El pasado jueves 27 de abril, asumió como concejala por el MST en el FIT Unidad nuestra compañera Priscila Ottón. Esta asunción es parte de la rotación en el FITU de una de las bancas conquistadas en la elección del 2019. Pero a partir del 10 de diciembre de este año, asumirá en una de las dos bancas conquistadas el pasado 16 de abril.
“Por la memoria de las y los 30 mil compañeros detenidos desaparecidos, al servicio de las luchas y por el socialismo”, juró Priscila, en el Concejo Deliberante de la ciudad de Neuquén, con su pechera blanca de maestra, con las caras estampadas de Carlos Fuentealba, Silvia Roggetti y Mónica Jara, éstas últimas asesinadas por la desidia del Estado y del gobierno del MPN.
La acompañaron Alejandro Bodart, secretario general del MST y dirigente de la Liga Internacional Socialista, su familia, amigues y, por supuesto, los y las compañeras de nuestro querido MST que la recibieron en la calle al ritmo de los redos cantando “concejala de les trabajadores y ahora que la crisis la paguen los patrones”.
“La verdad que una alegría grande. Todos los que conocemos hace años a Priscila sabemos que esta banca va a estar al servicio, claramente, de los trabajadores, de los sectores populares, de la pelea por garantizar derechos en un país donde los antiderechos han vuelto a sacar la cabeza después de mucho tiempo. Es muy importante que Priscila entre para dar batalla para defender nuestros derechos. Dejo los saludos de todo el partido, de los compañeros de la LIS, este es un triunfo de todos nosotros.” Fue parte de lo que expresó el compañero Bodart.
Luego, volvió a entrar al recinto para ser parte de su primera sesión. Allí dejó en claro, ante todos los presentes, las medidas que hay que tomar para salir de la crisis económica que está atravesando el país, de la mano del Frente de Todos y de JxC, que le vota todas las medidas sin grieta. Nacionalizar la banca exterior con control de sus trabajadores y cortar todo lazo con el FMI, en primer lugar. Pero también aumentar las ayudas sociales, jubilaciones y salarios, por decreto.
Por último, planteó que “hoy, hacer política, para muchos, significa pasar a ser parte de una casta con privilegios. Anduve casi toda mi vida en colectivo. Me crie en una toma de terreno, junto a mi familia. Comí en ollas populares que organizaban las madres cuando la hiperinflación de Alfonsín. Soy una trabajadora, una maestra del oeste, y una militante trostkista y revolucionaria desde los 12 años. No estoy acá para ser parte de esa casta de privilegiados. Estoy acá, para ser la voz de quienes no son escuchadas ni escuchados. Estoy acá para seguir luchando desde este lugar por un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres”.
MST en el FIT Unidad Neuquén