Cele Fierro: “A los diputados que venden a los jubilados por un cargo, hay que escracharlos como a los genocidas”.
frente a la sesión de diputados donde se trató el veto del presidente Milei a la movilidad jubilatoria, la diputada porteña de izquierda Cele Fierro (FIT Unidad-MST), cargó durísimo contra el presidente y especialmente contra los diputados radicales que anticiparon que iban a modificar su voto.
Cele Fierro disparó: “Lo de Milei y la banda libertaria militando de manera activa contra el mísero aumento a las jubilaciones, argumentando que desestabilizaría todo el esquema fiscal y que significaría un golpe a los ingresos estatales, es directamente repugnante que indigna a niveles incontenibles. A esto, ahora se incorpora el panquequeo de los diputados radicales, que se sacaron la foto con el presidente anticipando que no votarían en rechazo al veto presidencial a movilidad jubilatoria. A esos personajes hay que escracharlos como a los genocidas, a donde vayan, hay que repudiarlos, que no puedan caminar por las calles, porque son directamente una mugre social y política”.
Finalmente, Fierro concluyó: “Es evidente que hay una situación de descomposición en los partidos tradicionales. Entre el peronismo con senadores y diputados que se fugan de sus bloques para pactar de manera bilateral con el gobierno miserables prebendas, como lo vimos durante el tratamiento de la Ley Base, de rotondas hasta cargos en la ONU, los radicales que ahora se dan vuelta, o a los Bernis y Moreno que elogian a Villarruel, progenocida y negacionista. Lo que queda claro es que hay una descomposición general del sistema de partidos tradicionales que han gobernado la Argentina. Por eso no es con el poroteo en el Congreso porque ya demostraron como tranzan: es en la calle, con un verdadero plan de lucha y huelga general, no hay ninguna confianza a estas instituciones. Tenemos que hacer nuestra propia agenda, la de los trabajadores y el pueblo. En este momento que estamos en el medio de una recesión económica insoportable, Milei pierde de manera gradual base social, pero no se derrumba porque entre esa degradación de las que se supone son las fuerzas más visibles de ‘oposición’ que ve la población, más una CGT que deja solos los reclamos en lugar de ponerse al frente parar, movilizar y construir plan de lucha, se consolida el principal activo del gobierno nacional. Por eso, más que nunca la izquierda y el Frente de Izquierda en particular tiene una responsabilidad, transformarse en una fuerza de alternativa convocante capaz de articular un descontento que se va radicalizando y crece, y que cuando explote va a ser más imparable que en el 2001”.