Mientras enero superó con el 6% de inflación cualquier discurso de estabilidad, promovido por el “plan Massa”, lo que viene para el resto del año parece seguir la misma senda. Todos los pronósticos indican que la carestía de vida va en alza y eso se explica con los nuevos aumentos programados. Solo en marzo se vienen subas en alquileres, tarifas de gas y agua, prepagas, transporte y combustible.
Alquileres
Renovar un contrato de alquiler viene siendo una odisea para los sueldos de los trabajadores. Producto de la fórmula establecida por la última Ley de Alquileres, que se rige por el índice de inflación y los salarios, renovar un contrato en marzo significaría una suba del 89%, Tres puntos más que en febrero.
Para dar un ejemplo, si una persona pagó $ 60.000 de alquiler durante el último año, con una renovación comenzaría a pagar $113.400. Toda una odisea para los ingresos deprimidos, más teniendo en cuenta que según el último informe de Evolución de la distribución del ingreso del INDEC, el promedio en el país es de $ 80.435.
Tarifas de gas y agua
Como ya habíamos adelantado en este medio, también se registrará una suba en la boleta del gas, de forma conjunta con el servicio de agua.
El ENARGAS autorizará en los próximos días una suba que rondará entre el 60% y 90% en los ingresos que cobran las distribuidoras, haciendo que se traslade un aumento a los hogares, en promedio del 39%. Sin embargo, esa cifra oficial seguro rondará más cerca del 50% en las residencias de los usuarios. Este aumento también impactará en la industria.
Por otro lado, como advertimos, se sumará un incremento en el servicio de agua. Las “zonas medias” comenzarán a pagar tarifa plena, mientras que las “zonas medias-bajas”, desde marzo, solo pasaran a percibir un 15% del subsidio en la tarifa.
Prepagas
Las prepagas darán un salto por encima de lo que fue la inflación en enero, será un salto del 7,66% para todos los usuarios. Solo aquellos que hayan podido cargar el formulario para declarar que perciben ingresos netos por debajo de $ 392.562 podrá pedir que la suba sea de 5,04%.
Más allá de la diferencia de dos puntos porcentuales, es otro aumento que seguirá limando los salarios.
Transporte
Marzo contará con una suba del boleto en el subte. El primer tramo de aumentos hará que la tarifa entre 1 y 20 viajes pase a costar $ 58; entre 21 y 30 viajes $ 46.40; y entre 31 y 40 viajes $ 40,60; más de 41 viajes, costará $ 34,80. Según lo establecido, las próximas subas se darán en mayo, junio y septiembre.
Además subirá el boleto del Premetro, que pasará a costar $ 20. También, ya en el orden nacional, se incrementarán los pasajes de colectivos y trenes.
Combustible
En este caso, por orden del programa “Precios Justos” la nafta y el gasoil tendrán su aumento correspondiente del 3,8%. Una suba que se sumará al 4% de febrero y, como es sabido, empujará el resto de la cadena de producción a elevar sus precios.
Todo sube menos los salarios
En este marco, la idea original del gobierno, con la ministra de Trabajo Kelly Olmos al frente, es cerrar paritarias que no sobrepasen el 60% de aumentos anual. Algo que comparado con las proyecciones inflacionarias es un disparate. Consultaras privadas y el índice REM que realiza el BCRA indican que el año cerrará con una inflación cercana al 100%.
Este número tiene una explicación y dada por los aumentos mencionados, que además solamente los primeros del año. Como mencionamos, el ingreso promedio en el país es de $ 80.435; mientras que el valor de la canasta básica total es de $ 163.539. En cambio, si nos basamos en la cifra de la Junta Interna de ATE-INDEC, el salario mínimo para una familia tipo de cuatro personas debió ser en el mes de diciembre de 2022 de $ 238.680.
Culminar con los planes fondomonetaristas es la única posibilidad para que se termine esta crisis económica, marcada por la espiral inflacionaria, donde todo recae sobre los ingresos de los trabajadores y sectores populares.