El plan de lucha nos encontró en unidad en las calles a varias organizaciones sociales y por supuesto pegamos como un solo puño. Necesitamos mayor atención. El Movimiento Teresa Vive fue parte de ese plan de lucha, el comedor Corazoncitos Contentos de Villa Caraza y varios de nuestros merenderos dijeron basta por una navidad sin hambre.
Sabemos que el gobierno de Milei no gira presupuesto a las provincias, pero también sabemos que los gobiernos de las provincias, en lugar de sacar dinero a los más ricos, deciden seguir ajustando a los más vulnerados.
Desde hace varias semanas que se van recortando las provisiones de los comedores, tanto en frescos como en secos. Y mientras todos los municipios han entregado productos navideños ni Quilmes ni Lanús lo hicieron. Es evidente que delegan esa responsabilidad en la provincia de Buenos Aires y su gobernador, Kicillof, a su vez la provincia delega esa responsabilidad en Nación. Y por lo tanto, nadie se hace responsable de las necesidades de ningún sector. De alguna manera los municipios y las provincias replican el modelo de ajuste de Nación. Es necesario salir a luchar para enfrentar el ajuste en todos los niveles de gobierno. Así debemos hacer en todos lados.
Lanús, municipio bonaerense
Los municipios por momentos son una réplica del ajuste más general. En algunos casos con algunos detalles diferentes, pero en la mayoría se repite el mismo formato. Obviamente responsabilizando hacia arriba la falta de recursos y de políticas públicas.
Es común la situación de todos los trabajadores municipales, que cada vez ganan menos, tienen menos derechos, más trabajo, más precarizado y además ningún tipo de ley los ampara. Los trabajadores estatales de provincia tampoco están mucho mejor. Los docentes, los médicos, los estatales en general son los cuartos sueldos más bajos del país.
En Lanús esa situación se profundizó y muchos trabajadores y cooperativistas municipales tienen sueldos de miseria.
Los movimientos sociales no son ajenos a esto, se ven vulnerados en sus derechos, se recortan las provisiones de los comedores, los alimentos secos y frescos, ni siquiera un pan dulce para poder compartir en la mesa en las fiestas. Luchar en unidad siempre sirve.
Seguir el camino de la lucha
En Lanús, los movimientos sociales más importantes del distrito realizaron un plan de lucha que comenzó en la semana pasada ante la falta de entrega de alimentos básicos a los comedores, el aumento a los cooperativistas y la entrega de navideños tanto a muchos empleados del municipio, cooperativistas y movimientos sociales.
Es obvio que Milei está con un ajuste a todo plano. Y ahora se vienen las reformas en todo sentido que profundizarán aún más el ajuste en curso, pero a su vez las provincias no buscan recursos donde los hay. No los reclaman a Nación o los reclaman tibiamente o vía judicial, pero después en las cámaras hacen acuerdos, siendo funcionales a los programas que tiene el gobierno nacional. Por eso muchas de las provincias que hoy están con trabajadores por debajo de la línea de la pobreza en el Congreso le dan los votos al gobierno nacional.
Los movimientos sociales vienen sufriendo un ataque constante y nadie se hace cargo de esa situación. Si es a nivel nacional, obviamente ya se amenaza con su reconversión o la suspensión de volver al trabajo, sin que haya existido una política pública desde Capital Humano para generar puestos de trabajos. Si es a nivel provincial, no existen mayores subsidios y solo se entregan alimentos con escasez y cada cierto tiempo. Los municipios se quejan de la falta de recursos, pero recaudan y tienen plan de obras con sectores privados. Que sean los sectores más ricos los que paguen impuestos al servicio de las necesidades de los más vulnerados.
Ese fue el reclamo, basta de no se puede. Deben entregarse más alimentos, y aumento real de salarios de cooperativistas. Además de entrega de navideños a trabajadores y Movimientos sociales. El reclamo también agregó la necesidad de puestos de trabajo reales.
Fruto del corte en unidad de la semana pasada, el gobierno municipal se comprometió a varias de estas cosas. Una entrega inmediata de alimentos y navideños, la posibilidad de incorporación en servicio de barrido y obras y aumento real del salario cooperativista.
Es evidente que la necesidad en los barrios no es una pelota que se deben pasar entre los diferentes niveles de gobierno. Es un tema a atender y que requiere el máximo de los compromisos. Más allá de las contradicciones que muestran hoy varios municipios de la Cámpora con el gobierno de Kicillof, mirar a otro lado no resuelve estos problemas.
Este plan de lucha y acuerdo es un primer e importante paso para los movimientos sociales del distritos, seguiremos en unidad en la calle por todos nuestros derechos.
Horacio Bravo



