El Frente Multicolor – Bermellón e Independientes realizó una muy importante votación en las elecciones docentes neuquinas, aunque no alcanzara para recuperar el gremio a nivel provincial.
El pasado 29 de mayo se realizaron las elecciones en ATEN, el gremio docente de Neuquén y entidad de base de la CTERA, en el que se eligieron las comisiones directivas de las 22 seccionales, la comisión directiva provincial y todos los cargos de representación en el Consejo Provincial de Educación (Juntas de clasificación y Vocalías gremiales).
En una elección histórica por su mayor polarización, y con el 66,7% de votantes en toda la provincia, la burocracia logró imponerse por apenas el 4% de los votos, aproximadamente, unos 503 votos. Esto muestra que la diferencia entre el Frente Multicolor – Bermellón e Independientes (FMBI) y el TEP (Trabajadores por una Educación Popular-Celeste) respecto del 2021, logró achicarse casi en un 45%, ya que esa diferencia a favor de la burocracia en ese año fue de 1.123 votos. Logramos mantener las seccionales Capital, Plottier, Picún y Chañar más Senillosa que, si bien ganó como Lista Lila, sumaron abiertamente su apoyo a la lista del Frente Multicolor – Bermellón a nivel provincial.

Pero antes de avanzar con los elementos que se conjugaron a nuestro entender en esta elección, nos parece pertinente contar el contexto en el que se dio esta contienda.
Punto de partida
Estas elecciones se dieron en el marco de que la docencia neuquina venía sin luchas importantes desde el año 2018, lucha en la que se conquistó el IPC trimestral (aplicar al salario el índice de precios), en una importante pulseada con la burocracia que quiso cerrar el conflicto ante la primera propuesta del gobierno, la que estaba muy lejos de lo que finalmente se consiguió con ese IPC trimestral.
Les trabajadores de la educación volvimos a salir a la lucha por recomposición salarial y mejores condiciones laborales a principio del año pasado (2024) y luego del receso de invierno, para enfrentar el presentismo (plus extorsivo como lo llamamos acá) que impuso el gobierno de Rolando Figueroa (Neuquinizate).
Durante estos dos conflictos se sumó una camada muy importante de activismo, compañeras y compañeros nuevos que no habían tenido ninguna experiencia de lucha por haber ingresado al sistema después del 2018, y pandemia de por medio, que fueron parte fundamental en dar la pelea para recuperar aten para la lucha.
Ante este activismo, con la conducción Multicolor/Bermellón aparecimos como una alternativa clara de disputa con la burocracia, dispuesta a luchar sin claudicar y con posicionamientos de unidad ante la base, que se demostraron con fuerza en cada una de las multitudinarias asambleas de la Seccional Capital.
Ante ese panorama, Guagliardo y el TEP comenzaron a debilitarse públicamente a partir de los intentos sistemáticos por cerrar los conflictos ante la primera propuesta del gobierno. En cada una de esas oportunidades, aparecieron como los paladines de la transa y de la desconfianza absoluta en las y los trabajadores de la educación, que estaban dispuestos a pelear por más, tanto en el 2018, como en los dos conflictos del 2024. Como furgones de cola de la política del PJ cuando fue gobierno en el país, también lo son de Neuquinizate, el partido de Figueroa. Por eso su modelo sindical se basa en la desmovilización de la base docente y la restricción o limitación de la democracia sindical.
En relación al rol jugado por ellos en los cargos de representación en el CPE, fueron cómplices y acérrimos defensores de todas las reformas educativas impulsadas por el gobierno. Y fueron la primera línea de persecución, a través de sumarios, a compañeros y compañeras de la oposición.

