Artículo extraído del sitio web de la Liga Internacional Socialista.
Contra el capital y la opresión patriarcal
Apenas asumió la presidencia de los Estados Unidos, Trump lanzó, tal como había prometido, violentos ataques contra la autodeterminación de las mujeres y las personas LGBTIQ+: no es más que el enésimo acto de una verdadera ola internacional reaccionaria, fanática y oscurantista que impacta sobre la clase trabajadora y en particular sobre las mujeres y las personas queer, desde Argentina hasta los Estados Unidos pasando por Italia, con la criminalización del aborto y la autodeterminación en materia sexual y de salud. El avance de la derecha va de la mano del retroceso del movimiento obrero y de los movimientos por los derechos civiles. El control reaccionario en Italia también se expresa con verdaderas normas de estado policial, como la DDL 1660, destinadas a reprimir las protestas. ¿Qué hay que celebrar en este marco? Para nosotros, hoy como hace más de cien años, el 8 de marzo es un día de lucha militante.
Empezar de cero desde el trabajo, el único camino verdadero hacia la emancipación
Frente a una sociedad burguesa que nos expulsa del mundo laboral cuando le conviene, frente al 34% de mujeres que no trabajan para realizar tareas de cuidados (INAPP), reivindicamos la entrada en el mundo laboral de mujeres y jóvenes en condiciones dignas y la inminente necesidad de recuperar todos aquellos derechos que nos han sido arrebatados por las contrarreformas laborales y del estado del bienestar. ¿Es la solución una renta de ciudadanía/existencia o de autodeterminación laboral reproductiva? Rotundamente no. La renta o salario por trabajo doméstico, lejos de emanciparnos, nos ata aún más a la unidad familiar y a las posibles parejas maltratadoras.
Derribar el capitalismo y el patriarcado: ¡no somos el Estado del bienestar de la patronal!
Las mujeres y las personas queer trabajadoras y desempleadas están pagando el precio más alto por las políticas económicas de los últimos 30 años en varios niveles: mientras que en el lado laboral aumentan la precariedad, el desempleo y la erosión salarial, las reformas del Estado del bienestar confinan a las mujeres dentro del hogar, reduciendo los servicios, la atención y las instalaciones públicas para el cuidado de niños y ancianos. El Estado burgués descarga los costes del trabajo de cuidados sobre las familias y especialmente sobre las mujeres con menos recursos, que no tienen medios económicos para pagar servicios o instalaciones privadas.
El recurso al aborto es cada vez más difícil, este derecho se vacía de contenido cada día gracias a la actitud cómplice y connivente de un Estado que tolera la objeción de conciencia utilizada por fanáticos religiosos y reaccionarios como arma contra las mujeres, y de un gobierno postfascista que ha permitido y fomentado la infiltración de movimientos fundamentalistas cristianos en hospitales y centros de asesoramiento.
POR UNA LUCHA FEMINISTA MARXISTA REVOLUCIONARIA
El arma más poderosa en manos de la clase obrera es la huelga, porque golpea a la patronal y al capital donde más les duele: en la cartera. Pero abstenerse del trabajo doméstico para encontrar el doble de cosas que hacer mañana no solucionará nada: necesitamos derrocar una sociedad que nos quiere doblemente oprimidos, en el trabajo y en casa, derrocando un sistema económico basado en la presencia de exploitatɜ y explotadores, oppressɜ y opresores, a favor de una sociedad en la que las mujeres y las personas LGBTQIAP+ se liberen de los hombres y todos se liberen del capital.
Reclamamos:
¡Un trabajo decente!
● Abolición de todas las formas de precariedad y flexibilidad: restaurar los derechos sindicales conquistados y perdidos por el movimiento obrero, abolir las leyes antiobreras y represivas.
Reducción de la jornada laboral por el mismo salario: trabajar menos, redistribuir el trabajo entre quienes no lo tienen y disponen de más tiempo libre
● Subsidio de desempleo decente para los que han perdido su trabajo
● Salario mínimo muy por encima del umbral del trabajo necesario, ¡a favor de los trabajadores y no de los empresarios!
