Tras el acuerdo entre el gobierno de Milei–Villarruel y la Universidad de Buenos Aires (UBA), ahora la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) también ha llegado a un acuerdo con el Ejecutivo Nacional, lo que supone un aumento del 270% en el presupuesto destinado a los gastos operativos del sistema universitario.
En otras palabras, el acuerdo se centra exclusivamente en cubrir los gastos básicos de operación, dejando de lado los salarios de docentes y no docentes, los cuales han estado congelados desde octubre de 2023. Tampoco se incluye en el acuerdo fondo alguno para becas, infraestructura, comedores y menos que menos para CONICET.
Se ha confirmado que otras 66 universidades públicas se beneficiarán de manera similar a la UBA y la UNLP.
Dividir para debilitar
Tras la monumental marcha del 23 de marzo, donde cerca de 800 mil personas llenaron las calles de la capital y se llevaron a cabo marchas simultáneas en todo el país, quedó claro el poder que tienen estudiantes y trabajadores cuando se unen.
Por ello, la llegada de un acuerdo como este parece ser una táctica política para desmovilizar. Si bien se asegura el funcionamiento físico de las universidades, incluyendo servicios básicos como luz, agua y gas, se excluye a aquellos que han liderado la lucha en defensa de la educación pública.
De esta manera, el gobierno parece buscar dividir al movimiento, privando a docentes y no docentes de gran parte del apoyo que solían recibir.
La lucha debe persistir
Es necesario seguir en las calles, presionando al gobierno, pues vimos el poder que tienen las calles, y somos conscientes de que el gobierno se encuentra cada vez más debilitado.
Además, es crucial asegurar el pleno funcionamiento del sistema universitario público, incluyendo la recomposición salarial de docentes y no docentes, el aumento de becas, así como garantizar el funcionamiento de hospitales universitarios y centros de investigación.
Por eso, a pesar de este acuerdo, es fundamental que permanezcamos unidos en la lucha, ya que lo que está en juego es el futuro del país.
Marcela Gottschald