Ante los anuncios del boletín oficial de la provincia de Salta sobre el descubrimiento de un yacimiento diseminado de oro y cobre ubicado en alto valle de los Valles Calchaquíes al oeste de la provincia de Salta, el gobierno provincial reafirma la política de explotar todos nuestros recursos naturales a beneficio de las multinacionales mineras como la Empresa Yacones S.R.L. y demás corporaciones que impulsan esta actividad contaminante.
Sáenz sigue el camino de entrega y contaminación para beneficiar las ganancias de unos pocos, se pasea junto a los gobernadores del NOA en Washington ofreciendo los territorios de los Valles Calchaquíes al mejor postor, con garantías legales mediante el Juzgado de Minas de la provincia y mano de obra barata, con el fin de acumular ganancia para unos pocos y ninguna respuesta a las necesidades sociales de las comunidades. En estos últimos años el saqueo ha crecido de la mano de Sáenz y sus funcionarios, impulsando que Salta sea el foco minero de toda Sudamérica. Es por eso que una de las más fervientes impulsoras en la provincia fue Flavia Royón, quien ocupa actualmente el Ministerio de Minería, ministerio estrella de Fernández, Massa y Cristina CFK.
Debido a la profunda crisis capitalista los gobiernos avanzan con sus planes extractivistas, por eso no es casual que en este nuevo proyecto minero esté implicada la familia Wayar, que aunque intente deslindarse del mismo, año tras año se va adueñando de territorios en localidades como Cachi, desde que Walter Wayar fuera su intendente -vicegobernador de Juan Carlos Romero del PJ y ahora diputado provincial- siempre aprovechando los privilegios de su vida política.
Organización para enfrentar el saqueo y la contaminación
Con Sáenz como gobernador la megaminería saquea nuestros bienes comunes afectando localidades como Cachi, donde la mayoría de las familias son pequeños agricultores, tienen un promedio de 5 hectáreas trabajadas y gran parte de la población es diaguita calchaquí. Que se inicie la explotación minera significaría un fuerte impacto ambiental, contaminando el naciente del río Luracatao, en donde confluyen las laderas occidentales y cumbres nevadas del Nevado de Cachi y de Palermo, y las laderas orientales del Cerro Oire Grande y Morteritos.
Todas las familias de Cachi se verán afectadas por la contaminación, ya que con el método extractivista de lixiviación del oro y el cobre se utiliza millones de litros de agua, proveniente del río Calchaquí. Por eso los agricultores se verán obligados a dejar sus tierras por contaminación y falta de agua, generando muerte, desocupación, hambre y emigración.
Las consecuencias sociales llegarían al punto de hacer desaparecer a los pequeños productores agrícolas con el único fin de beneficiar a una empresa que defiende los intereses de una minoría por la acción de familias tradicionales que se sienten dueñas de esta localidad y ceden tierras para la exploración de empresas como Yacones III, que se enriquece con la explotación de oro, plata y litio.
Y no solo lo decimos nosotres, sino los pueblos que resisten con la fuerza de la organización y movilización en las calles enfrentando la megaminería y al gobierno nacional que mantiene leyes mineras desde la década de los 90′. Que padecieron en estos últimos años los graves resultados del extractivismo, como los derrames que afectaron el suelo y el curso de los ríos y vertientes en Catamarca y en San Juan por ejemplo.
Desde el MST en el Frente de Izquierda Unidad denunciamos la política que lleva a cabo Sáenz en nuestra provincia, en consonancia a nivel nacional con el de Fernández, Massa, Juntos por el Cambio y toda la derecha que cierran filas en entregar nuestros bienes comunes para que las corporaciones mineras vengan a saquearnos y dejen contaminación y un desastre hídrico en la región, todo por los millones de dólares que luego destinarán para pagar al FMI.
Convocamos a toda la población de Cachi a conformar una coordinadora en defensa del agua, de la vida, del trabajo, de las comunidades originarias y en defensa de todos los agricultores que hace miles de años vienen trabajando con la madre tierra.
El agua y las economías regionales valen más que el oro.
Unidad para resistir el ecocidio capitalista.
Fuera la megaminería, no al saqueo de los Wayar.