Luego de dieciocho años y cuatro meses de discusión, el pasado viernes 1 de septiembre, el Superior Tribunal de Justicia de Río Negro resolvió a favor del magnate británico Joe Lewis en su intención de cerrar del Camino de Tacuifí, la única entrada accesible para disfrutar de la ribera del lago.
Este fallo del STJ es un ejemplo más de que la justicia está el servicio de los poderosos y no del pueblo. Es una burla a la democracia y a la soberanía nacional que demuestra el poder que tiene Lewis sobre las instituciones del Estado, que se someten a sus caprichos y presiones. Esta sentencia viola las constituciones provincial y nacional, así como diversas leyes. Hasta la Fiscalía de Nueva York lo acusa de corrupción corporativa, pero en nuestro país lo privilegian.
Pero no se trata de un caso aislado, la genética de esta justicia es clasista, racista y patriarcal. Se trata de la misma justicia que hoy tiene privada de su libertad a la lamien Yessica Bonefoi Carriqueo Antimil quien legítimamente lucha por recuperar su territorio ancestral.
Esta sentencia es el resultado de una política entreguista y cómplice del gobierno de Arabela Carreras y sus antecesores, que nunca defendieron el derecho al acceso al Lago, sino que se pusieron del lado de Lewis y sus negocios. Además, son responsables de haber incumplido las sentencias anteriores que ordenaban garantizar el acceso por el camino corto, y de haber presentado recursos para dilatar y obstaculizar el proceso judicial.
Lewis no solo se apropió de Lago Escondido, sino también de miles de hectáreas en la Patagonia, de empresas energéticas, de medios de comunicación, y hasta de un aeropuerto privado. Mientras a este multimillonario le regalan miles de hectáreas de tierras y un espejo de agua de los más importantes de la Patagonia, el gobierno de Carreras y Weretilneck impulsa y avala la represión a las comunidades mapuches, señalándolas como blanco de ataque y enemigo interno. Sin embargo, no es distinta la suerte que corren las mayorías sociales que se ven privadas de un derecho elemental como es un techo. El acceso a una vivienda digna es un privilegio y no un derecho en una provincia donde sobra tierra, pero también negocios como el inmobiliario donde grandes empresarios del turismo amasan fortunas. La misma Arabela que le da la mano a Lewis ahora se postula a Intendenta en Bariloche, el centro turístico cordillerano, para seguir beneficiando a estos terratenientes de la especulación.
Pero la ambición y el saqueo de nuestros bienes comunes por esta clase política tradicional no tienen límite. El mismo gobierno de Juntos Somos Río Negro también firmó un acuerdo con la Agencia Mekorot para llevar adelante el Plan Maestro del sector hídrico. Es decir, profundizar una política de coloniaje ahora con una empresa cómplice del apartheid contra los palestinos. La brújula de estos terricidas está clara, el saqueo extractivista a costa de los territorios y nuestras vidas para garantizar las ganancias de unos pocos.
Desde la Red Ecosocialista y el MST seguiremos denunciando al PJ y al Macrismo de convertir nuestro territorio en economías de enclave extractivista, en este caso británica. Apostamos a la movilización por la soberanía de nuestro territorio como hicimos este año junto a nuestra compañera Cele Fierro, denunciante ante la represión sufrida por las bandas parapoliciales de Lewis. Desde ya nos estamos preparando para encarar la 8va movilización para seguir insistiendo que Lago Escondido y las Islas Malvinas son argentinas.
Jere Zalazar