Pese a los inéditos picos diarios de contagios, con centeneras de muertes y el fuerte crecimiento de casos en las infancias y adolescentes, el domingo 18 por la noche, Larreta y su ministra Acuña insistieron en afirmar que el lunes 19, “habrá clases presenciales en las escuelas de la Ciudad”. Pero fracasaron.
La foto que intentaron mostrar ciertos sectores de la corporación mediática, reflejó el rotundo fracaso a esa incitación aberrante a rebelarse contra una medida necesaria, como la suspensión provisoria de la presencialidad, más allá de las limitaciones con que la dispusiera el gobierno nacional.
Cachetazo a Larreta y los sectores privatistas de la educación
Lo logró la firme decisión de lucha docente y también de auxiliares, superando a las burocracias sindicales, en un debate franco y democrático en asambleas y encuentros con las comunidades educativas de cada escuela, con los comités de infraestructura, higiene y bioseguridad que se lograron formar y con las familias que pelearon por un regreso seguro. Todo eso aisló al gobierno de Larreta y fue un cachetazo a los intereses corporativos y privatistas que impulsaron la campaña #ALasAulas, la que hoy se reformula como “padres organizados” o “Abran las escuelas”.
La entrevista que una apagada ministra Soledad Acuña, dieera a un medio pro-aperturista como TN el lunes 19 a las 9 horas, fue lapidario. Esa ministra que suele burlarse de los sindicatos, decir que los paros fracasan, que siempre dice estar “feliz” por el apoyo de las familias a sus medidas, apenas pudo hacer un deslucido balance de la jornada, clara expresión su fracaso. Ante la consulta sobre cómo definía la respuesta al llamado a las clases presenciales, la otrora exultante ministra Acuña, solo atinó a confesar por TV: “Hoy es un día raro en la Ciudad…”.
Ante la insistencia del periodista para que diera porcentajes de adhesión, la ministra sacó de la galera un dato también “raro”, al decir que “un 60% de las escuelas pudieron abrir…”. Pero esa no era la pregunta, ya que las escuelas generalmente están abiertas, incluso en días de paro. Es decir, si un 40% de las escuelas tuvo cierre absoluto y el resto, abiertas aunque sin asistencia de docentes y estudiantes, el paro y rechazo fue masivo a su política, lo que se evidenciaba en el demacrado rostro de Acuña.
El periodista no podía entender lo que escuchaba, por lo que insistió preguntando qué alcance tenía el paro, pero la ministra salió a hablar sobre la postura de la Sociedad de Pediatría y ni una palabra sobre el paro. A esta altura, el incrédulo periodista intentó ir por otra vía, a ver si así Acuña reaccionaba. Y le lanzó: «Pero, ¿van a descontar el día de paro?» Y la ministra apenas pudo repetir: “Hoy es un día muy difícil de evaluar, no es para pelearnos con los sindicatos y no podemos evaluar tampoco porqué faltó cada docente…”, así que de descontar, nada. Fue la respuesta final y sonó la campana, con la bofetada de la realidad.
Ahora bien y en honor a la verdad, lo cierto es que la Sociedad Argentina de Pediatría emitió un documento junto a la UNICEF que propone lo opuesto a lo que Larreta y Acuña nos quieren vender. Mienten descaradamente ya que el comunicado del 15 de abril, proponen textualmente lo contrario: «la Sociedad Argentina de Pediatría y UNICEF instan a las autoridades a que esta decisión de la NO presencialidad escolar por las razones epidemiológicas de público conocimiento, sea durante el menor tiempo y lo más sectorizado posible». Cuestión que compartimos al reclamar una suspensión provisoria, solo que agregamos que el retorno a la presencialidad debe ser con las garantías y condiciones seguras que venimos demandando. Pero que los gobiernos, la Iglesia y demás patronales de la enseñanza privadas, niegan.
