Salomé Piedrabuena es una de las tantas compañeras trans que lucha por una vida digna. Tras largos años de lucha por su DNI, ella hace muy poquito celebra poder tener su identidad.
Salomé tiene 25 años y hace más de dos décadas estaba sin su documento. En la búsqueda de poder darles una vida mejor a sus hijos, la mamá de Salo entregó la partida de nacimiento original allá por los años ’90 en una campaña electoral para poder recibir una ayuda social. Pero nunca la recibió ni tampoco le devolvieron la partida.
Desde ese entonces cambió la vida de Salo. Pasaron los distintos gobiernos, pero es siempre lo mismo: se atrincheran en el poder y se olvidan de las necesidades. Para el Estado, Salomé pasó a ser una NN. Todos los gobiernos y secretarías le cerraban las puertas… hasta que el tema se puso en manos de la justicia y por fin, tras 25 largos años de silencio, este año 2021 volvió a nacer Salomé.
Con este gobierno que ya lleva dos años de gestión en el municipio bonaerense de Pilar, la directora de Diversidad, Yamila Ramírez, se había comprometido a acelerar el trámite, pero no cumplió. Y al saber que Salomé tenía una ideología política diferente al oficialismo, por ser militante de Libre Diversidad-MST, se preocupó todavía menos.
En realidad Ramírez llega a ocupar ese cargo porque nosotres, las trans y la asamblea LGBT, luchamos para que ella diera respuestas. En toda manifestación que hacíamos siempre reclamamos que una persona de la disidencia ocupara ese cargo como funcionaria de la Diversidad. Creíamos que nos iría mejor si dicha persona podía entender las problemáticas de la disidencia, no como los hetero-cis que suelen ocupar esos cargos pero que no tienen ni idea del colectivo LGBT.
“Por eso acudí a ella para que me ayude”, nos cuenta Salomé. “Pero no tuve respuesta, más aún cuando se enteró que milito para una organización que no es oficialista. Tuve que continuar sola y al último, cuando después de tantos años me llega el descargo del juez y del Registro Civil de La Plata y vuelvo a ir a la institución del Registro de Personas en Pilar para que me hagan el DNI, empezamos de nuevo con vueltas”.
“Así que tuvimos que intervenir como organización, para que de un día para el otro me den mí identidad. Hoy me siento orgullosa de ser quien soy y de llevar un nombre. Nunca voté. Nunca tuve un trabajo ni una ayuda social, ya que no estaba registrada en ningún lado. Era una NN. Y así es la ‘respuesta’ de los ministerios y las instituciones cuando necesitamos ayuda”.
“Hoy milito fuerte, porque así como yo figuraba como desaparecida en todos los registros quiero saber dónde está Tehuel. Ya llevamos cinco meses sin él y desde el gobierno lo dejaron de buscar. Así es con los que desaparecen: el Estado no se hace cargo de nada. Hace poquito también nos enteramos de la muerte de dos compañeras trans a manos de la policía: Vicky en Paraná y Fátima en Formosa. Nos matan como si nada. No hay una real política pública para la diversidad. El Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad es puro chamuyo y nada de acción”.
“Hoy celebro ser alguien, pero mi voz no la callaré. Seguiremos buscando a Tehuel. También voy a buscar trabajo porque quiero tener una vida digna y acceder a beneficios como la sociedad. Hoy soy alguien, y sí, tengo q agradecer la lucha que di y a mi organización que me representa. Y voy a pedir al Estado que me devuelva lo que me quitó un día: mi vida. Por eso digo: el Estado y sus gobiernos son responsables. Aparición con vida de Tehuel. Basta de travesticidios. Y cupo laboral trans ya y sin precarización”.
Mónica Aguirre