miércoles, 18 diciembre 2024 - 12:01

INDEC. La inflación de abril fue del 8,8% y una familia necesitó más $800000 para no ser pobre

Según las nuevas publicaciones del Indec, en el mes de abril, la inflación fue del 8,8%, mientras que, una familia para no caer por debajo de la línea de la pobreza necesitó $828.158. Estos números son los publicados en los informes sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC)[i] y el de la Valorización mensual de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total[ii], realizados por dicho instituto estadístico.

Inflación

La variación mensual del IPC en el mes de abril fue del 8,8%, haciendo que en los primeros cuatro meses del año la inflación acumulada sea del 65%. En cuanto a la variación interanual de este índice llegó al 289,4%.

El informe refleja que: “La división de mayor aumento en el mes fue Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (35,6%) por los incrementos en las tarifas de gas, agua y electricidad. Le siguieron Comunicación (14,2%), por las subas en servicios de telefonía e internet, y Prendas de vestir y calzado (9,6%) por cambios de temporada.”

Por el lado de la división de Alimentos y bebidas no alcohólicas, su variación en abril fue del 6,0%. Los aumentos están relacionados al incremento en: “Carnes y derivados; Leche, productos lácteos y huevos; y Verduras, tubérculos y legumbres.”

El IPC Núcleo, que no tiene en cuenta ni los precios regulados ni a los factores estacionales, marcó en abril un aumento del 6,3%. Los productos estacionales mostraron un incremento del 9,9% y por el lado de los productos regulados se registró un aumento del 18,4%.

Canasta básica

La canasta básica total (CBT), el índice que delimita la línea de la pobreza, en su variación mensual se incrementó un 7,1%, llevando a un acumulado en lo que va del año del 67,0%. Este aumento hizo que una familia tipo, formada por dos mayores y dos menores, haya necesitado $828.158 para no ser pobres. En cuanto a lo acumulado en los últimos doce meses, este ítem llegó al 307,2%.

Por el lado de la canasta básica alimentaria (CBA), en el mes de abril creció un 4,2%. Esta variable, indicadora de la línea de la indigencia, reflejó que el mes pasado, una familia necesitó $373.044 para no ubicarse en la indigencia. La variación interanual de esta canasta se estableció en el 296,2%.

Luego de las felicitaciones que el Fondo Monetario le brindó al gobierno de Javier Milei por el sobrecumplimiento de las metas, este 8,8% de inflación va en línea a esas exigencias que este organismo internacional demanda en sus revisiones. Pero este número inflacionario, que cae por cuarto mes consecutivo, el gobierno lo podrá vender como una victoria, aunque este festejo esconde la naturaleza del porqué de esta especie de deflación. Ya que estos índices, presentados como positivos, son a costa de un feroz ajuste, el cual nos hizo desembocar en la recesión por la cual estamos transitando.

Si bien la inflación baja, los valores de la canasta básica alimentaria (CBA) y de la canasta básica total (CBT) siguen aumentando, mientras que al mismo tiempo los sueldos poco pueden hacer para enfrentar a estos índices, a causa de la política del gobierno de ponerle techo a los incrementos salariales. Si comparamos la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) del mes de marzo[iii] con el valor de la CBT vemos que, la remuneración promedio de los trabajadores contratados en relación de dependencia, no puede superar el valor de la canasta, ya que el RIPTE en su última publicación, su monto en pesos se estableció en los $705.832,58, cuando la CBT se incrementó a los $828.158. La situación de nuestros ingresos, se agudiza más con los trabajadores y trabajadoras que perciben el Sueldo Mínimo Vital y Móvil (SMVM), en donde, en abril pasado lo cobrado fueron $202.800. Esta imagen muestra que se necesitan 4 SMVM para poder alcanzar el valor de la CBT. Las próximas actualizaciones que sufrirá el salario mínimo tampoco alcanzarán para superar la línea de la pobreza y ni la línea de la indigencia. Siendo que las próximas actualizaciones son:

  • El aumento de abril lo llevó a los $221.052 (monto cobrado en mayo).
  • El aumento de mayo lo incrementa a los $234.315 (monto a cobrar en junio).

Actualmente y según la última publicación de la Junta Interna de ATE-INDEC, encargada de establecer el valor mínimo del salario para satisfacer las necesidades mínimas de un trabajador, que es parte de una familia tipo, el monto que obtuvieron como resultado fue de $1.163.391.

Este cuarto mes consecutivo de baja en la variación mensual del IPC, como lo describen los números escritos más arriba, solo es producto de un plan de ajuste que ha licuado los ingresos de las mayorías trabajadoras y de los sectores populares. Ya que este ataque al poder adquisitivo de los salarios ha hecho caer el consumo en el país, haciendo que esta contracción económica por la que atravesamos haga bajar los precios de los bienes y servicios. Las consecuencias de esta baja en la inflación las advierten hasta economistas cercanos al liberalismo de Milei, en donde alertan que esta depresión feroz generará una incapacidad en la recuperación. El porque de este retroceso en los números de la inflación están íntimamente relacionados ha que en la era Milei tengamos un 10% en la caída en la actividad, una caída del 17% en los salarios, un retroceso en la actividad industrial del 21,2% y en la construcción una caída del 42,2%, siendo estos dos últimos números resultados del mes de marzo.

La sostenibilidad de este ajuste, está en discusión a causa de diferentes variables. Por un lado, hasta junio están frenados los aumentos que se darían en las tarifas de energía, gas, agua potable y transporte, estos incrementos podrían desordenar la línea por la que el ministro Caputo quiere continuar, la inflación de un solo dígito. Y por el otro lado, a causa de la licuación de nuestros ingresos, hasta el FMI advierte la necesidad de rever la “calidad y la equidad” del ajuste que está en marcha, sobre todo por la situación de los sectores más vulnerables. Recordemos que en el país tenemos un 41,7% de pobreza y un 58,4% de pobreza infantil.

Tenemos que terminar con Milei y todo su plan ajustador, hambreador y represor. Mientras que la hoja de ruta del programa del libertario sea seguir los lineamientos del Fondo y responder a los intereses del empresariado, la situación de crisis solo seguirá una sola dirección y es la de su profundización. Es necesario poner en marcha una batería de medidas que cambie radicalmente la situación crítica de los trabajadores. Necesitamos salarios que se indexen al valor de la canasta básica y así reconstruir nuestro poder adquisitivo, además de esto necesitamos atacar a los sectores que se aprovechan de estas situaciones como son los formadores de precios, el control tiene que pasar a manos de los trabajadores y de los usuarios. Estas son algunas políticas que junto con el desconocimiento del acuerdo con el FMI y todo tipo de deuda espuria nos permitiría cambiar el sentido de esta crisis.


[i]  https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/ipc_05_24F9890B1583.pdf

[ii] https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/canasta_05_242FCA6E27C1.pdf

[iii] https://www.argentina.gob.ar/trabajo/seguridadsocial/ripte

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