Se terminó julio y arrancó agosto con malas noticias para el bolsillo de las familias trabajadoras. A los aumentos en gas, luz, nafta y gasoil, se suma un importante incremento en el boleto de colectivo en el AMBA, entre otros.
Desfilan los aumentos
El gobierno oscila entre postergar algunos aumentos y ajustar otros mes a mes, para que así estos repercutan lo menos posible en la inflación. Agosto no es la excepción y empezó con aumentos en distintos rubros.
En el caso del boleto de colectivo para la región del AMBA, el aumento es del 37%. El boleto mínimo con SUBE registrada pasa de valer $270 a $370, y el máximo que se ubicaba en $370 se colocaría en un valor de $506,86. Para quienes no tengan la SUBE registrada, el boleto se encontraría desde $590,10 hasta $805,04. Un duro golpe para los trabajadores y sectores populares en un momento de aguda crisis económica.
Por otro lado, hubo aumento en los servicios: el gas y la luz aumentaron un 4%. Este aumento, dispuesto por la Secretaría de Energía de la Nación, encabezada por Rodríguez Chirillo, se da en el marco de fuertes tarifazos durante el invierno y boletas que llegan a marcar seis cifras.
Un informe del Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), dependiente de la UBA y el CONICET, reveló que en julio un hogar promedio en el AMBA necesitó $142.645 para cubrir sus necesidades energéticas, de transporte y agua potable, configurando un incremento en el costo de la canasta total de servicios del 374% comparando julio de 2024 con diciembre de 2023.
Otra suba es la de la nafta y el gasoil, siendo la misma de alrededor del 3%, debido a un 2% por la devaluación mensual respecto al dólar y un 1% correspondiente a una suba del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y al Dióxido de Carbono. En el caso de CABA, subió un 2,5% más para achicar la brecha con las provincias. En lo que va del año, los combustibles subieron un promedio del 126%. Para este mes también se estiman aumentos en prepagas, peajes y telefonía.
El salario pierde por nocaut
Los aumentos no generarían tanto malestar ni dolores de cabeza si los sueldos fueran en consonancia. La política del gobierno va en el rumbo opuesto. Lo confirma la actualización de migajas, por decreto, del salario mínimo, vital y móvil, posicionándolo en $254.231.
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Los propios datos de los cuales se enorgullece el ministro de Economía, Luis Caputo, demuestran una pérdida importante del salario real desde diciembre de 2023. Sumado a una cruenta recesión que afecta toda la estructura económica, profundizando la miseria y la desocupación.
Evolución de distintos indicadores de salarios. En mayo el nivel general de salarios subió 4% en términos reales. 🇦🇷🇦🇷 pic.twitter.com/gjQYS1iQhX
— totocaputo (@LuisCaputoAR) July 25, 2024
La situación económica sigue deprimida sin ninguna “V” al final del túnel. En julio, ya el gobierno perdió recaudación por una baja real interanual de lo recaudado con el IVA del 11,7% y del Impuesto a las Ganancias del 24%, según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
Como si fuera poco, en julio el ministro Caputo tuvo su primer déficit financiero debido al pago de bonos, demostrando puntos débiles en el binomio de emisión y déficit cero.
La orientación del gobierno es que la crisis la paguen los trabajadores. Hay que enfrentar en unidad de acción todos los tarifazos y el conjunto del plan ajustador de Milei. Así como propone la carta abierta del MST en el Frente de Izquierda y de los Trabajadores-Unidad, hace falta la más amplia unidad, ahora y en las calles.
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