Este lunes 1 de julio llega con un aumento de alrededor del 4% en nafta y gasoil en CABA, alcanzando los $1000 por litro y aproximadamente el 10% en el interior.
Sube, sube…
El aumento se debe a la subida de los impuestos al dióxido de carbono y a los combustibles líquidos, y a la devaluación mensual del 2%. Este incremento se suma al acumulado del 63,35% en lo que va del año.
El primer semestre del año se caracteriza por un marcado aumento en los combustibles y, simultáneamente, una reducción en el consumo. Según la consultora Politikon Chaco, basándose en datos energéticos, durante el mes de mayo se confirma un escenario de disminución en las ventas de combustible al público en todo el país, con un retroceso del 8% en comparación con el mismo mes de 2023.
De esta manera, continúa desarrollándose un ajuste que afecta a millones de familias trabajadoras. Además, con el aumento en alquileres, tarifas de agua, cable, internet y prepagas, es muy difícil creer que todos estos incrementos no se trasladen a los precios, exacerbando la inflación.
No es el primer ni el último aumento. Se prevén más en cuanto a lo que respecta a la energía, con incrementos postergados en las tarifas de gas y luz, así como próximos encarecimientos en el combustible. Mientras tanto, los salarios continúan perdiendo la batalla mes a mes frente a los aumentos.