El día 28 de mayo se realizó un encuentro de manera virtual donde participaron más de 50 compañeres de distintos establecimientos; demostrando el espacio que tenemos como alternativa en sanidad y que coincidimos en que la conducción del gremio debe cambiar.
El encuentro arrancó con un informe a cargo de Cesar Latorre, delegado general del Hospital Italiano, en el mismo destacó cómo la situación política general está ligada a la evolución de las paritarias; ya que el gobierno con la complicidad de la burocracia sindical comenzó el año con un piso del 29%. Pero la realidad es que, entre la inflación y los bajos salarios, las luchas rompieron ese techo, como demostraron la lucha de Neuquén o la de los choferes de UTA, que obligaron a que tuvieran que barajar de nuevo.
Es por esta situación que UPCN y ATE en estatales han pactado un 35%. Por supuesto en cuotas que recién se terminan de cobrar el año que viene, ¡vergonzoso! La pandemia demostró que el personal de salud no es reconocido profesionalmente ni salarialmente, con básicos por debajo de la línea de pobreza y una bajísima inversión en el sistema de salud público; beneficiando así al sector privado, esos mercaderes que hacen negocios con la misma. El marco general del decreto del gobierno, con el catálogo de esenciales, ha dado vía libre a las patronales que se han aprovechado para ajustar e intentar por esta vía a una flexibilización laboral con la completa complicidad de los sindicatos.
Luego compartimos las intervenciones de varies compañeres coincidiendo en la desidia del gremio, con importantes aportes y reflejando lo que estamos padeciendo todes en cada lugar de trabajo. También las ganas de organizarse para enfrentar esto atropellos. Varias intervenciones destacaron el espacio que generamos entre todes.
Seguidamente se dio espacio a las resoluciones que tienen como centro instalar la necesidad de una paritaria acorde a la canasta familiar – hoy $ 92.580- con cláusula de ajuste automática mensual y el reconocimiento del desgaste laboral lo que implica tres aspectos:
1) la reducción horaria para todo el equipo de salud en 6 horas de trabajo,
2) las licencias por estrés en el momento que el trabajador o trabajadora lo requiera,
3) la jubilación a los 55 años de edad para todo el equipo de salud.
Junto con esto, muchas iniciativas para llevar esta pelea adelante.
La reunión concluyó con una motivante intervención de la compañera Alejandra Ruz que destacó la unidad política expresada en las resoluciones votadas por unanimidad respecto a iniciativas por la lucha por las paritarias.
Ahora tenemos el desafío de llevarlas adelante enfrentando a este gobierno que beneficia a las patronales con subsidios de nuestros aportes jubilatorios y luego quiere contentarnos con bonos insuficientes, que anuncian y quedan en la espera. Contra las patronales que quieren flexibilizarnos y contra la burocracia de Daer y la celeste y blanca que pacta salarios a la baja a nuestras espaldas, sin consultarnos. Por todo ello es necesario fortalecer la agrupación bordó que es la alternativa y quien verdaderamente pelea en los establecimientos y conquista también las calles.
Joana Bordón, delegada del Hospital Italiano