A pesar de toda la evidencia en contrario y de los países del «primer mundo» que cerraron escuelas en sus segundas olas, incluso de Uruguay y Chile; los medios hegemónicos intentaron mostrar “rebeliones” de padres y familias “organizadas”, pero se dieron apenas con pequeñas y puntales concentraciones. Claro que altamente ideologizadas y emparentadas con posturas negacionistas. Las que hacen centro en la individualidad y «libertar» personal, en lugar del bienestar social. Quizás la más importante fue la del selecto colegio ORT de Belgrano, que había militado el desconocimiento al DNU de suspensión por 15 días de la presencialidad.
El colegio ORT había sacado un comunicado a las familias, agarrándose del fallo de la justicia adicta al PRO para informar que “en virtud de lo establecido por la justicia de la Ciudad, el lunes 19 se dictarán clases presenciales, de acuerdo al cronograma de horarios vigente para cada curso”. La ORT es un colegio careta que viene de despedir a dos profesoras que pararon el miércoles 14 para exigir la suspensión de las clases presenciales, tal como fueron impuestas con perversidad y sin garantías, en medio de los picos inéditos de contagios.
En este caso se trata de Mariana Sampaíño y Violeta Sznaider, que trabajan en la institución desde hace más de 10 años y a quienes les damos nuestro apoyo y solidaridad. Pero ya la ORT había despedido a más de 10 docentes por organizarse gremialmente y no responder a sus intentos de adoctrinamiento. A este colegio llevaba sus hijes el ex ministro de educación de Néstor Kirchner, Daniel Filmus, en lo que tampoco hay grieta con la privatista Acuña.
Pero lo más funesto fue escuchar el domingo, a Adrián Moscovich, CEO Ejecutivo de ORT, que lucra con la educación e impone contenidos, currículos, etc., ufanarse por tener 10.500 estudiantes y luego reconocer, sin sonrojarse, que contaban con un 20% a 23% de contagios reales. Bochornoso. Solo les interesan sus cuotas y ganancias, no la educación.
La lucha sigue con paro de 48hs el martes 20 y miércoles 21
El paro docente del lunes 19 superó el 90%, una adhesión total. Fue importante recibir apoyos como el del Plenario del Sindicalismo Combativo. Ante la masiva respuesta de las bases, la insistencia de Larreta y la falta de respuesta del gobierno de Alberto Fernández y un ministro Trotta que se llamó a silencio, la burocracia Celeste de UTE tuvo que volver a convocar a paro para hoy, martes 20, claro que sin abrir espacios de decisión democrática para resolverlo.
En sentido contrario y buscando poner el centro en la democracia de bases, una masiva asamblea de más de 1.000 docentes convocada por Ademys, votó la continuidad del paro total por 48 hs, los días martes 20 y miércoles 21 con nueva asamblea ese día para evaluar y definir la continuidad.
Las medidas exigidas ponen el acento en reclamar al gobierno de Larreta y Fernández que garanticen dispositivos y conectividad gratis para la totalidad de la matrícula y docencia. Vacunas y testeos, reducción del transporte, entre otros reclamos que desarrollamos en esta nota. En ese contexto, como señalara Alejandro Bodart (MST en el FIT Unidad), “está bien suspender las clases. Pero hay que ir más a fondo: restringir toda actividad no esencial y dar ayuda social a los más pobres”. Quien también cuestionó la falsa grieta en educación, entre Larreta y Fernández.
También nuestra referente Cele Fierro, cuestionó la hipocresía y la irresponsabilidad criminal de Larreta. Ya que «hablan» de la educación ante la prensa, pero para defenderla, deben aumentar fuertemente el Presupuesto educativo que recortaron hasta el nivel más bajo desde el 2001. Aumentar también los salarios docentes para trabajar un solo cargo y no en varias escuelas, además de restituir las partidas para infraestructura y dispositivos necesarios.
Con la fuerza de la lucha, la organización, el debate democrático y la unidad junto a estudiantes, familias y comunidad, ¡vamos por todo!
Vanesa Gagliardi, Directiva de Ademys
Legisladora electa porteña del MST-FIT Unidad
Alternativa Docente, ANCLA