Desde el Instituto Superior de Formación docente y Técnica N°88 «Paulo Freire» de La Matanza fuimos parte del tsunami educativo con una gran columna independiente de estudiantes del oeste defendiendo la educación pública.
Nuestra importante participación de casi un centenar de estudiantes se concreta desde la asamblea en defensa de la educación pública convocada por el Centro de Estudiantes. Desde hace semanas la preocupación sobre la situación de las universidades públicas se coló en las cursadas y los pasillos de nuestro profesorado, las charlas coincidían en ver la necesidad de movilizar fuertemente contra el congelamiento presupuestario de las universidades nacionales y en defensa de toda la educación; entendiendo que este gobierno avanza con un plan de vaciamiento y privatización de nuestro orgullo nacional como es la universidad pública y el CONICET. Docentes y estudiantes vemos día a día -y sufrimos- el desfinanciamiento y el ajuste del gobierno.
En el caso del Freire, ubicado en el corazón político de La Matanza, no se cuenta con edificio propio, a pesar de contar con 4 carreras de formación docente y 1 tecnicatura, este es nuestro reclamo histórico como comunidad educativa y causante de la mayoría de los obstáculos que encontramos en nuestra formación superior. Algo tan básico como poder cursar todes en un solo edificio, o poder exponer nuestras producciones para enriquecer la formación entre las distintas carreras es un sueño de hadas. Sabemos que este no es el primer gobierno que viene a desfinanciar nuestra educación, ni el primer ataque. Hace años sufrimos una gran superpoblación en las aulas; el boleto estudiantil no alcanza ni se implementa efectivamente; la beca progresar es una mentira, y no funciona; los edificios a veces sin agua, luz o en malas condiciones. Padecemos diariamente el abandono estatal a nuestro instituto y por eso movilizamos con fuerza, llevando nuestros reclamos a la gran marcha.
Además de las problemáticas que enfrentamos como estudiantes también somos conscientes que nuestra labor como docentes corre peligro. Milei, en una cínica y antiobrera postura quiere declarar a la educación como «servicio esencial» para prohibir los paros y huelgas. Recortó el FONID que es parte de entre el 10% y 20% del salario docente y hasta llegó a reprimir la última movilización docente cobardemente cuando se estaba desconcentrando. Todos estos ataques son convalidados por el gobierno provincial y la conducción del SUTEBA Celeste que administra el ajuste que demanda el gobierno nacional, con paritarias que tienen a nuestres docentes con salarios por debajo de la línea de pobreza.
En la asamblea del 18 de abril participamos estudiantes de las 3 sedes del profesorado y, además de votar movilizar el 23 se acordó visibilizar la marcha con pasadas por los cursos, un cartelazo el viernes 19, una campaña de fotos y la conformación de una Comisión de Estudiantes en degensa de la educación pública, la cual le puso el cuerpo a las actividades votadas para hacer masiva la movilización y también concientizar el estado de nuestra educación.
La asamblea también votó movilizar de manera independiente, rechazando los micros que el municipio ofreció a condición de movilizar detrás de las banderas de Espinoza, el intendente peronista de La Matanza. Con esta independencia del gobierno provincial y del gobierno nacional, creemos que es fundamental continuar con las asambleas, los cartelazos y la coordinación para derrotar no solo a la motosierra sino también conquistar nuestros reclamos históricos. En las calles, en unidad, con diversidad y con independencia política demostramos la fuerza del movimiento que lo puede todo. Desde Alternativa Estudiantil La Matanza ponemos a disposición nuestra agrupación para dar pelea por una educación pública gratuita, de calidad y para la transformación social. Te invitamos a que nos conozcas, este sábado nos juntamos con docentes y estudiantes de la UNLaM y otros terciarios para seguir organizándonos.