El 29 de noviembre al mediodía se realizó la segunda audiencia en el Ministerio de Trabajo de Pilar por el caso de Karen Giménez, trabajadora que denunció acoso sexual por parte de su superior jerárquico, Sebastián Paiz, y posteriormente fue despedida del Frigorífico Amancay.
Desde Juntas a la izquierda y el MST venimos acompañando a Karen y exigiendo su reincorporación, como también el inmediato despido de su acosador; y participamos con una gran movilización junto a otras organizaciones en ambas audiencias.
Lamentablemente, el accionar de la empresa y su dueño ha sido proteger al acosador, quien continúa en su puesto de trabajo. Hacemos responsable también a Juan Becco, dueño de la empresa, por encubrir estas prácticas y por las condiciones inhumanas en las que se trabaja dentro del frigorífico. Les trabajadores no están regularizados en sus puestos de trabajo, tienen horario de ingreso, pero no de salida, trabajan entre 15 y 17 horas por día y las trabajadoras sufren acoso por parte del jefe de planta.
Gracias a que Karen escuchó el grito de #NiUnaMenos tuvo el valor de denunciar y llevar este caso a la Justicia, acompañada por las organizaciones feministas que nos movilizamos permanentemente. En ninguna de las dos audiencias se presentó la patronal, demostrando desde ya su total desinterés por la situación vivida por Karen.
De la movilización participó Natalia Espasa, dirigente de Juntas y a la izquierda y MST en el FIT Unidad y candidata a concejal por Pilar.
Seguiremos en las calles apoyando las luchas de les trabajadores, las mujeres y les jóvenes, acompañando todos los casos de acoso de los que las patronales, y el Estado son responsables.
¡Ni una menos!
¡Si tocan a una, nos tocan a todas!
Belén Quintero