lunes, 18 noviembre 2024 - 12:24

Paritaria docente. CTERA y el gobierno pactan salarios de pobreza

Después de reunirse sin mandato alguno, sin hacer una sola asamblea ni consulta al más de 1,1 millón de docentes del país, la Celeste de CTERA y las demás burocracias de los gremios docentes de la CGT, salieron a anunciar un supuesto aumento del 114%, recién para febrero del 2023. Eso fue a la mañana y ya para la foto, se fueron a la Casa Rosada para sumar también a Alberto y al ministro Manzur en la firma.

Con este anuncio, la burocracia Celeste sale a decir que “es una buena propuesta que va a superar la inflación”, lo que es falso. Así lo reflejan titulares de medios como El Destape al anunciar que “los docentes logran una suba récord en la paritaria nacional”. Otros hablan de la “Súper paritaria docente”. Pero, ¿es así? Veamos.

Empobrecen la educación al pagar salarios de pobreza

Este acuerdo, cerrado sin avisar siquiera a las bases docentes, recién en febrero del año próximo, llevará el salario inicial nacional a $ 90.338, monto que se cobrará en marzo. Cuando ya en octubre pasado, la canasta de pobreza había escalado a $ 139.738 según el INDEC. Mientras la Junta Interna de ATE-INDEC calculó para octubre que los salarios deberían estar en $ 217.764 para satisfacer las necesidades de la Canasta de Ingresos Mínimas.

Con lo acordado entre el gobierno de Perczyk, Massa y Cristina con las cinco entidades docentes nacionales, además del Consejo Superior de Educación Católica y la Confederación Argentina de Instituciones de Enseñanza Privada, el salario inicial docente pasaría a ser de apenas $ 81.325 en diciembre, de $ 84.500 en enero y de $ 90.338 en febrero. Por el FONID y Conectividad suben una miseria, ya que en diciembre pasará a $ 11.000 y en enero aumenta solo $ 1.100 más, al subir a $ 12.100.

En definitiva, se trata de titulares rimbombantes que solo le sirven al gobierno “popular” y a las burocracias sindicales cómplices para lavarse la cara. Porque lleva a que muchas provincias tengan que mirar esos porcentajes con la ñata contra el vidrio. Ya que están lejos de esos “aumentos” porcentuales o no llegan a cobrar ni ese mínimo.

Así, lejos del 114% anunciado, lo cierto es que el “aumento” para diciembre –que se cobra en enero de 2023-, apenas alcanza al 97%. Con lo que se vuelve a perder con la inflación. Ya que el relevamiento que elabora el Banco Central, calcula una inflación por arriba del 100% este año. Y se prevé una inflación que escalará otro 6,1% en enero y 5,9% en febrero (El Cronista, 1/12). A su vez, la tasa efectiva anual que se paga hoy genera un rendimiento del 107,5% anual. Todo muy lejos de lo anunciado.

Pero además, se necesita salir de la lógica de “ganar o empatar con la inflación” porque así nunca se recupera lo perdido estos años. Gremios entreguistas como UPCN calculan una pérdida del 25% que no se recuperó del macrismo. Mientras el informe de ATE-INDEC dice que llega al 33.5% esa pérdida del poder adquisitivo del salario, respecto a noviembre de 2015 (ver informe acá).

Apoyo a las provincias en conflicto. Preparar el No Inicio 2023

Según declaró Sonia Alesso de CTERA, este acuerdo “da un piso de negociación a las provincias que están en estos momentos discutiendo también paritarias” (FM La Patriada, 01/12). ¿Se vendrán entonces nuevos aumentos en diciembre, enero y febrero en la Provincia o en la Ciudad de Bs. Aires, por ejemplo…? ¿Los reclamará la burocracia Celeste de Baradel, de la UTE, UEPC de Córdoba, el SUTE de Mendoza, la AGMER de Entre Ríos y demás gremios…? Difícil, aunque ¡deberían! Tal como exigimos desde la oposición.

Las provincias que siguen en lucha actualmente son Chubut, con los paros y movilizaciones convocadas por la ATECH recuperada, en manos de la conducción provincial Lila que integramos. Además de La Rioja con la Asamblea de Docentes Autoconvocados y la AMP que llama a paro de 72 hs desde este viernes.

Mientras en Rosario se realizó este jueves una muy buena acción unitaria que incluyó a docentes, estatales y profesionales de la salud, en el marco de la reunión paritaria. Además de los cuatro masivos paros con la Multicolor de SUTEBA. Por eso y más que hacer “declaraciones”, la CTERA debería llamar a una acción y lucha nacional en apoyo a los conflictos.

Esto es importante porque, pese a que la Celeste de CTERA anuncie en su comunicado que “el Ministerio de Educación convocará a la Paritaria Nacional Docente a comienzos del año 2023 para empezar a discutir la pauta salarial para el año entrante”, lo cierto es que con este acuerdo nacional, tanto la CTERA como los gremios docentes de la CGT, dan una señal clara de que hasta marzo no habrá más aumentos.

Sonia Alesso de la CTERA con Alberto Fernández en la firma de la Paritaria

Porque así cierran el año hasta febrero de 2023, sin luchar. O más bien, sin dar continuidad al parazo nacional del 10 de agosto que se vieran obligados a tener que convocar, después de casi 3 años sin medidas de lucha.

Salario = canasta familiar + Presupuesto ya = 10% del PBI

Pero luchar rinde y, tal como muestra la marea blanca de la salud, plata hay. Para garantizar un salario igual a la canasta familiar, exigimos el aumento del Presupuesto al 10% del PBI, tal como lo exigió la Celeste de CTERA durante todo el gobierno de Macri.

Pero ahora y pese a que ese presupuesto apenas supera el 5% del PBI, el ministro Perczyk les habría prometido a los gremios que enviarían un proyecto al Congreso en el primer trimestre de 2023 para aumentar el Presupuesto educativo al 8% del PBI (Télam, 01/12).

Para que esto no sea un relato más de campaña, se debe organizar una lucha nacional por un aumento real y efectivo al 10% del PBI, pero en un solo tramo, no progresivamente y a lo largo de los años como pedía la Celeste de CTERA.

La plata está, ese aumento debe ser sostenido por impuestos progresivos a las ganancias de las grandes empresas, el lucro financiero y los fondos que evaden o pagan impuestos irrisorios como las mineras y petroleras.

Además de plantear el no pago de la deuda externa, la repatriación de fondos, la renacionalización de las empresas privatizadas. Y la eliminación de los subsidios a la educación privada y confesional. Disponiendo la estatización de toda escuela que cierre o quiebre, resguardando los derechos, fuentes laborales y la matrícula.

Para logarlo, como planteamos desde Alternativa Docente (ANCLA – MST en el FIT Unidad) junto a toda la Multicolor bonaerense, es necesaria la convocatoria a asambleas y plenarios para votar un plan de lucha por la urgente recomposición salarial para cubrir la canasta familiar en un cargo. Y preparar el No Inicio 2023, junto a la CTERA y sindicatos provinciales en lucha.

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