Desde la Asamblea permanente LGBT+Pilar y Libre Diversidad salimos a las calles para decirle a la policía que no hacemos retrocesos en nuestros derechos. Queremos denunciar públicamente los atropellos que se cometen en la comisaría de Del Viso en Pilar, donde nuestras compañeras travestis/trans y algunas trabajadoras sexuales, han sufrido múltiples vulneraciones. Entre ellas la feroz golpiza que recibió nuestra compañera, luego de acercarse a preguntar cómo estaban las compañeras que habían sido detenidas, momentos antes.
Esta situación no es para nada nueva, ya en el mes de febrero ante un hecho similar se han perpetrado distintos tipos de violencia, discriminación y vulneración de los derechos a las compañeras. Se descubrió que la compañera que había sido apresada era menor de edad, que no se le notificó a la familia que se encontraba detenida y fue liberada al día siguiente. Los testimonios de quienes estuvieron detenidas refieren discriminación, violencia física y verbal, entre otras vejaciones.
Es por esto que el pasado 31 de agosto, Libre Diversidad y el MST en el FIT-U se movilizó a las puertas de la comisaría, repudiando todo lo sucedido y en defensa de los derechos de las compañeras travesti/trans que vienen siendo avasallados por esta comisaría desde hace largo tiempo. La respuesta a dicha movilización fue un despliegue policial, con más de 30 efectivos que bloqueaban el acceso a la comisaría. Cabe destacar que ninguna autoridad de la comisaría salió a dar explicaciones de lo ocurrido.
En estos tiempos donde venimos avanzando en la conquista de derechos no permitiremos que se nos siga vulnerando. No queremos ni aceptaremos volver a los tiempos donde ser travesti/trans era un peligro constante, donde se nos vulneraban sistemáticamente nuestros derechos.
En el pasado “vestirse de mujer” para la policía era un acto más que suficiente para arrestarnos. En la provincia de Buenos Aires por ejemplo podían ser hasta 45 días de detención, penas que variaban según las provincias entre algunas horas o algunos meses y según la ropa que vestías, no era lo mismo un pantalón o una pollera. Claro está que también variaba el precio de la multa, y el tiempo que demores en pagarla era el tiempo que estarías encerrada dentro de un calabozo. Estas multas muchas veces eran pagadas por otras compañeras, con trabajo sexual que realizaban a escondidas de la policía para poder sacar a sus compañeras. El 1B o 2H eran los códigos que tenían para arrestarnos.
Hoy queremos que las nuevas generaciones no pasen lo que muchas han pasado, es por esto que no permitiremos que se sigan avasallando nuestros derechos. Largos años de lucha han dejado compañeras muertas en el camino, feroces luchadoras por los derechos de las diversidades, históricamente olvidadas y marginadas por el sistema.
En la actualidad, donde la crisis económica se agudiza y donde nuestro colectivo es aún vulnerado, muchas seguimos siendo marginadas. El Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad, comandado por Alcorta no hace demasiado por la real implementación del cupo laboral, del mismo modo que sigue al pie de la letra todos los ajustes que le exigen desde el Ministerio de Economía, subejecutando presupuesto y recortando en áreas sensibles.
En Pilar no es muy distinta la cuestión, el área de Géneros y Diversidad no mueve un pelo por las compañeras y su silencio ante estos hechos es una justificación a voces del accionar policial. Solo aparecen para sacarse algunas fotos para la campaña y luego desaparecen.
Desde Libre Diversidad y el MST en el Frente de Izquierda Unidad nos mantendremos en alerta y movilizadas, porque no permitiremos que sigan sucediendo estas cosas. Y como dijimos antes: ¡Al calabozo no volvemos nunca más!
Libre Diversidad Pilar