Contrastando con el canto de los militantes de la Cámpora frente al discurso de Cristina en la EuroLat, “somos los pibes para la liberación”, la vice acaba de batir un récord. En tan solo quince días se reunió con dos enviados del imperialismo yanqui: primero fue con el embajador Marc Stanley; ahora acompañada por este, recibió a la jefa del Comando Sur de Estados Unidos, la generala Laura Richardson. Otro ex descamisado, preso por largos años del gobierno de Isabel y la dictadura, el ministro de Defensa Jorge Taiana, también recibió a la enviada del Pentágono. En sintonía, el ministro del Interior, el ex militante de HIJOS, Wado de Pedro encabezaba una importante delegación argentina a ese enclave del imperio yanqui que es el Estado de Israel. ¿Qué pasó con el discurso anti imperialista y contra el FMI?
“Hoy recibimos a la generala de cuatro estrellas Laura Richardson, comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, primera mujer en ocupar ese cargo en la historia. Nos acompañó el embajador de ese país en Argentina, Marc Stanley”, escribió la vicepresidenta en sus redes sociales este martes 26.
Según informa la embajada yanqui, la generala Richardson arriba al país como parte de una gira regional con el objetivo de tratar temas sobre “estrategias de cooperación en áreas de interés común como respuesta a desastres naturales, cambio climático y ciberseguridad”. Tras esta agenda formal de la representante de uno de los responsables más grandes del mundo del calentamiento global, es fácil deducir que su obsesión por la ciberseguridad está ligada a la campaña de Estados Unidos por evitar la injerencia China y asegurar los intereses norteamericanos en el “patio trasero”.
El Comando Sur es el brazo del Pentágono para el resguardo de los intereses de Estados Unidos en América Central, Sur y el Caribe. En sus documentos advierten la presencia de China, Rusia e Irán en la región y advierten contra el “populismo radical” instaurado por Chávez y la amenaza cubana. La visita de Richardson ha sido precedida por el anterior jefe del Comando Sur, el almirante Craig Feller, en abril del año pasado.
Ver: Visita del jefe del Comando Sur de Estados Unidos. Yanquis go home
El antecedente más cercano a la gira de Richardson es la reciente visita a Washington del secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, en la cual se entrevistó con Jake Sullivan, el principal asesor de seguridad nacional de Biden, con Juan González, responsable de la relación con América Latina y con el ex vicepresidente demócrata John Kerry.
Reuniones previas con Taiana y el jefe del Estado mayor de las Fuerzas Armadas
Luego de ser recibida por una guardia de honor al pie de las escalinatas del Edificio Libertador por el jefe del Estado Mayor Conjunto, teniente general Juan Martín Paleo, se sacaron fotos con Stanley incluido frente a la estatua del Libertador ¿Y la patria liberada?
Según la embajada de Estados Unidos, en la posterior entrevista de la comandante yanqui con el ministro de Defensa, se trataron “cuestiones de seguridad” sobre las que no se dieron mayores precisiones. Taiana a su vez mencionó que “fue una productiva reunión bilateral para abordar temas de interés común en relación a la cooperación en materia de defensa”.
Según informaron medios periodísticos, se habló entre otros temas de la próxima visita del buque escuela, el ARA Fragata Libertad, al puerto de Baltimore. Al cumplirse 40 años de la guerra de Malvinas, donde el Comando Sur fue clave en el apoyo logístico a la armada pirata, el ministro se encargó de ratificar nuestro reclamo de soberanía; aunque su reclamo, obvió las responsabilidades yanquis y se remitió a la exigencia que Inglaterra levante el embargo para la compra de armas. Un tema que, según informes periodísticos, se debate en el seno del imperio británico a cambio de favores argentinos para los kelpers.
Richardson habría señalado también su “preocupación” por la posible adquisición de aviones de combate chinos. Es conveniente recordar que la anterior observación de su antecesor Craig sobre la instalación de un polo logístico antártico con financiamiento chino en Tierra del Fuego terminó siendo reemplazado por un financiamiento local y la desvinculación de este país del proyecto.
Como informa Télam, Argentina y Estados Unidos mantienen una importante cooperación en el área castrense que se enmarca en 22 instancias de vinculación bilateral, 15 acuerdos, 5 mecanismos, 1 convenio de organismos científicos tecnológicos de la defensa y un convenio de la Universidad de la Defensa.
La reunión y el relato de Cristina
En la reunión de la tarde en las oficinas privadas del Senado de la vicepresidenta, junto a Cristina, la generala Richardson y el embajador Stanley participaron también el secretario de Asuntos Internacionales para la Defensa, Francisco Cafiero; la subsecretaria de Planeamiento Estratégico y Política Militar, Fernanda Llobet y el subsecretario de Asuntos Internacionales, Roberto De Luise.
En el anterior encuentro con Stanley, Cristina le pidió al embajador yanqui ayuda para encontrar capitales argentinos no declarados en el exterior y el apoyo a su proyecto de ley para crear un fondo para pagarle al FMI, en una suerte de blanqueo con un impuesto del 20%. O sea, terminaba aceptando el tan cuestionado acuerdo y le pedía a uno de los representantes de la fuga de capitales en el mundo que la apoyara en su búsqueda.
Además, reza el comunicado de la vicepresidenta de esa ocasión: “Conversamos sobre distintos temas de interés común: lavado de dinero, trata de personas y derechos humanos”. Nos imaginamos la defensa de los derechos humanos que realiza la primer potencia del mundo que, tal como los jefes de otras potencias capitalistas como Putin o Xi Jimping, no para de violar los derechos humanos que dice defender.
Ahora, el mismo discurso edulcorado pretende encubrir su entrevista con una de las embajadoras del imperialismo yanqui que viene a supervisar el patio trasero. Mientras, en la embajada estadounidense, refiriéndose a la reunión entre Cristina Kirchner y Laura Richardson hablaron del “importante rol de las mujeres en el mantenimiento de la paz y la seguridad en la región”. La nueva jefa del Comando Sur fue designada por Biden el 8 de marzo de 2021, día internacional de la mujer, para afianzar este discurso tramposo. Cristina destacó que la generala de 4 estrellas es “la primer mujer en ese cargo en la historia”.
Una complicidad total entre la vice y la embajada para, tras un discurso pseudo feminista, ocultar el rol real de la embajadora del imperio. Se trata de la potencia más grande del mundo que dirige el FMI, al que vamos a pagar con el sacrificio del pueblo argentino una histórica estafa concebida por Macri, las autoridades del Fondo y la dirigencia yanqui. Un discurso funcional a suavizar el hecho de que el Comando Sur, que ahora dirige Richardson fue siempre el guardián militar del imperio, responsable de la invasión a Panamá, del Plan Colombia, de la formación de cuadros militares genocidas para las dictaduras de la región, entre muchos atropellos a la soberanía de nuestros pueblos. Y sigue cumpliendo esa función, ahora hablando de democracia y derechos humanos.
El discurso nacional y popular de Cristina, La Cámpora y el progresismo del Frente de Todos sigue hablando contra el FMI y de la liberación para la tribuna, mientras conservan sus cargos en el gobierno cuya política central dicen no compartir y se entrevistan con los amos del imperio. Como decía el profundo pensador Marx (Groucho): “si no te gustan estos principios, tengo otros”.