A pocos días de las elecciones del 22 de octubre uno de los editorialistas centrales de Clarín, Ignacio Zuleta, nos ha dado la razón[i]. Contradiciendo largos artículos del periódico en que trabaja, favorables a Juntos por el Cambio, y también a los que, como Pagina12 o C5N lo hacen por Massa, afirma que cuatro -de los cinco candidatos- coinciden en lo básico, solo la izquierda es diferente.
Así, cuando iniciamos la última semana de campaña, cuando los candidatos hacen actos y entrevistas remarcando sus diferencias con el resto, Massa denunciando que sus dos adversarios principales Bullrich y Milei, representan opciones de derecha que quieren liquidar las conquistas sociales, la “Pato” afirmando que el kirchnerismo dilapida los dineros públicos y que el plan de Milei es inaplicable, el libertario denunciando a todos por pertenecer a la casta –que él no integraría pese a sus amigos empresarios, militares y a Barrionuevo-, para Zuleta “las diferencias ideológicas y metodológicas son mínimas”, “las diferencias de estilo, en política, son triviales, aunque sirvan para construir audiencia y mejorar el rating”.
Esto explicaría “que la disputa para el 22 de octubre sea en torno a estilos personales y con el acento que las campañas sucias ponen en la virtud (o la falta de) ajena: videos de yates, de turbios cajeros automáticos, filtraciones canallas de conversaciones indiscretas de ferrocarril de corta distancia, acusaciones de casta, de usar léxico canyengue y reproches de insinceridad en las relaciones entre los competidores”.
El editorialista, que todos los lunes ocupa casi dos páginas de Clarín con sus reflexiones, demuestra con argumentos sólidos su posición, que contradice tanto “relato”, electoral: “Salvo Myriam Bregman -y hasta las PASO, Juan Grabois-, Sergio Massa, Patricia Bullrich, Javier Milei y Juan Schiaretti coindicen en lo básico. Hablan con los mismos economistas, firman comunicados contra la barbarie de Hamas en Israel, hasta han firmado un documento sobre la forma de certificar compras en tickets y facturas. Rezan con unción el credo laico de la teología de mercado. Creen en la unificación del tipo de cambio, algún juguete bimonetario, la baja del déficit, de la inflación, la reducción de los subsidios, el acuerdo con los multilaterales y la apertura de la economía, el sinceramiento de las tarifas y las mejores relaciones con Estados Unidos -pero también con China, quieren estar en el G-20 y también en los BRICS-.”
Le faltó decir que la izquierda tiene razón en señalar a todos los candidatos como aplicadores del programa del Fondo. En lo central, recoge lo que venimos diciendo, que más allá de diferencias entre ellos, todos los candidatos, tienen un programa de ajuste y sumisión.
No coincidimos en su apreciación de Grabois, ya que el protagonista de las PASO de Unión por la Patria, tiene un programa distinto al de Massa, pero en vez de dar pasos independientes para defenderlo e impulsarlo, destinó su función a ser una colectora útil de Unión por la Patria, para que no se le escapen votos al candidato ministro hacia la izquierda. Es decir, con el argumento de sumar para que no gane la derecha,llama a votar al que defiende un programa de derecha opuesto a sus planteos, además de que el peronismo y su candidato no ha evitado que crezca esa ultraderecha de Milei, todo lo contrario. Sus medidas económicas, como las políticas aplicadas por este gobierno de Alberto, Cristina y Sergio, son la razón de porque millones han dejado de votar al peronismo y se han fortalecido las variantes de derecha y ultra derecha.
Tampoco coincidimos con el mensaje tranquilizador y erróneo del editorialista: “Que los candidatos coincidan en la misma agenda, expresa que esa es la agenda de la sociedad” ya que “eso es lo contrario al caos”, “aunque los ladradores de la prime time digan que el domingo que viene se juega el destino universal”.
Calificar que una agenda que incluye un durísimo ajuste a la mayoría trabajadora de este país y una creciente entrega de nuestros bienes comunes a las multinacionales, para juntar los dólares para pagar esa gigantesca estafa que es la deuda con el FMI y los buitres acreedores, es la “agenda de la sociedad”, es minimizar la enorme crisis política que se refleja en el gran crecimiento del voto bronca y la ruptura de millones con los partidos tradicionales.
Es también subestimar, que pese a la enorme confusión que genera el enorme aparato mediático y clientelar que se despliega en cada acto eleccionario para favorecer a las variantes que defienden al sistema, los trabajadores y sectores populares no van a reaccionar cuando la verdadera agenda, la de la devaluación y brutal ajuste que intentarán aplicar después de las elecciones se haga efectiva.
Pese a las diferencias con estos aspectos de su análisis y otros tantos de su extenso trabajo, hay que reconocer que Zuleta ha expuesto en su artículo, con total claridad, el programa que defienden y ha señalado que ese no es el programa de la izquierda. Por eso, este 22/10 acompañanos con tu voto a los que proponemos una alternativa opuesta por el vértice, a los que sostenemos que para que los salarios, jubilaciones y planes sociales cubran la canasta familiar. A los que sostenemos que para terminar con la brutal inflación y el enriquecimiento de unas pocas empresas y ricachones en base a la miseria de todos los trabajadores, hace falta romper con el FMI, nacionalizar la banca y el comercio exterior. Que hay que descargar fuertes impuestos sobre las grandes empresas, para que, en el marco de un programa anticapitalista y socialista, los recursos naturales y humanos de este país sean utilizados al servicio del desarrollo y las necesidades de la inmensa mayoría de los argentinos, que trabajan todos los días por crear la riqueza que luego los capitalistas se llevan.
Este domingo, vota las listas del FITU, que llevan a la compañera Myriam Bregman como candidata a presidente y a cientos de luchadores populares que, como Cele Fierro, nuestra candidata a legisladora por la Ciudad de Buenos Aires, van a pelear es sus tribunas parlamentarias y en las calles para defender tus derechos, y en esa disputa van a construir una alternativa política distinta junto a millones de trabajadores y sectores populares que anhelan una país distinto, sin la opresión, miseria y entrega que las distintas variantes capitalistas ofrecen.
[i] “Bullrich ya tiene a su Lavagna, el juego del PJ con Milei y un mar de opinadores perdidos”, Clarín 16/10/2023.