La Asamblea Permanente LGBT de Pilar, se movilizó a la municipalidad donde fueron recibides con amedrentamiento y represión policial. Querían presentar un pliego de reivindicaciones, además del reclamo por la reincorporación de Alexa, separada de su cargo y perseguida políticamente.
Este 10 de agosto, desde el MST en el FIT Unidad, Juntas y a la izquierda y Libre Diversidad acompañamos a la Asamblea Permanente LGBT en Pilar frente a la municipalidad exigiendo trabajo genuino y salario mínimo igual a la canasta básica. También en apoyo a la compañera Alexa, quien es perseguida políticamente y fue separada de sus actividades laborales, y por este motivo no es reincorporada a su puesto laboral.
Desde el principio nos esperaban con la puerta llena de policías para reprimir, no le permitieron la entrada al municipio a las compañeras quienes querían hacer entrega de un petitorio. Nos recibieron con represión, los policías tanto femeninos como masculinos violentando a las compañeras, insultando y violando la identidad con la que se autoperciben.
Luego de algunos forcejeos, las compañeras pudieron ingresar a la municipalidad y entregar el petitorio, donde se reclama que hace más de 4 años que les compañeres vienen denunciando las violencias institucionales y sistemáticas que atraviesan; están cansadas de que las juzguen, las discriminen por su orientación sexual y que no reconozcan su identidad.
Hace menos de un mes estábamos frente al municipio acompañando a nuestra compañera Mónica Aguirre, referente de Libre Diversidad y precandidata a diputada nacional por la lista 10R (R) Evolucionemos la izquierda en el Frente de Izquierda Unidad, quien también había denunciado violencia institucional por parte de una funcionaria de la municipalidad, de la cual no tuvimos ninguna respuesta, ni disculpas. Vamos a seguir denunciando estas prácticas violentas.
Hoy acompañamos a Alexa, militante de infancia libres y derechos humanos, también de la Asamblea Permanente LGBT+. Es que hace un año y medio que no la dejan trabajar porque la estigmatizan como una “persona de riesgo”, cuando ya tiene las dos dosis de la vacuna contra el Covid-19 aplicadas; pero el sistema no le permite volver a trabajar, argumentando que es una “persona violenta” por reclamar sus derechos.
Ella nos relató: “Cuatro años me ha tocado pasar esperando una ley de cupo laboral trans. Nuestros sueldos están muy por debajo de la canasta básica, seguimos ejerciendo prostitución como única salida. En algunos casos tenemos que pagar alquileres, otras compañeras viven en situación de calle y desde la Secretaría no se les mueve ni un pelo por hacer algo. Nos apalean y tapan la crisis con una bolsa de mercadería para tapar reclamos.”
⦁ El cupo laboral es un derecho que se ha ganado con muchos años de lucha y no se está aplicando. La ley del cupo indica que debe contarse con trabajo digno; con sueldos dignos que permitan sobrevivir, por encima de los niveles de la pobreza. Salarios de $ 13.000 están por debajo de la línea de indigencia y más cuando son acompañados de contratos basuras. De esa manera utilizan los planes sociales para contratar, precarizando a quienes pueden acceder al cupo. El Estado debe garantizar el 1 % de cupo para que las compañeras puedan tener un trabajo en el mismo y no se está implementando.
⦁ Hace 10 años que está la Ley de Identidad de género y hoy continúan esas partidas homofóbicas con la que se manejan. No vamos a permitir que los policías traten de masculinos y no reconozcan la identidad de las compañeras, lo cual está el art.12, el cual establece que: “deberán tratarse tal como se autoperciben las personas”. Los policías han violentado la identidad autopercibida de las compañeras.
⦁ También hacemos reclamos al sistema de salud que está siendo deplorable y avasallado por este sistema. Este año dos compañeras trans fallecieron por la desidia del Estado dentro del sistema de salud, donde además se burlaban de las ellas.
⦁ Le pedimos a la Secretaría de género y diversidad que intervenga como funcionarias en las problemáticas travestis-trans y que dejen de poner excusas.
Por todo esto nos movilizamos frente a la municipalidad y alrededor de la plaza 12 de octubre, exigiendo al Estado y al señor intendente Federico Achaval prontas respuestas y que tome cartas en el asunto, en caso contrario nos volveremos a movilizar. Vamos a seguir en las calles exigiendo un cupo laboral sin violencia institucional, sin precarización y con salario mínimo igual a la canasta básica. Porque los derechos no los negociamos y estamos cansades de que nos vendan espejitos de colores y que solo miren sus intereses. Ahora que estamos en plena campaña electoral quieren seguir polarizando con actos callejeros, mientras la diversidad no está en sus agendas. Hace dos años que asumió el intendente y nunca recibió a la Asamblea Permanente LGBT+. Abrió una Secretaría de diversidad donde lamentablemente silenciaron a todes, para acallar los derechos obtenidos. Pero hay un sector que no lo negocia y que prefiere salir a denunciar esas prácticas violentas con la que se manejan. Por lo cual decimos basta de violentar a les compañeres que reclaman sus derechos. El municipio no da respuestas y manda a la policía.
Tamara Ávila