La Virginia es una de las fábricas más importantes de la región que sostiene ganancias extraordinarias a costa de mantener ritmos de producción que los gobiernos le permiten (aún en los meses dónde la pandemia tuvo su pico) y sin hacer lugar a los reclamos de sus trabajadores y trabajadoras. Sus representantes gremiales vienen denunciando desde hace meses una serie de atropellos y el pasado jueves 19 de noviembre realizaron un bloqueo en las puertas de la empresa.
Entrevistamos a Emanuel Fernández, Delegado de la Lista Azul de la fábrica La Virginia e integrante de ANCLA
Ema, el jueves estuvieron bloqueando los portones de la empresa La Virginia de Rosario. ¿Podrías contarnos cuáles son los reclamos centrales?
Los reclamos que tenemos son el aumento del viático, presentismo y un viejo reclamo de recategorización que en principio habíamos logrado más de 150, pero con la excusa de la pandemia, la empresa nunca las concretó. Junto con un reclamo de carácter histórico para que pasen a planta los contratados.
Es importante destacar que junto a delegades de otras fábricas de la alimentación realizamos un estudio sobre gastos de transporte y con esos resultados es que estamos planteando el aumento inmediato de los viáticos como así también del presentismo (que en particular La Virginia, es la empresa que menos paga).
Nuestro planteo se sostiene a partir de que sabemos que la patronal aumentó este año sus ventas en un 40% y además aumentó sus productos en más de 26% (incluso no respetando la ley de góndola).
Como Lista Azul y Cuerpo de delegados de la fábrica; ¿qué denuncias vienen realizando sobre las condiciones de trabajo (incluso en relación a la pandemia) y cómo les respondió la patronal?
Desde el inicio de la pandemia denunciamos que la empresa no informa quienes son los compañeros y compañeras con Covid positivo. Eso impide que se tomen las medidas de aislamiento necesarias para quienes han tenido contacto estrecho. Estamos ante una patronal que lejos de cuidar la salud, ha cuidado sus ganancias ya que nunca detuvo su producción. Así llevamos contabilizados más de 100 contagios. Y quisiera agregar que cuando un compañero o compañera decide autoaislarse por precaución y solicita el testeo, si el resultado da negativo, los días no trabajados (junto con el presentismo y viáticos) son descontados por la empresa. ¡Una vergüenza!
Contanos un poco sobre la iniciativa de empezar a trabajar con otros delegados de fábricas de la alimentación para generar un reclamo global.
Veníamos teniendo reuniones con delegados y delgadas de otras empresas de la alimentación de la filial Rosario. Si bien con la pandemia esto se complicó un poco, nos parece una gran iniciativa para fortalecer los reclamos que tenemos como trabajadores.
¿Cómo sigue ahora la situación en relación a los reclamos?
Esta semana vamos a presentar por escrito todas nuestras demandas a la empresa, y de no tener una respuesta positiva, intensificaremos la lucha hasta que logremos cada uno de los reclamos.
¿Hay algo más que quieras agregar?
Si, para finalizar es importante decir que estamos ante un de las empresas que más facturó en 2020 con más de 150 millones de dólares. Esto es importante porque cada reclamo, cada demanda y exigencia para cuidarnos, no solo las hacemos porque es nuestra tarea como representantes gremiales, sino con la convicción de saber que es una patronal que la “junta con pala” como decimos en la fábrica y que prioriza sus ganancias a costa de la salud y el trabajo de sus empleados y empleadas.
Y cuando nos queremos organizar nos persigue y sanciona como lo viene haciendo desde hace años. es el caso de nuestro compañero Gastón Pinchetti y otros a los cuales se les inventaron causas, o como sucede en pandemia, que por realizar charlas informativas, se les descuenta entre 40 y 50 mil pesos a trabajadores que asistieron. Y ni que hablar los castigos por “incumplimiento” de protocolo (que son absolutamente arbitrarios) y que también traen aparejados descuentos de Importantes sumas de dinero.