Ante la bronca en las escuelas y la realidad de un parazo de 48 hs de la Multicolor con un acto y marcha este miércoles 6 a las 12 hs ante el ministerio de Educación (ex Pizzurno), como parte de una Jornada Nacional de Lucha Docente, sumado al malhumor social y los apremios electorales del gobierno, Kicillof tuvo que anunciar un bono y aumento salarial para mejorar lo pactado con los gremios para este mes. El escueto comunicado oficial habla de un 25% que se cobraría recién en octubre y alcanzaría además a las jubilaciones docentes, a estatales, salud y judiciales.
El significado de este anuncio de bono y aumento
A días de concretarse este nuevo y masivo paro provincial Multicolor, el anuncio oficial mostró que luchar rinde y hay plata en la Provincia, y más si luchamos por aumentar ya el Presupuesto educativo al 10% del PBI. Y si arrancamos una suba mayor a la que pensaban dar, sin medidas de SUTEBA Provincia ni de la CTERA ni las CTA y la CGT, podemos ir por más con un plan de lucha votado democráticamente en un plenario provincial. Junto a impulsar la unidad con los movimientos sociales, el Sindicalismo Combativo y el Frente de Izquierda.
La Jornada Nacional de este miércoles 6 expresa la continuidad de la lucha entre sindicatos, seccionales, minorías y la FND (Federación Nacional Docente), con paros de los SUTEBA Multicolor, de Ademys en CABA, Chaco, Misiones, Formosa, Santa Cruz, Tierra del Fuego, además de acciones en Córdoba, Catamarca y La Pampa. A lo que se sumó el paro del lunes 4 en Chubut.
Para ampliar esa unidad, en el plenario Multicolor adherimos también a la convocatoria de la Unidad Piquetera -que integramos con el MST Teresa Vive-, para preparar una jornada nacional hacia el jueves 14, ante el ajuste de Massa y el FMI, contra la ofensiva de Milei y la derecha.
Este fue el marco que llevó a Kicillof a tener que abrir más la mano, ya que solo pensaba dar una suma fija y ningún aumento, diciendo tener prevista la suba del 15% en setiembre, ratificando sus aumentos bimestrales con los que supuestamente le “ganaríamos” a la inflación.
Ante la caldera social luego de la devaluación del 22%, Kicillof tuvo que dar más de lo que querían, fruto de la presión y la masiva adhesión a este nuevo parazo Multicolor. Actuó también el voto castigo al gobierno del PJ y a los que gobernaron antes con Juntos por el Cambio. Aunque con un “voto bronca” que capitaliza Milei, lo que genera preocupación en la docencia por sus propuestas privatistas y contrarias a la educación como derecho social que el Estado debe garantizar, cuestión que también enfrentamos con esta Jornada Nacional.
¿En qué consistiría el aumento…?
El comunicado oficial es escueto y deja más dudas que certezas. Los gremios no sacaron tampoco ni una mínima grilla para mostrar cómo impactaría en los cargos de preceptores, maestras, profes o directivos. Según el gobierno, con los sindicatos convinieron adicionar un 10% al aumento ya pautado para septiembre, completando un 25% en promedio. Todo a cobrar recién en octubre.
Al tratarse de porcentajes, debemos aclarar algo que la Celeste deja en la “letra chica” y es que el 25% no se aplicará sobre el monto del último mes (agosto), sino sobre el salario de enero/febrero. No es menor, ya que Kicillof vuelve a echar por tierra el “pedido” de la burocracia Celeste de que todo aumento posterior a junio, se calcule sobre el sueldo de ese mes y no el de enero.
