Luego de haber asumido a su cargo y tener las primeras reuniones con Alberto Fernández, Silvina Batakis se reunió con la otra parte del gobierno que define los destinos del país, el FMI. Ayer por la tarde la nueva ministra de Economía mantuvo su primera reunión con la directora del Fondo, Kristalina Georgieva.
El cónclave que se produjo entre la encargada de Hacienda en el país y la directora del organismo, constata que lo ocurrido el fin de semana no fue ningún cambio de orientación en la estrategia económica del gobierno del Frente de Todos. No es sólo el gobierno quien dice que va a respetar los lineamientos del propio FMI, sino que ayer fue la misma Georgieva quien declaró que Batakis: “se comprometió con los objetivos del programa y se comprometió a trabajar constructivamente con el Fondo para lograr estos objetivos”.
Esta aceptación por parte de la ministra de Economía, no significa más que la profundización del ajuste en curso que, por ahora, se había aplicado utilizando a la inflación (ya descontrolada) como instrumento. De esta forma, en términos reales, se achicaron los presupuestos de Salud, Educación, asistencia social y los salarios. Sin embargo, el Fondo, antes de que se vaya Guzmán, publicó un informe donde pedía más restricciones económicas que iba contra el “gasto” de las jubilaciones y demás ítems que significa una nueva ofensiva contra los sectores más afectado por la crisis. Algo que a Georgieva no le mueve un pelo ya que: “Necesitamos tener claro que las acciones dolorosas a veces son necesarias para cosechar los beneficios de estas acciones”.
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Las acciones dolorosas, a pesar de enunciarlas de forma inclusiva por parte de la directora del Fondo, sólo recae sobre los trabajadores y el pueblo en su conjunto. Mientras tanto, ellos saquean las reservas del país exigiendo el pago de una deuda totalmente fraudulenta, algo que ya fue admitido por integrantes del propio organismo de crédito.
Batakis, la fiscalista como ha rotulado la prensa tras sus primeras reuniones con el presidente Fernández, a pesar de las declaraciones de Georgieva que son insulto para quienes viven de su salario y no llegan a fin de mes, calificó el encuentro como: “(…) una conversación fructífera con Georgieva y esperamos continuar teniendo un diálogo positivo”.
Se fue Guzmán, pero los lineamientos centrales que él pactó con el Fondo quedaron en el gobierno. El pacto que se selló en el Congreso entre los diferentes espacios del Frente de Todos y Juntos por el Cambio, se mantiene intacto. No hay intención alguna de terminar con el nuevo acuerdo con el Fondo, y, en este caso, la ministra, como así también el plan económico mencionado, cuenta con el visto bueno de Cristina Fernández de Kirchner.
Así como hoy se manifiesta nuevamente la Unidad Piquetera contra el rumbo económico que reafirma Fernández, el 9 de julio, el MST, el Frente de Izquierda de los Trabajadores – Unidad y la izquierda en su conjunto marchará teniendo como consigna central: Fuera FMI.
Para poder ponerle fin al cogobierno con el Fondo y pelear por un plan económico que priorice las necesidades sociales de las mayorías, como afirmó Cele Fierro: “Este 9 de julio, tenemos que ser miles en Plaza de Mayo luchando por un nuevo rumbo, uno anticapitalista y socialista, cortando con el sometimiento al imperialismo”.