Acompañaron la decisión del gobierno de eliminar los cargos de preceptoras en el Nivel Inicial, de vaciar las escuelas de la modalidad especial, de obligar a un proceso de inclusión sin recursos en todos los niveles, entre otras cosas, y a todo esto debemos sumarle una mayor adaptación del TEP al gobierno de Figueroa.
Menos de un mes de campaña
En esta oportunidad, y contra reloj, con el Frente presentamos listas para la Directiva Provincial, en 14 seccionales y para todos los cargos de representación en el Consejo de Educación, respetando en el armado las proporciones que se usaron en la elección pasada: 60% de los cargos para el Frente Multicolor y 40% para el Frente Bermellón.
Llevamos adelante una campaña en total desventaja con la burocracia, que contaba no solo con su propio aparato y recursos, sino también con el explícito apoyo del gobierno de Figueroa y la ministra de educación, Soledad Martínez, que planteó: “Hay dos modelos con una mirada diferente respecto de cómo se construyen soluciones y, desde ese lugar, es posible que los escenarios difieran si gana uno u otro. Para llegar a acuerdos, es necesario que la dirigencia quiera verdaderamente resolver los problemas de la educación”. No siendo la burocracia “oficial” del partido de gobierno, se jugaron por sostener al TEP como aliado al frente de este enorme sindicato que representa a más de 19.000 docentes y es puntal en las luchas.
Así lo entendían también el resto de las fuerzas del sistema, intendentes y punteros del PJ y el MPN y grupos mediáticos que se alarmaron y actuaron para evitar que con la izquierda y los sectores combativos pudiéramos volver a recuperar el sindicato para la lucha en serio. Sin embargo y a pesar de ello, logramos recorrer toda la provincia recibiendo un importante apoyo de compañeras y compañeros dispuestos a fiscalizar, a recorrer escuelas haciendo campaña y sacándose fotos en apoyo al Frente.
Aplastante triunfo del Frente en la Seccional Capital
En la combativa Seccional Capital, con un padrón de 6.548 afiliades, votó el 62.9% (4.122 votantes) que se tradujo en un 67,7% con 2.793 votos para el FMBI, y un 31,3% para el TEP, con 1.292 votos. Es decir que logramos una diferencia a nuestro favor de 1.501 votos, un 36,4% más. Realmente la docencia de esta seccional se levantó masivamente para ir a votar y defender así el proyecto que las llevó a organizarse para la lucha, en defensa de los derechos conquistados y ante distintas situaciones de ataque por parte del gobierno.

En esta seccional, logramos garantizar presidentes, vicepresidentes y hasta dos fiscales por mesa. Hubo compañeras y compañeros proponiéndose para ir a “cuidar los votos” al interior donde no había listas del Frente, se armaron grupos de delegades que salieron a recorrer escuelas por su cuenta, etc. En las escuelas, las compañeras y compañeros nos planteaban con certeza “tienen que ganar porque necesitamos un cambio”.
Por eso en esta elección la burocracia no solo no sumó un solo voto respecto al 2021, sino que perdió 8 votos, algo inédito al votar centenares de docentes más en esta elección. Es decir, con el Frente sumamos todos los nuevos votantes en la Capital neuquina (1.031 votos más), aunque también sumamos un buen número en el conjunto de la provincia, cosechando 830 votos más en el interior respecto a 2021. Lo que expresan los 1.881 votos que crecimos como Frente desde la última elección.
Solo que el TEP logra crecer provincialmente, aunque bastante menos que la Multicolor/Bermellón, pero le alcanzó para retener la Provincial, aún al costo de perder seccionales.
Es evidente que la campaña del TEP pegó en un sector, al decir que el Frente no respetaría al interior y nuestra lista provincial era toda de Capital. Asentados en cuestiones materiales, metieron temor al decir que, si venía “la izquierda”, se perdería todo. Esto plantea como tarea, crecer, llegar más al interior, provincializarse, comprender que no es posible dirigir la provincia desde dos o tres seccionales. Crecimos muchísimo en Capital pero no alcanzó, esto hace al modelo sindical en el que debemos avanzar.
Perspectivas y tareas
Ante estos resultados en la Seccional, pero más de conjunto en la provincia, creemos que el TEP puede tener complicado dirigir sin sobresaltos el gremio. Los problemas objetivos como la insuficiencia del salario para llegar a fin de mes; las reformas en el Nivel Inicial y Medio que precarizan brutalmente nuestra tarea pedagógica; la inclusión que obliga a las maestras a hacerse cargo de estudiantes sin recurso humano ni material; la infraestructura de las escuelas cada vez más obsoleta y deteriorada y la violencia de algunas familias que irrumpen en las escuelas; son un enorme caldo de cultivo de bronca, que si no encuentra respuestas en la conducción provincial, más temprano que tarde les pasará por encima.

