En momentos donde la crisis del país no da respiro, las internas y disputas hacia adentro de los frentes políticos no es algo exclusivo del Frente de Todos. En ese marco, la oposición de Juntos por el Cambio, busca posicionarse de cara a las elecciones presidenciales de 2023. Pero, la cercanía que muestra el ex presidente, Mauricio Macri, y la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, con el líder de los liberfachos, Javier Milei, tiene un tanto inquieta a la UCR y mantiene una tensión cada vez más aguda puertas adentro de la coalición.
El primer estallido se hizo notar cuando Macri participó el pasado viernes, en San Pablo (Brasil), de la Conferencia Internacional de la Libertad, un evento organizado por el Instituto Liberdade, que agrupa a varios referentes del bolsonarismo en el país. Allí, no tuvo mejor idea que denostar la figura de Hipólito Yrigoyen, primer presidente de la UCR e histórico líder del radicalismo.
La crítica al “populismo” fue el eje central de dicha conferencia, dónde el ex presidente cargó contra Alberto Fernández, el peronismo y, también, con el viejo líder radical.
“Esto del populismo no es un problema apenas de Latinoamérica. Tal vez se originó en Latinoamérica y tal vez en Argentina es donde arrancó, primero con Yrigoyen y después con Perón y Evita. Esto es muy contagioso y se expandió al resto del mundo”, afirmó durante su discurso.
El radicalismo estalló de bronca y, a través de Gerardo Morales, gobernador de Jujuy y actual presidente de los radicales, enviaron una dura carta dirigida hacía Mauricio Macri.
“Como presidente del Radicalismo no puedo dejar pasar tu última descalificación sobre quién fue el primer presidente electo por el voto popular, dejando atrás décadas de fraude y corrupción. Yrigoyen fue quien inauguró la democracia en la República Argentina”, disparó Morales.
El punto más alto de la carta llega sobre el final cuando el gobernador jujeño apunta contra Mauricio Macri diciendo “Veo que lejos de asumir tu posición histórica y de posicionarte por arriba de las mezquindades políticas para servir como actor en un espacio de construcción para el bien del país, estás sucumbiendo a la tentación de subirte a modas efímeras que solo acarrean más destrucción. Si tu intención es romper JxC para buscar un acuerdo con sectores de la extrema derecha antidemocrática lo mejor es decirlo concretamente”.
A sabiendas de lo que representa la oposición de derecha, quien no tiene otro plan de gobierno que no sea recrudecer la crisis actual, este intercambio entre sus diferentes partidos demuestra una crisis más general. Una crisis del régimen político burgués de conjunto, donde lo que prima son las riñas entre los diferentes aparatos para intentar hacerse de la presidencia en 2023. La presión de Milei como emergente de la ultra derecha, es lo que hace que Macri, al menos, piense una nueva orientación que, tal vez, incluya la participación del fenómeno.
De todas formas, lejos están los radicales y las demás fuerzas de Juntos por el Cambio, como los “libertarios, de resolver las demandas de las clases populares. Sectores que día a día se sumerge más en la miseria, tras las políticas aplicadas, primero por el frente que reflejamos disputa y, ahora, por el Frente de Todos.
Ante tanta falsa promesa y certeza de que en su conjunto las dos mayores coaliciones ofrecen un mayor ajuste de cara al futuro, es necesario fortalecer una alternativa distinta. Que nada tenga que ver con los partidos tradicionales. Por eso mismo, vemos como una necesidad de primer orden fortalecer al Frente de Izquierda y Trabajadores Unidad, como el único frente que realmente puede hacer frente a la crisis, con una salida en favor de las grandes mayorías trabajadoras.
Nahuel Schiavoni