martes, 3 diciembre 2024 - 14:56

San Juan. No al RIGI, basta de saqueo a nuestros bienes comunes

Hace una semana que el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones tomó estado parlamentario en la Legislatura sanjuanina. El gobierno provincial de Orrego, coincidiendo con el gobierno libertario de Milei, avanza en regalar el país a las corporaciones extranjeras. El RIGI le otorga beneficios impositivos y la explotación segura de litio, oro y cobre por 30 años a los grandes millonarios de la minería y a cualquier capital extranjero que tenga 200 millones de dólares para invertir en la provincia.  

El viernes 2 de agosto fue el primer debate en comisiones. Estuvieron presentes la Cámara Empresaria de la Minera nacional y provincial, la Cámara de Turismo, Hoteles y Gastronomía, la Cámara Industrial, la Federación Económica, la Cámara de Comercio Exterior y la Mesa de la productividad. Todos expusieron sus argumentos sobre los teóricos beneficios para la provincia con la aprobación del RIGI. Todos empresarios con distintos objetivos, pero unidos en función de la disminución de sus ganancias por la crisis. Con un panorama de poca obra pública, apuestan a que los capitales extranjeros los salven y que la minería derrame beneficios al resto de sectores.

La fusión de BHP y Lundin Mining, dos empresas gigantes de la minería mundial llevada a cabo con el objetivo de retomar el mega proyecto Josemaría, conmocionó a las patronales mineras que ya están haciendo números en función de las porciones de ganancias que pueden obtener. Es por ello que en la última semana todo el empresariado sanjuanino ha estado presionando a los diputados para aprobar rápido la ley. Con lo cual, todos los bloques de diputados se encaminan a aprobar el saqueo de la provincia.

El rol del PJ es lamentable. Es quien tiene mayoría en la Cámara y ya confirmó que dará libertad de acción a sus diputados y no obstaculizará el tratamiento del RIGI. Ya se sabe que la mayoría de sus diputados votarán a favor, demostrando que ya no es alternativa para enfrentar a la derecha y las grandes corporaciones. Si la patria no se vende, para los diputados peronistas depende del precio que esté en juego.

Mentira 1: hay licencia social y minería sustentable

Impulsada por el gobierno de Menen, en 1993 se sancionó la Ley de Inversiones Mineras. En nuestra provincia Gioja, siendo gobernador, permitió que se instalen empresas como la Barrick Gold, otorgándoles numerosos beneficios exclusivos para la explotación de oro. En ese tiempo se hablaba de progreso, de miles de puestos de trabajo, de desarrollo para la provincia. Sin embargo, en 2015 sucedió lo que muchos veníamos advirtiendo, un derrame de cianuro en el río Jáchal. Desde entonces, vecinos del departamento formaron la Asamblea para luchar contra la contaminación de la megaminería, lucha histórica de la cual fuimos parte y apoyamos.

Hoy la provincia vive una crisis hídrica histórica, lo que hace más necesario cuidar cada reserva de agua, bien escaso vital y en disputa. Y cuando se corta el agua en algún departamento, aumenta el cuestionamiento social sobre la cantidad de agua que utiliza la industria minera. Para el año 2023 surgieron muchas asambleas ambientales en varios departamentos. La última fue en Valle Fértil, donde los vecinos se organizaron contra la instalación de un proyecto minero de capitales chinos. Movilizados, llegaron a presionar al intendente para evitar la llegada de la megaminería a la zona. Hoy en día, los estudios del agua realizados por la Universidad Nacional de Cuyo de Mendoza arrojaron que los ríos tienen niveles de metales pesado, que son peligrosos para la vida y el consumo humano.

Mentira 2: progreso económico para todos

Todos los empresarios y políticos tradicionales ya están planificando sus grandes negocios con el RIGI. ¿El verso que nos cuentan? Que si aumentan sus ganancias “se beneficia la provincia”. Sin embargo, la realidad es otra y la historia lo demuestra. Tenemos encima 30 años de megaminería, 20 de ellos gobernados por el PJ que prometió “progreso económico y trabajo”. El promedio de los salarios en la provincia ronda los 300 mil pesos y hay una tremenda precarización laboral. En los departamentos mineros hay grandes falencias en los servicios públicos de salud y educación. Y el mayor proveedor de puestos de trabajo sigue siendo el Estado, no la minería. En conclusión, 30 años de megaminería en nuestra provincia solo ha dejado empresarios mineros millonarios y trabajadores pobres. Hoy nos quieren convencer nuevamente con espejitos de colores, con el verso de los puestos de trabajo y el falso progreso, la misma excusa de antaño, hoy utilizada por el gobierno de Orrego para apoyar la venta del país.

Digamos NO al RIGI cuando se trate en la Legislatura

Con fundamentos, le decimos NO al RIGI. Y para eso, nos organizamos junto a organizaciones ambientales, de género, sindicales y de derechos humanos, para que cuando se trate en la Legislatura sanjuanina podamos ser miles quienes podamos expresarnos. La CGT tiene que convocar a un paro y movilización para el día de su tratamiento. El PJ que cuenta con mayoría en la Cámara tiene que rechazarlo tal como hizo en el Senado y sumarse a las acciones unitarias. Desde el MST y el Frente de Izquierda Unidad volveremos a estar en las calles para rechazar todo proyecto que vaya en contra de nuestros bienes comunes y profundice aún más el saqueo de nuestra tierra. También impulsamos y somos parte en todo el país de la campaña plurinacional contra el RIGI, a la cual te invitamos a sumarte.

Luchamos por un desarrollo estatal bajo control social de una matriz diversa de energías limpias y renovables. Demandan mucha mano de obra y aunque su generación y planificación requiere centralización técnica, la forma de distribución y mantenimiento, es compatible con una descentralización que evite el despilfarro actual de todos los sistemas de energía y distribución bajo el capitalismo. No podemos destruir nuestro ambiente por la necesidad de litio y cobre de los países desarrollados. Queremos una reorganización integral de la economía, así como la construcción de un vínculo de la humanidad con la naturaleza, basado en otra racionalidad: sin la lógica del capital y la acumulación privada como ley suprema. No es lógico que los grandes capitales pretenden llevar adelante un cambio en la matriz energética, se sigan acumulando ganancias a costa de destruir el único bien que preserva nuestra vida: la naturaleza. Tenemos una perspectiva socio ambiental que definimos como eco socialista. Y por eso, nos organizamos junto a organizaciones ambientales, de género, sindicales y de derechos humanos, para que el 15 de agosto, día en que se tratará el RIGI en la legislatura sanjuanina, seamos una marea contra este nuevo proyecto de despojo.

Cristian Jurado

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