“Disculpe señor (Gobernador)
Se nos ha llenado de pobres el recibidor”
J.M. Serrat.
Junto con los proyectos millonarios e innecesarios de reformas a las plazas, lejos de las necesidades populares, Alak, ha lanzado una ofensiva, al mejor estilo macrista, para sacar del centro a los cientos de manteros que se instalan diariamente en las puertas del poder político.
¿El motivo? Ocultar el creciente problema de la desocupación.
Para eso, están haciendo firmar un contrato reaccionario, discriminatorio, e intimidatorio. Un chantaje usando la necesidad del sustento diario.
Contenido del contrato:
- Tienen que abandonar la zona comprendida entre calle 38 y 60 y entre calle 6 y 12. Más Diagonal 80 de 1 a 7. El recibidor de Kicillof, Alak y les legisladores.
- Tienen 96 hs para desalojar y en contrapartida la Municipalidad les ofrece un puesto en un predio a designar. Sin establecer lugar ni fecha.
- Para poder acceder tienen que tener domicilio en La Plata y ser argentinxs. Alguien de Ensenada o Berisso, nuestros vecinos, no puede. Cláusula discriminatoria y xenófoba.
- Si llegan a firmar y por alguna necesidad vuelven a la zona indicada, pierden el lugar asignado. b)en caso de recibir alguna ayuda, la tienen que devolver. c) podrán ser judicializados y se les exigirá un resarcimiento.
Acta vergonzante para quienes se postulan como progresistas y populares. Parece que a les políticos peronistas les molestan lxs cabecitas negras, lxs descamisadxs. Solo quieren sus votos para seguir siendo casta.
Una política claramente de derecha, que no resuelve el problema, diría casi destinada al fracaso.
Políticas que terminan fortaleciendo a los Milei, defraudando las expectativas populares que generan sus relatos.
Un sector ha firmado por necesidad, ya que no hay otra salida en lo inmediato. Se ha firmado con desconfianza, porque ya ha habido otros intentos similares, siempre fracasados.
Asamblea y movilización
En este sentido, el 5 de junio, el Día del Medio Ambiente, a las 16 h, se convoca a una asamblea frente a la Municipalidad. Desde allí, se marchará hacia la Casa de Gobierno.
No podemos permitir que el gobierno continúe cementando irracionalmente los espacios verdes y, como consecuencia, aumentar el riesgo de trágicas inundaciones como las que se están volviendo comunes en nuestra ciudad.
Solo cuidando la naturaleza podemos evitar el empeoramiento de la crisis climática.
Ysolo la organización de los afectados ayudará a superar esta situación.
Guillermo García