● Reintroducción de la escalera mecánica: ajuste de los salarios al aumento de la inflación.
● ¡Queremos poder jubilarnos! Luchamos por un sistema salarial, por una pensión mínima por encima de los niveles de subsistencia, contra el alargamiento de la edad de jubilación.
● Reducción de la edad de jubilación para los trabajos exigentes.
● Nacionalización bajo control obrero y sin indemnización de las empresas que despidan o deslocalicen
Seguridad y protección en el trabajo bajo control de los trabajadores para unas condiciones laborales más seguras y saludables
● Abolición de todas las leyes que restringen los derechos sindicales y el derecho de huelga, abolición del delito de bloqueo de carreteras, no a las precepciones ilegales
● Institución del delito de asesinato en el trabajo
● Lucha contra la esclavitud, el trabajo forzado y el acoso, el chantaje y la violencia sexual en el trabajo
● Socialización de las tareas de cuidados contra cualquier propuesta de salario para las amas de casa o renta de existencia. ¡Tareas de cuidados socializadas y no sobre nuestros hombros!
● Permiso parental ampliado y 100% remunerado extendido a todos los padres, ¡la responsabilidad parental no es sólo de las mujeres!
● Nacionalización de los servicios privados de cuidados bajo control social, abolición del bienestar corporativo y desvío de fondos a los servicios públicos.
● Establecimiento de una riqueza extraordinaria del 10% sobre el 10% más rico para financiar escuelas y sanidad, y todos los servicios relacionados con los cuidados.
● Abolición de todas las leyes que patologizan las subjetividades LGBTQIAP+ y establecimiento de vías protegidas, libres y garantizadas para la autodeterminación.
● Lucha contra la explotación de la prostitución y la trata de personas.
● Creación de una vía garantizada para las víctimas de violencia heteropatriarcal pero rechazo a la denuncia obligatoria
● Aborto libre, seguro, gratuito y garantizado, promoción del aborto farmacológico, abolición de la entrevista previa
● Anticoncepción gratuita, libre y garantizada
● Apoyo efectivo a la maternidad con socialización de las tareas de cuidado e instalaciones adecuadas de apoyo a las madres
● Lucha contra la violencia obstétrica y misógina en la atención a las mujeres.
● Stop a los desahucios. Vivienda garantizada para todos, incluidos los inmigrantes
● No criminalización de los ocupantes, abolición de todas las leyes represivas y securitarias contra los movimientos por la vivienda.
● Libertad para emigrar, abolición de los CPR y de los centros de internamiento de inmigrantes.
● Acogida y protección de mujeres y migrantes LGBTQIAP+ y ius soli, permisos de residencia, documentos y derecho de residencia
● No a las guerras del imperialismo y al gasto armamentístico, alto el fuego inmediato en Palestina y Ucrania (con autodeterminación del pueblo palestino y retirada de las tropas rusas dentro de las fronteras del 24 de febrero de 2022) y en todos los teatros de guerra del capital
● No a la ola reaccionaria del postfascismo mundial, por la reanudación de las luchas antifascistas, en soldadura directa con el anticapitalismo
● Por un mundo limpio para vivir: producir y consumir lo necesario, acceso al agua, la tierra y el aire limpios, expropiación y nacionalización de las empresas contaminantes
Somos conscientes de que ningún gobierno de la burguesía, en contra de sus propios intereses, aplicará estas medidas. El programa de la clase proletaria sólo puede ser realizado por un gobierno obrero. Sólo la revolución socialista a escala internacional puede liberarnos de las cadenas de la explotación capitalista y de la opresión patriarcal.
¡Construyamos juntos esta perspectiva! Unamos la lucha contra la opresión de género a la lucha de clases. ¡Invirtamos la deriva reaccionaria sobre el cuerpo de las mujeres! ¡Por una lucha feminista marxista revolucionaria contra el capitalismo y el patriarcado!
