En los últimos días se hizo mediática una denuncia de un presunto abuso de menores en el Jardín de Infantes Nucleado C, del Distrito Escolar 9 (JIN C DE 9). La denuncia llegó a oídos de la comunidad docente a través de los medios de comunicación, ya que nunca fue informado por parte de Supervisión a la escuela. Aunque prontamente, las tres maestras acusadas fueron separadas de su cargo para investigar la situación.
Lamentablemente, desde ese martes 2, vecines y familias han estado amedrentando a las demás docentes, sin pruebas ni investigación alguna. La violencia llegó a un punto insostenible cuando el jueves 4, luego de no haberse hecho presente de ninguna manera, el gobierno de la Ciudad decidió enviar a la policía porteña a realizar un allanamiento, mientras les niñes tenían clases aún.
En lugar de contención, represión, condena mediática y revictimización
La policía retuvo los teléfonos de las docentes y permitió también que los medios de comunicación acosaran a las docentes, sacando fotos incluso hacia adentro de la institución, en una actitud invasiva, habiendo sido alertados los medios por el gobierno evidentemente. Desde las 15hs cuando comenzó el violento allanamiento, hasta las 21hs, las docentes fueron retenidas dentro de la escuela sin posibilidad de llamar a nadie. Violencia por donde se lo mire.
Ni la ministra de Educación ni ninguna otra autoridad de su Ministerio, que se llena la boca hablando de la importancia de la educación, se hizo presente en la escuela durante esos días. No acompañó a la comunidad para trabajar este tema, desamparando tanto a familias y niñes, pero también a les docentes que aún continúan trabajando en este Jardín del Distrito 9.
En lugar de eso, la policía de la Ciudad decidió violentar la institución, a sus trabajadores y a les niñes. Este atropello no aporta en nada a resolver la situación y sí violenta aún más el clima institucional. Eso es algo que no podemos permitir y por eso nos hicimos presentes como Alternativa Docente en la Directiva Multicolor de Ademys para ponernos a disposición ni bien tomamos conocimiento.
A esto se le suma el trato amarillista, retorcido y morboso de los medios de comunicación, dedicándole horas a este tema, con datos imprecisos, mal intencionados y hablado con total desconocimiento de la realidad de un jardín. Pero sobre todo, revictimizando a las infancias y acosando a las docentes que continúan en servicio.
La justicia de la Ciudad, que responde al gobierno de Larreta y dio la orden represiva a través de la fiscalía, es parte activa en montar este circo violento, en lugar de garantizar una investigación rápida, certera, eficaz, con todos los recursos necesarios, tanto materiales como profesionales, que le de tranquilidad a las familias y garantías a las docentes supuestamente sospechadas, de un proceso justo y que busque sobre todo, llegar a la verdad.
Violencia que el sistema genera y se cuela en jardines y escuelas
Les docentes estamos acostumbrades a la falta de apoyo y recursos por parte del gobierno, más aún frente a situaciones de violencia y desamparo para con nuestres alumnes. Pero permitir toda esta agresión y acusaciones es funcional al proyecto de Larreta, Acuña y el gobierno del PRO con Juntos por el Cambio, que buscan desacreditar sistemáticamente a la escuela pública.
Porque estos hechos de violencia, ante la falta de respuesta rápida y adecuada por parte de los gobiernos, la justicia, autoridades y profesionales de Educación, de Desarrollo Social y de otras áreas que deberían estar involucradas, no resultan aislados.
Días atrás, en el Jardín Nº 933 de La Matanza, grupos de familias destrozaron un auto de dirección, atacaron con piedras, etc., a docentes y directoras de un jardín donde hubo denuncias de abuso. Antes había pasado en el Jardín Nº 949 de Isidro Casanova, el Jardín Nº 1.000 y antes en el Jardín Nº 979, también de Matanza, en el Jardín Nº 915 del distrito de Moreno o en el Jardín 406 de Comodoro, en Chubut, ante una situación también violenta.
No hay protección para les docentes ni resguardo alguno por parte de los gobiernos y el Estado. Con un tratamiento mediático que demoniza y violenta a las escuelas, al docente y equipos de conducción, a les niñes y la comunidad, llegando hasta a exponer a quien se señalara como responsable, su vivienda y hasta datos personales. Todo sin seguir los protocolos necesarios y sin que la justicia actúe como debiera.
¿Es comprensible la bronca y preocupación de las familias? Por supuesto, son casos muy delicados. Pero el gobierno y demás instituciones del Estado deben contener, intervenir a fondo, garantizar ir a fondo y buscar la verdad, en lugar de permitir esa violencia que no es salida, o alentar y dejar correr cierta “justicia por mano propia”, que solo enfrenta a la escuela, las familias y la comunidad, sin contribuir a llegar a la verdad.
¿Qué hacer en estas situaciones?
Cualquiere docente de esta Ciudad sabe que, ante las decenas de denuncias o casos de abuso, de violencia, de maltrato, de vulneración de derechos de les niñes, el gobierno de Larreta y Acuña no se hace cargo de ninguna manera. Los protocolos, que docentes y directives seguimos al pie de la letra, terminan en nada.
