En medio de una situación asfixiante para los sectores más vulnerables de la Argentina, el gobierno de Milei bajo la excusa del “déficit 0” vetó la reforma jubilatoria y ahora amenaza con vetar la Ley 24.521 de financiamiento a las universidades. Esta, de ser aprobada permitiría que al menos el salario docente y no docente se actualice acorde a la inflación. Son les trabajadores de las universidades nacionales quienes están llevando una lucha de vanguardia en defensa del presupuesto para la educación y contra la engañosa “esencialidad”, que solo busca prohibir la huelga de les trabajadores. Este es el único camino que les queda ante la pérdida del 50% de su poder adquisitivo desde el inicio de este gobierno.
En San Juan, Orrego disfraza el ajuste en el boleto educativo. La Federación Universitaria (FUSJ) se reunió con la ministra de Transporte en dos ocasiones. En la primera, minimizaron el reclamo y se burlaron de les estudiantes; en la segunda, después de mil vueltas no dieron respuestas. Varias veces advertimos que el cabildeo con autoridades no iba a tener resultados ante un gobierno decidido a aplicar el ajuste. A pesar de ello, la FUSJ buscaba explicaciones sobre el nuevo sistema de becas, que genera una gran confusión y decepción en el estudiantado. Las becas que habilitó Orrego son apenas 10.000, siendo más de 25.000 estudiantes solo en la UNSJ. Es un ajuste disfrazado de beneficio, que muestra la obediencia al gobierno de Milei.
¿Qué boleto necesitamos y cómo lo conseguimos?
La lucha por el boleto comenzó en septiembre de 1976 como un reclamo de estudiantes secundarios para tener un boleto que les permita ir a la escuela. Reclamo, que les costó la vida a 250 estudiantes, víctimas del terrorismo de Estado de la dictadura, en lo que hoy conocemos como “la noche de los lápices”. Esta lucha fue utilizada de manera oportunista como promesa de campaña para la juventud por el actual gobernador Orrego, y completamente ignorada por las gestiones anteriores del PJ desde Gioja hasta Uñac. El boleto siguió en cajones, pero la lucha continúa.
El pasado jueves llevamos adelante una acción de lucha unitaria en las puertas de la Facultad de Ciencias Sociales. En esta ocasión fue en formato de radio abierta, y a pesar de los problemas climáticos que complicaron la asistencia del grueso del estudiantado, contamos con la asistencia de gran parte de las agrupaciones estudiantiles que están encabezando la lucha por el Boleto Educativo Gratuito y Universal, tales como LA MAREA, La Manso, CEPA, MUU, Ideas y la Federación Universitaria. Lamentablemente CREANDO (Patria Grande), organización ligada a autoridades de la UNSJ como el rector Tadeo Berenguer, dio ausente en esta actividad que acordamos de manera unitaria, debilitando la unidad conquistada y toda la lucha por el mismo objetivo
La necesidad de que les estudiantes conquistemos este derecho por el que peleamos hace años es real, pero en este contexto la lucha no puede limitarse en sólo boleto escolar. Expresarlo así excluye a la docencia y al personal de la UNSJ que también debe acceder al mismo derecho para poder garantizar el normal funcionamiento de nuestra educación. El transporte público para les trabajadores es un gasto enorme que se suma a la grave situación en la que se encuentra el salario de nuestro personal educativo. Si de algo estamos seguros, es que con ajustadores no hay lugar para el diálogo. Por eso insistimos que la lucha por el boleto educativo solo se ganará peleando organizados y en las calles.
El trasporte público es indispensable para el normal funcionamiento de nuestra sociedad, no puede ser un servicio de lucro para ciertas empresas privadas. Cada una de ellas, hace años reciben subsidios multimillonarios y lejos de mejorar la calidad del servicio lo han empeorado constantemente. Los bondis se funden, se reducen las frecuencias y, pretenden que no digamos nada mientras el pasaje ha aumentado casi un 1000% en tan solo 5 meses.
¡No tiene por qué ser así! Necesitamos ir en la dirección opuesta a la utopía libertaria de que “todo lo privado es mejor”, el servicio de transporte en San Juan es un ejemplo concreto de este conveniente “error”. El transporte público debe ser accesible para toda la población sin importar sus ingresos, y para que eso ocurra tiene que ser estatal y controlado por trabajadores y usuarios para terminar con el negocio de unos pocos sobre un servicio esencial que utilizamos trabajadores y estudiantes.
Y ahora… ¿Qué hacer?
Debemos seguir sumando fuerzas a la unidad conquistada, transformando nuestra multisectorial en un verdadero espacio asambleario. Porque si Orrego se apoya en la unidad por el ajuste que llevan adelante con Milei, nosotres debemos oponernos en la mayor unidad en la lucha callejera estudiantil, docente y no-docente. Es por el boleto, pero está en peligro toda nuestra educación.
Organicemos juntes una nueva marcha federal universitaria que aproveche la crisis que atraviesa este gobierno saqueador, y volvamos a demostrarle a Milei y Orrego la fuerza de un pueblo que no se resigna a perder su Educación Pública, Estatal, gratuita y Laica.
Tenemos que impulsar la unidad de las luchas de todos los sectores que quieran derrotar al ajuste del libertario y sus cómplices, que quieran derrotar a quienes destruyen nuestros ingresos en favor de los sectores concentrados de la economía y al servicio de lo peor de la casta, regalando nuestra soberanía y bienes naturales a Washington y dándole al pueblo solo hambre, palos y vergüenza por tener un presidente tan nefasto.
¡Si el presente es de lucha, el futuro es nuestro!
Necesitamos un plan de lucha que articule acciones para este objetivo común, coordinadas con el debate democrático de quienes luchamos y abriendo el espacio a toda la comunidad educativa con asambleas por sector. El tiempo apremia, cada minuto que dejemos pasar solo beneficia el plan de ajuste, y nuestro pueblo no está dispuesto a ello. El 23 de abril fue una clara muestra de que luchar en unidad y masivamente en las calles, torció el brazo del gobierno y le hizo soltar el presupuesto para las universidades que supuestamente “no había”.
¡Por nuestro boleto educativo y para que nadie se quede afuera de la educación, organízate y lucha!
Facundo Oropel – La Marea – MST