Tras los anuncios realizados por el gobernador Gustavo Bordet, la dirigente del MST en el FIT-Unidad, Nadia Burgos, expresó: “El gobernador sigue sin tomar las medidas sanitarias y económicas necesarias para afrontar la segunda ola de contagios en la provincia. Estamos en un porcentaje de ocupación de camas UTI del 72% a nivel provincial y uno del 95,8% en Paraná, en los hospitales públicos, y, sin embargo, persisten con la presencialidad de las clases y la apertura de todas las actividades económicas. Si, como dijo Bordet, ´cuidarnos es dejar de circular´, tiene que entender que circular es esencial para quien necesita llevar un plato de comida a su casa. Más si no se aplican medidas económicas compatibles con las sanitarias. Sin importar las advertencias por los contagios que se vienen produciendo, Bordet imita la política negacionista de Larreta en CABA”.
Burgos también agregó: “A pesar de las restricciones de circulación horaria, se sigue obligando a los trabajadores a exponerse en sus puestos de trabajo, cuando sólo hay, según los propios datos del gobernador, un 25% de la población activa vacunada. A esto se suma la circulación de las cepas de Manaos y Reino Unido. Ante este panorama hay que asegurar un nuevo IFE de $50.000 para poder implementar los cuidados necesarios, con ingresos dignos. El dinero para esto tiene que salir de fuertes impuestos a los más ricos y de dejar de pagar la deuda externa fraudulenta con el FMI y demás organismos internacionales”.
Sobre la campaña de vacunación comentó: “En la provincia sólo se han aplicado 191.599 dosis, algo que sólo significa el 14% de la población y la mayoría de este porcentaje sin acceder a la segunda dosis. Esta demora sólo se entiende por la defensa del Frente de Todos al lucro de los laboratorios. Desde el FIT-U ya presentamos un proyecto en el Congreso para que se declare de utilidad pública el laboratorio de Hugo Sigman, mAbxience, y así se avance en la producción y distribución local de vacunas. Nos están faltando dosis, no sobrando para permitir que lo que se produce acá se vaya para Estados Unidos como está ocurriendo”.
Además, sumó: “El panorama sigue indicando otra media urgente, unificar todo el sistema de salud en uno único de carácter estatal y público. Situaciones como estas develan si el gobierno va a preferir mantener las ganancias de quienes hacen negocios en medio de la pandemia o asegurar el derecho a la salud de todos los entrerrianos. El sobrecargo laboral de la primera línea, es brutal. Y no se anunció nada para alivianar esa situación. El gobierno propone aumentos salariales que llevarán, recién en septiembre, los salarios mínimos a $45.500. Mientras tanto, el INDEC dice que hoy se necesitan $60.000 para no ser pobre, Bordet nos condena a vivir bajo la línea de pobreza. Hay que aumentar el salario de todo el personal de salud a lo que equivale la canasta básica, no mantener salarios de hambre. La salud pública se defiende con presupuesto, no con precarización de la primera línea”.