El jueves 17, el Tribunal Oral Federal de Jujuy[1] dictó una nueva e injusta condena contra la dirigente social y política Milagro Sala: tres años y medio de prisión por supuestos daños y amenazas en el marco de un escrache de la organización Túpac Amaru, ocurrido en octubre de 2009, contra el gobernador radical-macrista Gerardo Morales. También fueron condenados los dirigentes María López y Ramón Salvatierra. Lo absurdo es que en ese escrache Sala ni siquiera estuvo presente. Y en esta audiencia condenatoria, los jueces no dejaron hablar a sus abogados defensores.
Esta nueva condena contra ella es parte de una larga persecución por parte de Morales y su justicia provincial adicta. En esa misma causa, en 2016 Sala había sido condenada a tres años de prisión en suspenso por los daños, en tanto que las amenazas habían prescripto. El tribunal superior, Casación Penal, confirmó esa condena pero consideró mal dictada la prescripción y ordenó al TOF resolver una nueva sentencia.
En 2017 los jueces de Casación Mariano Borinsky y Gustavo Hornos, que se reunían en secreto con Mauricio Macri en Olivos y en la Rosada, ordenaron ampliar la condena. Como a su vez la defensa de Sala denunció ante el Consejo de la Magistratura a los jueces del TOF jujeño por mal desempeño, éstos agravaron con seis meses la condena de 2016, de modo que al superar los tres años no es excarcelable. Sala apelará ante la Corte Suprema.
Más allá de nuestras divergencias con Milagro Sala y su agrupación, nos volvemos a solidarizar con ella y reclamamos su libertad. Es una presa política porque fue detenida en enero de 2016 por liderar un acampe en la plaza central de San Salvador de Jujuy y desde entonces es víctima de la persecución político-judicial de Morales. Es el mismo señor feudal que reprime las luchas sociales, criminaliza al activismo y nos impide al FIT Unidad rotar las bancas parlamentarias.
Salvo sectores muy minoritarios, desde el gobierno nacional y el Frente de Todos el peronismo deja correr la persecución antidemocrática de Morales y su justicia títere contra Milagro, a quien le armaron 16 causas. Por eso la Túpac Amaru anunció que el 6 de julio realizará un acampe en Plaza de Mayo para exigir la libertad de su dirigente.
En este país, en donde un integrante de “Bailando por un sueño” acaba de reconocer públicamente que como policía de la Bonaerense se infiltraba en las marchas de desocupados, lo que incluso está prohibido por la ley, no podemos menos que repudiar esta nueva condena contra Milagro Sala y exigir una vez más su inmediata libertad, así como la de Sebastián Romero, y el cierre de todas las causas contra las y los luchadores populares.
Pablo Vasco
CADHU-MST
[1] Integrado por Mario Juárez Almaraz, Alejandra Cataldi y Liliana Snopek, prima de la esposa del gobernador Morales.