Nos resulta evidente que, más allá de no haber logrado ganar la conducción provincial, el FMBI hizo una excelente elección, en el marco de una importante polarización y consideramos que parte de este resultado electoral se dio gracias a que la mayoría de las agrupaciones del Frente terminaron entendiendo que había que jugarse a ganar la Provincial, ubicando a nuestras mejores referencias en la lista que daba esa pelea y que veníamos de haber acumulado la experiencia de dirigir la seccional más importante de aten y sus luchas, incidiendo también provincialmente.
Este resultado nos debe ayudar a ubicarnos en ahondar la pelea por la democracia sindical. Hace falta un nuevo modelo sindical, para lograr un sindicato y seccionales de lucha e independientes de todos los gobiernos y las patronales. Profundamente antiburocrático, que esté en las escuelas y que tenga la obsesión llegar a toda la provincia, y se apoye además en los cuerpos de delegades.
Desde Alternativa Docente luchamos por la imprescindible reforma del antidemocrático Estatuto gremial de ATEN, para terminar con el reinado de los “secretarios generales” que deciden sobre las asambleas. Donde las comisiones directivas y los demás órganos de representación se elijan de forma proporcional a los votos de cada lista. Porque así la Provincial cambiaría realmente, ya que el TEP no puede tener todo, cuando el 46% de los cargos deberían ser de la oposición.

Además, fijar la revocatoria de mandatos, finanzas transparentes, distribuidas democráticamente y controladas por las bases. Con un gremio y seccionales fanáticas por lograr la nacionalización de nuestra lucha y de las demandas educativas. Lo necesitamos para no retroceder ante derechos conquistados por los que vienen Milei, Bullrich y Figueroa, con su ministra Martínez, que además apuestan profundizar un régimen cada vez más autoritario y represivo.
Esta elección ha mostrado que hay un espacio importante para continuar profundizando la disputa por ese modelo sindical al que aspiramos, por lo que desde las Seccionales del Frente debemos seguir apostando a la fuerza organizativa de la base docente, convocando a asambleas y tomando las decisiones de manera colectiva, para continuar mostrándole al conjunto de la provincia que luchar sirve y es la única manera de enfrentar el ataque sistemático de los gobiernos.
Y abrir también algunos debates en los que venimos más atrás, como poner en pie un real proceso de debate educativo, a través de un Congreso Pedagógico Nacional en el que podamos discutir qué enseñar, para quiénes y para qué modelo de país, porque ante las reformas educativas nuestra respuesta no puede ser solamente el rechazo. Somos trabajadoras/es de la educación y junto a la comunidad educativa, somos quienes podemos pensar, proponer y defender un sistema educativo público, único, estatal, laico, científico, con perspectiva de género y ambiental y gratuito.
Para ello desde Alternativa Docente en el FMBI, ponemos la Secretaría de nivel inicial y primario al servicio de profundizar estas tareas; secretaría que estará a cargo de nuestra compañera Natalí Alegría.
Resta también continuar el trabajo y profundizarlo en el interior, llevando todos los debates a cada una de las seccionales y reivindicando el método utilizado estos años, que es la democracia sindical y la organización de las bases ante cada intento de los gobiernos en avanzar contra los derechos conquistados en las calles.
Por último, y como parte de las conclusiones que nos dejó esta elección en la que se demostró que organizarse sirve, te invitamos a que lo hagas con nuestra agrupación, Alternativa Docente para ir por más.
Priscila Ottón Araneda y Natalí Alegría