En plata, la diferencia no es poca, ya que para una maestra que se inicia, el aumento será de apenas $ 30.000 al aplicar el 25% sobre el sueldo de enero y pasar a cobrar $ 230 mil. Pero si el 25% se aplicara sobre agosto, el aumento sería de $ 50.000. Para una maestra con la máxima antigüedad, la suba sería de $ 39.000 y pasaría a ganar $ 308 mil. Para un preceptor, $ 24.000 y una directora de 1ra categoría (D1, 20 secciones) con 10 años, le tocarían $ 46.600 más, con lo que llegaría a $ 367 mil. Como vemos, el “aumento” es más que insuficiente, al dejar los salarios abajo de la línea de pobreza.
Eso no lo resuelve ni un bono por persona (no por cargo) de $ 30 mil, a cobrar a mediados de setiembre. El que recibirían solo quienes cobren de bolsillo menos o igual a 370 mil pesos, con un proporcional de ese importe para quienes cobran entre 370 mil y 400 mil pesos. También habría un bono a jubilaciones menores a $ 120 mil. Y un Fondo a los municipios, ante al planteo también electoralista de Juntos por el Cambio, diciendo no tener plata para pagarlo.
La docencia lo vio como un logro propio y tonificó el paro Multicolor, al evidenciar que luchar sirve. A su vez, como el aumento es insuficiente, el paro es masivo, movilizando además por las malas condiciones de trabajo, la precarización, el ajuste presupuestario, la falta de cargos, el deterioro edilicio y los déficit en las partidas de los comedores, en becas, material didáctico, notebook y conectividad.
Podemos ir por más, tres propuestas
En definitiva, este aumento fue arrancado con lucha, en el marco de una fuerte crisis política, social y económica que pone en cuestión las perspectivas electorales hacia octubre. Resulta claro que este aumento se cobraría a días antes de tener que ir a votar.
Baradel, Sonia Alesso de CTERA, Yasky de la CTA y la CGT, alineados con el gobierno, son un freno a la lucha, cuando deberían llamar ya a un paro nacional. Pero insisten con que el mejor “plan de acción” sería votar a Kicillof y que “lo más revolucionario” ante el avance de un Milei, sería estar en la escuela en vez de hacer escuela de lucha.
Por eso vemos tres cosas claves: pechar en la Multicolor porque le demos continuidad a esta lucha, con una nueva medida no más allá de 10 a 15 días. De ahí nuestro planteo al último Plenario para que definamos esa continuidad en un nuevo Plenario Provincial de Delegades con mandato, pero donde prime lo presencial, en un día de paro o jornada con 115 (licencia gremial). Para así poder debatir a fondo, combinado con la bimodalidad para garantizar que distritos como Bahía Blanca y otras localidades del interior, puedan participar, balancear y resolver según los mandatos de escuelas.
Creemos que la lucha activa y comprometida junto a la comunidad es la forma de defender la escuela pública y no encerrarnos en el aula como dice la Celeste, a bancar un ajuste con otros ritmos y formas que el macrismo, con Vidal, Patricia Bullrich o Milei, pero ajuste al fin.
A su vez y para que no sigan decidiendo los gobiernos, con el FMI, la OCDE, el Banco Mundial y los sectores privatistas, insistimos en dar la disputa educativa, con la exigencia de un Congreso Pedagógico Nacional. Donde docentes, estudiantes y familias podamos decidir las transformaciones que requiere la escuela pública.
La otra cuestión clave a debatir es que no hay “mal menor” ni “voto útil” con Massa, Kicillof y el FMI. Lo vemos con este gobierno de Alberto, Cristina y el PJ, que nos trajo al peor de los males, al asumir el saqueo del Fondo para cobrarse la estafa de la deuda. Resulta inútil seguir tropezando por ese camino.
La salida es luchar porque se vayan todos, un nuevo argentinazo y que el pueblo decida en una Asamblea Constituyente libre y soberana. Mientras damos esta pelea, llamamos a que te sumes con Alternativa Docente y el MST.
Para seguir batallando también por fortalecer al Frente de Izquierda y cambiar lo que hace falta para ponerlo a tono con las luchas que se vienen. Mientras llamamos a votar por la única alternativa en defensa propia, de la docencia y la escuela pública, con el FIT Unidad.