Porque no hay equipos de psicopedagogues y psicologues en las escuelas como reclamamos en cada lucha, en particular junto a Ademys. Porque los Equipos de Orientación no dan abasto, ante los muchos casos y situaciones que le son remitidos. Porque no destinan presupuesto para investigar las denuncias ni herramientas para ayudar a les niñes que son vulnerades. Incluso sabiendo que muchos de los abusos se determinan reales, aunque intrafamiliares, lo mejor que el Estado ofrece es enviar a menores a hogares horribles, sin acompañamiento psicológico.
Aun así, buena parte de los medios hegemónicos como empresas capitalistas que solo buscan rating, les hacen a su vez el juego al gobierno de Larreta y a Acuña, acusándonos a les docentes de negligentes, incluso cuando el abuso es por parte de familiares. Más allá de que llevemos adelante los protocolos correctos, el gobierno nos deja a la intemperie.
Se necesita un protocolo de resguardo para las infancias con presupuesto real; protocolos de resguardo ágiles y transparentes, que elaboremos en forma democrática entre la docencia, estudiantes y familias. Y también un protocolo de resguardo para la docencia.
Ante una (in)justicia que no actúa o manda reprimir, exigimos la convocatoria a una Comisión Investigadora independiente, con todas las garantías y atribuciones para poder avanzar a fondo, llegar a la verdad y determinar las responsabilidades reales de los hechos denunciados. Porque sería la única garantía de una pronta investigación del caso, dándoles tranquilidad a las familias y resguardando de la mejor manera a las víctimas de estos presuntos abusos. Ante cualquier caso de alta complejidad, necesitamos una Comisión de este tipo que investigue porque la justicia tradicional es una justicia machista, clasista, sin perspectiva de género y solo está interesada en encontrar chivos expiatorios más que en llegar a la verdad, en casos así.
Al mismo tiempo, es necesario prevenir todas estas situaciones. ¿Cómo? Con la real implementación de la ESI, Educación Sexual Integral en todas las escuelas, sin distinción. Con condiciones laborales y edilicias reales. Implementando parejas pedagógicas y con la cobertura de cargos directivos y docentes. Con equipos de orientación con suficientes profesionales, sabiendo que los jardines son los que menos tienen. Para todo esto necesitamos más presupuesto, y que se deje de subsidiar a las privadas a costa del presupuesto de la educación pública. Lo opuesto a lo que hacen Larreta, pero también Alberto o Kicillof, más allá de ritmos, grados y formas, al mantener el Presupuesto nacional apenas por encima del 5% del PBI cuando deberían elevarlo ya al 10% del PBI como reclamamos.
A su vez, tenemos que cuestionar las reformas anti pedagógicas y anti educativas, tanto a nivel nacional como en la Ciudad. Tenemos que pelear contra la sobrecarga horaria. No damos abasto y el tiempo que perdemos en cuestiones burocráticas y de papeleo, es el tiempo que no tenemos para nuestres pibis.
Lunes 8: Hagamos grande y masivo el paro y la movilización
Hoy nuestra tarea es organizarnos para dar esta pelea, como venimos haciendo al acompañar desde el primer momento a las docentes y el jardín afectado. Frente al ajuste y ataques a nuestros derechos, a los de toda la clase trabajadora y sectores populares, la violencia social que gobiernos y el sistema capitalista generan, es cada vez mayor.
La llamada ‘inseguridad’ es en buena medida, resultado de políticas de austeridad, de hambre, de insalubridad. Toda esa violencia desde el gobierno, la prensa hegemónica, su justicia para ricos, sus partidos patronales, sus empresarios y burocracias sindicales, se filtra en las escuelas, afecta a las infancias y somos nosotres quienes debemos contener a familias y alumnes, sin herramientas ni los recursos necesarios, ni más cargos, salas y jardines.
No podemos permitir estas respuestas insuficientes y superficiales del gobierno que solo apuntan a descalificar a la escuela estatal. Necesitamos más presupuesto, urgente y real para mejorar la situación de las escuelas en general: que haya gabinetes psico pedagógicos, más profesionales para los EOE, más escuelas para que haya menos alumnes por salas o grados, protocolos reales ante estas denuncias, las situaciones de violencia o negligencia familiar.
Todo esto lo vamos a lograr luchando. Por eso es tan importante haber debatido y logrado llamar a paro desde Ademys. Y luego arrancado el paro a la Celeste de la UTE y a Camyp. Debemos ahora hacer grande este paro y la movilización convocada para este lunes 8.
Para, con esa fuerza, plantear cómo vamos por más, nos mantenemos organizándonos y debatiendo entre todes cómo seguimos hasta lograr lo que necesitamos. Por eso, desde Alternativa Docente del MST en el Frente de Izquierda Unidad damos la pelea sindical -en Ademys y en UTE- para mejorar nuestras condiciones laborales, pero también para dar vuelta todo. Sumate.
Pilar Rey Valeiras, Analía García – Docentes de Nivel Inicial