamos el voto en contra como lo más correcto. En ese punto no fue un buen comienzo para la bancada bonaerense. Aunque es de resaltar que en todos los demás proyectos se votó unificadamente como habíamos debatido y expresado en la lucha, en las calles y con declaraciones muy correctas que valoramos. Incluso presentando proyectos en esta mega sesión en apoyo a Chubut, en repudio a la represión al barrio 1° de noviembre en La Matanza y ante el escándalo por la Gestapo del ex ministro de Vidal. Si bien la abstención no avala ni incidió en la aprobación de esa ley, hay consenso en que se trata de aspectos a revisar para fortalecer aún más al FIT Unidad en éste y en todas las cuestiones de la lucha política y de clases.
Revoleo de cargos para las alas del PJ y para Juntos
Para aceitar y untar más todos estos acuerdos, se designaron cargos claves, como la aprobación de los pliegos para el directorio del Banco Provincia y en otras áreas.
Además, Kicillof tuvo que conformar a las distintas alas del PJ, en su nuevo y recortado poder después de la derrota electoral, y crear 4 nuevos ministerios para dar puestos y manejo de caja a cada sector interno. Por eso se votó la nueva ley de ministerios que modifica la Ley 15.164 y eleva a un total de 16 los ministerios del gabinete provincial. Al crear cuatro nuevas carteras: la de Ambiente, a cargo de Daniela Vilar, diputada de La Cámpora y esposa del presidente de la cámara de Diputados bonaerense, Federico Otermín; el de Hábitat y Desarrollo Urbano, con Agustín Simone como hombre de Kicillof que debió ser reubicado; el de Transporte con el massista Jorge D´Onofrio y el Instituto Cultural de la Provincia como entidad autárquica con la platense y devota kirchnerista, Florencia Saintout.
También y como parte de la poda de poder y reconfiguración del gabinete de Kicillof, se aprobó el pliego para designar a Alberto Sileoni al frente de Educación, quién fuera ministro de Cristina y ahora la Jefa lo había “sugerido” para la DGCyE bonaerense.
Con relación al toma y daca de cargos en el Banco Provincia, el sector de Massa ubicó a Sebastián Galmarini; Humberto Vivaldo va por los intendentes de Insaurralde y Cascallares; Daniel Horacio Barrera por estar alineado con Espinoza de La Matanza y solo Alejandro Formento quedó como impulsado por Kicillof. La oposición de Juntos también cuela 3 cargos a designar para los suyos, claro.
Pero no solo en el BAPRO, sino también en otras apetecidas áreas de gobierno como la Defensoría del Pueblo, la Tesorería, Contaduría, etc. Además de empresas del Estado, todos sitios con suculentas dietas, asesores, fondos y privilegios.
Así cierran el año y podrán brindar “felices” con las nuevas reelecciones, con el control de cajas, cargos y prebendas. Es el «vuelto» formal y legalizado o blanqueado de esta democracia para ricos que el Frente de Todos y Juntos facturan a cambio de votar todos estos repugnantes ajustes al pueblo trabajador. Con leyes y normas que benefician a los ricos, a los bonistas, al FMI, las corporaciones, terratenientes y banqueros.
Esta democracia para ricos no va más
Por este sistema profundamente injusto y regresivo es que crece el Frente de Izquierda Unidad como tercera fuerza nacional y el MST suma su aporte vital. Avanzando además en los gremios, sectores sociales, estudiantiles y en las calles.
Esta bochornosa postal de las sesiones sobre fin de año en la legislatura bonaerense, la principal y más rica provincia del país, la que concentra el 38% de la población, casi el 40% de las corporaciones, de la producción y riquezas, es una razón más para seguir luchando por dar vuelta todo. Terminar con todos estos privilegios y prebendas, aplicando las medidas que desarrollamos en la nota sobre las reelecciones, es clave. Como parte de una profunda reforma política que permita radicalizar la democracia, al servicio del pueblo trabajador.
Las rebeliones como las de Chubut, donde se reclama «que se vayan todos» son el indicio de cambios a favor de los de abajo, los trabajadores y pueblos. En eso estamos empeñados desde el MST – FIT Unidad.