Desde la tarde noche de ayer hasta hoy, una nueva tormenta afectó la zona de La Plata y el AMBA, nuevamente inundaciones, árboles caídos y miles que vemos lo poco que tenemos destruido por la desidia de los gobernantes.
Hace unos días un intenso temporal provocó, en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, fuertes inundaciones, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una nueva serie de alertas naranjas y amarillas por fenómenos climáticos intensos que afectarán a la mayor parte del territorio nacional.
Trabajadores que perdieron todo con casas llenas de agua, colegios sin clase y miles sin luz por cables cortados. Un día de lluvia intensa y la desinversión de años sale a la luz. A la vez, la desidia del gobierno de Milei que no organiza ningún tipo de protocolo de contención ante esta situación apremiante.
Estas problemáticas son una muestra de dos problemas serios. Uno es la falta de inversión y de planificación en obra pública de calidad que responda a las necesidades reales de los ciudadanos. La sobre pavimentación que con el cemento se come espacios verdes necesarios para que al agua filtre hacia la tierra, responde a la priorización de los negocios privados del mercado inmobiliario. Por otro lado la crisis climática se profundiza cada vez más y cae sobre territorios completamente desprevenidos de herramientas para enfrentarla, porque no se la considera como una variante sería, real y urgente. Más bien lo que hacen todos los gobiernos es negarla.