Este 27 de mayo se cumplió un año del bochornoso fallo realizado por los jueces Roberto Lugones; Elisa Moyano y Roberto Conti, que condenó a cadena perpetua a Marcos Bazán implicándolo en el femicidio de Anahí Benítez.
En un juicio plagado de irregularidades-uno de los pocos que se dieron en el marco de una cuarentena estricta por el Covid-19-, dada la prisa que tenía el juzgado por cerrar el tema, terminaron condenando a cadena perpetua, sin ninguna prueba, a Marcos Bazán. Mientras que Villalba, el único implicado con prueba de semen positiva en el cuerpo de Anahi, gozó del privilegio de no ser parte del juicio, alegando insania. Este repudiable accionar se confecciona con una causa armada que intenta encubrir las huellas de la Policía Bonaerense en el femicidio de Anahí.
La joven de 16 años que fue secuestrada, violada y posteriormente asesinada no tiene justicia por la completa responsabilidad de este sistema judicial corrupto y adicto al poder de turno. Quieren cerrarnos la boca, poniendo tras las rejas a un “perejil”, como si esto se tratara de llenar el banquillo de culpable. Cuando en realidad, lo que pedimos es una investigación profunda y exhaustiva para hallar realmente a los implicados de forma material, intelectual y política.
Por eso nos venimos movilizando, exigiendo a Casación la anulación del impune juicio y la apertura a nuevas investigaciones. Para dicha investigación no confiamos ni un ápice en esta Justicia que permite tantas irregularidades en la causa y que claramente vela en defensa de cuidarle las espaldas a todo el engranaje policial que está detrás de esto; por eso reclamamos la conformación de una comisión investigadora independiente agrupada por personalidades y organizaciones de espacios del feminismo y los derechos humanos para poder llegar hasta el final y poner tras las rejas a los verdaderos culpables.
De este modo, el martes 1 de junio vamos a estar apoyando la convocatoria que realizan amigos y familiares de Marcos Bazán a la puerta de Casación en La Plata. Exigiendo a viva voz, una vez más, justicia y verdad para Anahí Benítez, anulación del bochornoso fallo judicial, libertad y absolución para Marcos Bazán. ¡Basta de causas armadas!