Esta mañana desde el MST Teresa Vive junto a diferentes organizaciones sociales marchamos para exigir que se libere la mercadería ante el fallo del juez Casanello, quien ordenó al gobierno de Milei y a la ministra Petovello entreguen todo en el plazo de 72 horas máximo.
Al llegar a las puertas de los talleres ferroviarios nos encontramos con un operativo policial dispuesto a reprimir si avanzábamos, a las órdenes del gobernador Jaldo, alumno obediente del presidente. Hay dos lugares en donde están guardados de manera ilegal los 5.000.000 de kilos de alimentos, uno es en los talleres de Tafí Viejo y el otro es en los galpones en Villa Martelli (provincia de Buenos Aires), donde también nos movilizamos.
Los talleres ferroviarios de Tafí Viejo son un emblema del pueblo tucumano, donde llegaron a haber más de 5.000 trabajadores, y que durante las privatizaciones de Menem fueron totalmente destruidos, transformándose en un cementerio de chatarra, pese a promesa tras promesa de reactivación de los distintos gobiernos siguientes, se mantuvieron igual.
En dichos galpones se encuentran más de 2.300.000 kilos de alimentos entre leche, arvejas, harina, fideos, aceite y puré de tomate desde hace casi 6 meses, a riesgo de pudrirse, como también otros elementos como repelentes, justamente en una de las provincias más afectadas por la epidemia del dengue.
Mientras Petovello huye de la prensa y el gobierno nacional con el vocero del hambre Adorni dijeron que apelarán el fallo, Milei se prepara para una nueva gira primero para reunirse con Mark Zukerberg (dueño de Facebook) y posteriormente a Europa, con los millones del pueblo trabajador mientras más de 27.000.000 de argentinos pasan hambre.
El gobierno que pretendía atacar a las organizaciones sociales y piqueteras, hacerlas responsables del hambre y la crisis dejó demostrado que son ellos los únicos responsables.
Es un verdadero escándalo que tengan secuestrada de manera ilegal tantos alimentos y Milei diga que él no ve a nadie que se desmaye a sus pies por hambre. El hambre es un crimen, y tanto el gobierno nacional como el provincial son responsables, que la ministra Petovello renuncie, que se entregue inmediatamente los 5.000.000 de kilos de alimentos, basta de criminalizar a las organizaciones sociales.