Con el verso de la liberación de los precios, en todos los meses de la era Milei hubo aumentos que perforaron los ingresos de las familias trabajadoras.
Nuevo ajuste al bolsillo
Los aumentos se calculan en todos los ámbitos y siguen empujando a nuevas familias a sumarse al 52,9% de personas por debajo de la línea de la pobreza.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, aumentará el boleto de subte un 16,46%, llevando al boleto a costar $757 y el premetro a $264. En el desarrollo de este año, el pasaje aumento cerca del 560%.
En cuanto a la tarifa de agua, en el AMBA habrá un aumento de 4,9% durante este mes. Hasta septiembre las boletas de agua tuvieron un aumento del 271%.Del mismo modo, se calcula un aumento de la luz que rondará el 3% dependiendo la zona geográfica.
A su vez, quienes tengan contrato de alquiler firmado durante la vigencia de la derogada ley de alquileres, deben pagar una actualización anual del 237,9%. Quienes tengan actualizaciones semestrales tendrán un aumento del 68,5% y trimestrales en 4%.
Octubre golpea también con aumentos de las compañías de cable y telefonía celular que tienen un promedio del 4%. Asimismo, aumentaran los peajes de los corredores de jurisdicción nacional, todavía sin precisiones en el monto.
Por otro lado, aumentaran prepagas entre el 4,1% y el 8,4%, dependiendo la empresa y colegios privados de la provincia y la ciudad de buenos aires, entre un 3,1% un 4%.
Son evidentes los aumentos que nos atraviesan diariamente, pero los libertarios festejan la baja del 1% en nafta. La misma subió 240% durante el gobierno de Milei.
Fueron 10 meses seguidos de aumentos de precios que no se equiparan a los salarios. Durante todo el gobierno de Milei se vio esta transferencia de recursos, que empobrece más y más al pueblo trabajador. Los números de pobreza tienen el correlato en el brutal ajuste al que está sometiendo a la población.
Cada día de implementación del plan motosierra, son malas noticias para los trabajadores y sectores populares. No hay que esperar más, hay que decirle basta a Milei, con fuertes convocatorias callejeras en unidad. La movilización federal del 2 de octubre es una gran oportunidad para comenzar un plan de lucha que le ponga freno al proyecto de saqueo y hambre de Milei. Lamentablemente, las centrales como la CGT y la mayoría de los sindicatos, terminan siendo cómplices del ajuste al dilatar las luchas en curso, y tampoco convocar a un verdadero plan de lucha que enarbole todos los reclamos salariales y sociales.