Una vez más fuimos miles en las calles de todo el país. El pedido de justicia por Úrsula, la denuncia y exigencia tanto a la justicia y a la policía, como a los gobiernos se hizo escuchar en las puertas de tribunales de La Matanza.
En el marco de la convocatoria del Colectivo Ni Una Menos y por la bronca que desató el femicidio de Úrsula, surgió la iniciativa de autoconvocatoria. Compañeras independientes de distintos barrios matanceros y una nutrida delegación de Juntas y a la Izquierda y el MST en el FITU nos encontramos a las 17 horas -horario de convocatoria nacional- para denunciar que el crimen de Úrsula no es un caso aislado, sino que es más bien una regla. La jornada tuvo una destacada radio abierta donde tomamos la palabra distintas compañeras de distintos sectores para expresar y denunciar la realidad de cada barrio.
En las intervenciones, se escuchó la rabia hacia la maldita bonaerense que tiene efectivos a femicidas, como el que mató a Úrsula, pero también a asesinos de los pibes de los barrios, víctimas del gatillo fácil como es en el caso de Lucas Verón en La Matanza. También hacia la justicia machista y patriarcal, que encubre a violentos, o simplemente miran para otro lado como lo hicieron con Úrsula, que no recibió ese limitado botón antipánico. Esa justicia que también es clasista, que arma causas en contra los luchadores sociales, como quienes luchan por tierras para vivir, como Rafael Crispín, vecino del barrio La Nueva Unión en Rafael Castillo. Y no nos olvidamos de los gobiernos, que dejan como papel mojado a leyes como la ley de violencia de género que hoy sigue sin presupuesto. O peor aún, crean ministerios, programas y secretarías solo para la foto pero que en la práctica no funcionan para más nada.
Mariel Martín, referente de Juntas y a la Izquierda en Laferrere expresó: «Luchamos por presupuesto necesario para combatir la violencia género, no podemos permitir que el Ministerio de Género y Diversidad siga siendo de cartón. Hartas de que sigan bancando a Berni. Estamos organizadas más que nunca y en las calles exigiendo justicia por Úrsula y por todas las que nos faltan. Por medidas más concretas, con tobilleras para los violentos, más casas refugios con equipos interdisciplinarios para las mujeres y sus hijes. Vamos por la democratización de la justicia y la destitución de los jueces, funcionarios y comisarios que garantizan la impunidad, que sean elegidos por el voto popular y revocabilidad del mandato. Presupuesto ya para enfrentar la violencia de género, porque la deuda es con nosotros porque el patriarcado no terminó.»
El cierre de la radio abierta estuvo a cargo de la referente de Juntas y a la Izquierda y el MST en el FITU en La Matanza, Ana Paredes Landman, que ante la violencia ejercida por la bonaerense de Berni expresó: “Entre un 15% y 20% de los femicidios son cometidos a manos de un policía u otra institución de las fuerzas represiva del Estado a nivel nacional. Y por supuesto en nuestra localidad esto también se replica. Por eso decimos fuera Berni. Porque esta policía, a la que él pertenece, es femicida de Úrsula (al que le dieron una licencia psiquiátrica para encubrirlo) es la policía que reprimió a las amigas, es la policía que también encubre femicidas todos los días, la que no nos toma la denuncia; pero también es la policía que desapareció a Facundo, que asesinó a Lucas Verón, es la policía que en los barrios maneja la trata, el gatillo fácil, el narcotráfico. Esa es la policía. Por eso no hay reforma posible, y tampoco alcanza con que se vaya Berni, aunque lo decimos. Hay que disolver la policía bonaerense. La seguridad no garantiza absolutamente nada, por eso la queremos disolver. Y el primer paso para eso es que se vaya Berni, que no lo pueden seguir sosteniendo en un cargo de esa jerarquía, y quienes lo sostienen son cómplices y bancan la política de Berni. Que es un mal necesario en última instancia.” Por otro lado, se refirió a las medidas reales que hay que tomar hacia la justicia: “La conocemos bien -a la justicia-, conocemos bien a todos los fiscales. Es una justicia patriarcal y de clase, que defiende los intereses capitalistas y del patriarcado. Por eso, no alcanza con la formación en perspectiva de género de esos jueces machistas, porque lo hacen a conciencia; no alcanza solamente con intentar actualizar su formación, los jueces tienen cargos vitalicios, tienen mil años, no van a encontrar un juez joven. Porque tienen el derecho que no tiene ningún trabajador, a que su cargo sea vitalicio, son jueces hasta que se mueren. Pero, además, tanto los jueces como los fiscales, la justicia en general es el único poder que no vota la gente. Nosotros no votamos a esos tipos que están adentro, ni tampoco tenemos el derecho de revocar su cargo cuando se mandan alguna cagada. Por eso, el primer paso para la justicia, además de exigir que se cumpla la Ley Micaela, es exigir que los cargos sean revocables, es hacer una depuración. No solo de los que son funcionales al patriarcado y a los femicidas, sino incluso de los que fueron cómplices de la dictadura y que siguen ejerciendo funciones, todos los que tienen fallos anti obreros. Todos esos hay que sacarlos. Y de ahí en adelante hay que elegir a los jueces y fiscales por voto popular, y sus cargos tienen que ser revocables, porque ahí hay un poder que entonces tenga que rendir cuentas. Con nosotras, con los vecinos de los barrios. Puede que ahí empiece a cambiar estructuralmente la justicia.”
Respecto a la responsabilidad de los gobiernos y, para terminar, expresó: “Tenemos una secretaría de género acá en La Matanza, que anunciaron con bombos y platillos pero que también es de cartón, está inmovilizada. Sin embargo, cuando se amotina la bonaerense le dan un aumento salarial del 60%. Aumento salarial que no tuvimos ningún sector de los trabajadores. Ni los trabajadores formales, ni los planes sociales, ni las jubilaciones tuvieron un aumento del 60%. Entonces cuál es, hay presupuesto para la policía, hay presupuesto para el FMI, hay presupuesto para bancar a los curas, pero no hay presupuesto para la emergencia en violencia de género. Bueno, a nosotras no nos van a tomar el pelo. Todos ellos son responsables, por eso hay que exigirle a la justicia, a la policía y hay que exigirles también a los gobiernos.”
Al finalizar la radio abierta y como cierre de la jornada, cantamos y levantamos la cara de Úrsula para gritar Ni Una Menos.
Porque el patriarcado no terminó, sigamos organizadas
Desde Juntas y a la Izquierda y el MST en el FITU La Matanza, queremos invitarte a que sigamos organizándonos para continuar la lucha por ni una menos y por todos nuestros derechos. Ante la violencia machista y las instituciones que la amparan, no podemos bajar la guardia. Por eso, no solo seguir movilizadas en las calles, sino también la organización política -pero independiente de los gobiernos- son factores decisivos para tirar realmente a este sistema capitalista y patriarcal. En ese sentido, te invitamos a sumarte a nuestras reuniones, talleres y asambleas abiertas. Este sábado 20, realizaremos nuestras primeras asambleas previas al 8M. En San Justo, la cita es a las 17 horas en la plaza principal. En el caso de Laferrere, la cita es a las 16 horas en nuestra casona, ubicada en Encina 3185. Te esperamos.
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Registro fotográfico: Federico Hamilton