El 58,6% de los trabajadores asalariados tiene un ingreso promedio de $ 42.394, así lo informó el INDEC en su publicación del informe Evolución de la distribución del ingreso (EPH)[i], que estudia la situación del primer trimestre.
Este trabajo que se encarga de estudiar a 31 aglomerados urbanos mostró que el 32,4% de la población asalariada no tiene ningún descuento jubilatorio; es decir, se encuentran en la informalidad. Según el estudio, para quienes están bajo tal situación el ingreso promedio fue de $ 22.386, importe menor al valor que se marcaba para no estar por debajo de la línea de indigencia en ese trimestre ($ 25.685).
La investigación aludida divide a los asalariados en diez niveles. Si se mira el primero de ellos, compuesto por los trabajadores que recibieron entre $ 500 y $ 10.500, se observa que el 87% de ellos se encuentran en situación de informalidad. Para el segundo nivel, quienes tuvieron ingresos entre $ 10.500 y $ 19.000, el porcentaje de informalidad llegó al 73%.
Para el universo de los asalariados formales la situación no es muy distinta, ya que el ingreso promedio de estos fue de $ 51.328. Si se tienen en cuenta los números que se manejaban en el primer trimestre, quienes tenían estos ingresos se encontraban por debajo de la línea de la pobreza, ya que en marzo la canasta básica total para una familia tipo valía $ 60.874.
Mientras el presidente decía que había puesto fin al patriarcado, en el primer trimestre existió una importante brecha entre los ingresos de las mujeres y los varones. El ingreso promedio de un hombre en esos meses fue de $ 48.570 y el de una mujer era de $ 36.123.
La desigualdad en la distribución de los ingresos
Otro de los puntos que mostró el informe fue la gran diferencia que existe en la forma que se distribuyen los ingresos. En el primer trimestre del año pasado, el 10% más pobre recibió el 1,4% de los ingresos; mientras que el 10% más rico se llevó el 32,4%.
Además, en el estudio se publica el coeficiente de Gini del ingreso per cápita familiar de las personas, indicador que muestra la desigualdad en la distribución del ingreso. En los tres primeros meses del año, el coeficiente fue del 0,445, un número similar al del 2020 en el mismo periodo (0,444). Cabe aclarar que este indicador varía entre 0 y 1: cuando se está en 0 se habla de igualdad absoluta y cuando se encuentra más cercano al 1 se produce una mayor desigualdad en la distribución de ingresos.
Con un gobierno que da prioridad a las negociaciones con instituciones como el Club de París y el FMI, el único resultado posible que se puede obtener es el que ilustra este informe, donde los ingresos de las mayorías trabajadoras no pueden hacerle frente al costo de la canasta básica y la distribución de los ingresos se da de esta forma tan obscena.
El informe es un reflejo del ajuste aplicado por el Frente de Todos, que en víspera de las nuevas elecciones busca mostrarse otra vez como algo distinto al macrismo, cuando en los hechos no es más que una continuidad de las políticas neoliberales que está empobreciendo a las mayorías populares.
[i] https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/ingresos_1trim21492288B743.pdf