En julio pasado, Periodismo de Izquierda titulaba Municipales de Berazategui. Un primer triunfo en el camino de la reincorporación de los despedidos, tras el reconocimiento de las autoridades de la Unión del Personal Municipal de Berazategui (UPMB) por parte de la cartera laboral.
Repasemos, la UPMB lleva casi 11 meses con 8 de sus principales dirigentes (entre quienes me incluyo) cesanteados, tras una maniobra ilegal por parte del ejecutivo municipal, una fuerza política hostil hacia nuestro modelo sindical democrático, de lucha e independencia política.
Nuestra movilización del último miércoles al Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, con una masiva concurrencia de trabajadores municipales y la participación, como siempre, de varias organizaciones solidarias de la clase trabajadora, logró arrancar una entrevista con un alto funcionario de la Subsecretaria de Relaciones del Trabajo, que podemos considerar un segundo triunfo.
El ministro Walter Correa, recientemente mantuvo reuniones con los titulares de las dos Federaciones de Sindicatos Municipales, participó del acto de asunción de las nuevas autoridades de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la provincia de Buenos Aires (FSTMPBA) que se realizó en el municipio de Hurlingham y de una jornada de Estudio y Debate sobre el Empleo Público Municipal en la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), junto al titular de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (FESIMUBO).
En ambos encuentros, Correa reiteró que entiende la problemática por la que atraviesan casi todos los trabajadores municipales de la provincia y se comprometió a avanzar en la búsqueda de soluciones concretas. Esta es una oportunidad de demostrarlo.
Nuestra reunión con el representante de la cartera estuvo atravesada por ese discurso que insinúa darle el ministro a su gestión. Sin pecar de ingenuos, nos llevamos la impresión de que existe un interés genuino por mediar y acercar posiciones, pese a que el municipio de Berazategui siempre se mostró intransigente hasta la fecha. Pero de lo que se trata es de llevar al terreno de las acciones concretas ese discurso.
La convocatoria en breve a una audiencia de partes encarada por la Dirección Provincial de Negociaciones Colectivas a pedido de nuestra entidad, representa un avance con respecto a la gestión de la ex titular del organismo, etapa durante la cual ninguna de nuestras presentaciones en ese sentido prosperó. Pero eso no alcanza. El ministerio debe tomar parte, y actuar severamente frente a las prácticas ilegales y antisindicales del municipio de Berazategui.
Por otro lado, en un acto de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), ante el aumento de la conflictividad social, de la inflación galopante, de la pobreza y pretendiendo mostrarse por fuera del gobierno, la vicepresidenta postuló un aumento salarial mediante suma fija. Paritarias, bono o suma fija, lo cierto es que Alberto Fernández se sumó al debate y admitió, al igual que el “superministro” Massa, que los salarios más deprimidos corresponden a los empleados públicos municipales.
No descubrieron nada, en los últimos días y solo en provincia de Buenos Aires, compañeros municipales de Lanús, Moreno y Esteban Echeverría realizaron medidas de fuerza por mejoras salariales, laborales y contra los regímenes precarizantes de sus intendentes. Parecen pocos focos de conflicto en una provincia con 135 distritos, pero no lo son. Hasta diría que es excepcional. Históricamente los intendentes han sabido mantener a raya a sus empleados, con la complicidad de los dirigentes sindicales tradicionales.
La muy probable derrota electoral el año próximo, nos muestra a un peronismo kirchnerista consagrado a replegarse en la provincia de Buenos Aires, donde todo indica que Kicillof buscaría su reelección. Los municipios serán el escenario clave para retener y resistir los 4 años post elecciones.
En ese sentido, y por más que sus cálculos electorales los lleven a una dependencia cada vez mayor de los votos aportados por los intendentes del conurbano, el gobierno provincial tiene que tener claro que a los trabajadores municipales no hay coyuntura electoral que nos vaya a frenar a la hora de luchar por nuestros derechos. La opción es clara: o le dejan pasar a Mussi y el resto de los intendentes todas y cada una de sus políticas antiobreras o de una vez por todas se atiende el reclamo de la familia municipal y el conjunto de los trabajadores.
Por nuestra parte, desde la conducción de la UPMB vamos a continuar con nuestras medidas de lucha hasta que se reincorpore al último de los dirigentes despedidos y se permite el libre accionar de nuestro sindicato en cada uno de los sectores de trabajo.
A su vez, los municipales que conformamos ANCLA, la agrupación sindical del MST vemos como una oportunidad para seguir organizándonos e intercambiando ideas para esta lucha, participar del próximo Encuentro de Trabajadores convocado para el sábado 10 de diciembre e invitamos a todos los compañeros y compañeras de nuestro gremio a sumarse. Porque esta lucha, la ganamos entre todos.
Mario Torroba
Secretario General de la UPMB