Tras las consecutivas renuncias de Elizabeth Gómez Alcorta, Claudio Moroni y Juan Zabaleta, el gobierno, esta tarde, confirmó los nuevos nombres para las carteras que habían quedado acéfalas durante el fin de semana.
A través de las redes sociales, Gabriela Cerruti, actual vocera presidencial, fue quien dio a conocer las nuevas incorporaciones para completar el diagrama del nuevo gabinete. Con un comunicado oficial, el gobierno que encabeza Alberto Fernández decidió que: Victoria Tolosa Paz, actual diputada nacional y muy cercana al presidente, sea quien dirija el Ministerio de Desarrollo Social; además, también se confirmó que Ayelén Mazzina sea la nueva ministra de Mujer, Diversidad e igualdad y, en último término, Kelly Ocampos fue la escogida para reemplazar a Moroni y ser la titular de la cartera de Trabajo.
El fin de semana, como lo relató gran parte de la prensa afín al gobierno, demostró un nuevo clima de crisis y desbarajustes. Luego de la represión a la comunidad mapuche y la privación de la libertad a siete integrantes de la misma -algunas trasladadas a Ezeiza-, se conoció la primera renuncia. Gómez Alcorta, la militante de Patria Grande y abogada de Jones Huala, encontró un “límite” a su función por el accionar de las fuerzas represivas, hoy conducidas por Aníbal Fernández y su Ministerio de Seguridad. Si bien la denuncia de la exministra es cierta, su renuncia no fue seguida de una ruptura de su espacio con el Frente de Todos que, horas después, también reprimió en provincia de Buenos Aires de la mano de Berni.
Acto seguido, ya por intereses personales, Juan Zabaleta renunció al Ministerio de Desarrollo Social. Desgastado por la confrontación constante con los movimientos sociales y piqueteros, Zabaleta decidió volver a su función de intendente en Hurlingham e intentar la reelección en 2023. Por el lado de Claudio Moroni, según trascendió por parte de fuentes cercanas a él, su dimisión se vio motivada por cuestiones de salud. Lo cierto es que el ex funcionario se vio muy cuestionado tras la dura derrota que le propinó el SUTNA, luego de haber hecho gala de su defensa acérrima a las patronales del neumático.
Para encontrar salida a esta crisis, el tridente que comanda el Frente de Todos, Alberto Fernández, junto a Cristina Fernández de Kirchner y Sergio Massa, más allá de las rispideces que según ventilaron existieron durante el fin de semana, confluyeron en los nombres mencionados. Las tres nuevas ministras reafirman el corte pro ajuste y subordinado al FMI, que se venía imprimiendo por parte del actual gobierno peronista.
Repasando los perfiles de las nuevas funcionarias, damos con lo siguiente:
Victoria Tolosa Paz: la actual diputada nacional, que ocupará la cartera de Desarrollo Social, se hizo conocida por su gran patrimonio y, además, su perfil clasista. Quien vive en un country, será la encargada de encabezar las demandas de los movimientos sociales por más cupos en los programas sociales, el aumento de los mismos y, como destaca siempre la Unidad Piquetera, la implementación de una política que cree trabajo genuino. Sin embargo, sabiendo que Tolosa Paz bancó el desalojo de Guernica para la construcción de un complejo privado como el que ella habita, ya se puede avizorar cómo va a ser su gestión.
Raquel “Kelly” Olmos: una figura eterna del peronismo porteño y con porte menemista. Kelly Olmos, una nostálgica del modelo que supo imprimir el riojano, desembarcará en una cartera convulsionada de conflictos paritarios, producto de una inflación que carcome el poder adquisitivo de los salarios. Por su formación y pasado, demás está hacernos la pregunta sobre lo que piensa ante las ideas de una reforma laboral precarizadora. De todas formas, entre otras cosas, no fue una noticia agradable para los burócratas de la CGT que se mostraron disconformes por no haber sido consultados para la elección de la nueva ministra.
Ayelén Mazzina: por último, la actual Secretaria de la Mujer, Diversidad e Igualdad de la provincia de San Luis, de 32 años, será la nueva Ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad. La encargada de orquestar el método burocrático para escoger la nueva sede del próximo Encuentro Plurinacional de Mujeres y Disidencias, es quien estará al frente de un área que, no ha culminado para nada con el patriarcado, como supo decir en su momento Alberto Fernández.
Los movimientos mencionados se dan en el marco de una crisis social y económica que no para, más bien sigue en ascenso. Las nuevas ministras sólo vienen a cumplir una función de aminorar las tensiones al interior de un frente que protege de manera permanente los intereses de las minorías más concentradas. Con la hoja de ruta elaborada por el Fondo, el Frente de Todos se dispone a continuar lo que queda del año con la intención de aprobar el presupuesto 2023 que cocinó Massa con Georgieva. Sólo la izquierda organizada en el FIT-Unidad, como lo remarcamos constantemente desde el MST, es la única con capacidad para implementar un gobierno a favor de las necesidades sociales, rompiendo con los mandatos de los organismos de crédito y los intereses de los capitalistas que nos quieren hacer pagar los costos de este declive económico que ellos produjeron.