viernes, 18 octubre 2024 - 02:30

Filosofía y Letras. Ajuste y burocracias estudiantiles

El pasado martes 29 de agosto, en una sesión express y sumamente antidemocrática del Consejo Directivo, se votó el recorte de la franja horaria de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. La gestión “nacional y popular” del decano Ricardo Manetti y la vicedecana Graciela Morgade aprobaron esta reforma en complicidad con la conducción del Centro de estudiantes y mayoría estudiantil, El Colectivo, haciendo oídos sordos a la movilización estudiantil que le decía No al recorte.

¿Traslado o recorte? Las mentiras de El Colectivo

La reforma en cuestión (“Proyecto de bandas pares”) implica que la franja horaria, que hoy se extiende desde las 7 hasta las 23 horas, pasa a ser de las 8 a las 22 horas, es decir que los turnos de 2 horas que actualmente cambian en horas impares, cambiarían en las horas pares. No hay que ser matemático para notar que se retiran dos horas de la franja horaria, reduciendo la oferta horaria de 8 turnos a 7, lo que perjudica principalmente a quienes trabajan y estudian al mismo tiempo. Los horarios eliminados son los más accesibles para quienes trabajan tiempo completo, las cursadas de 7 a 9 y de 21 a 23hs. Filosofía y Letras pasaría a ser la única en la UBA en implementar este sistema. El Colectivo (La Cámpora + Frente Patria Grande + Movimiento Evita) realizó una campaña llena de mentiras, pasando por cursos y publicando en las redes esta reforma como una conquista estudiantil, un supuesto traslado de las horas.

No necesitamos menos horarios, sino más. Parece obvio, pero uno de los planteos de la gestión y la conducción sobre por qué la reforma, que “no es un recorte sino una modificación”, nos beneficia, es que “hay pocxs compañerxs o pocas clases en esas franjas horarias”.  Cuando en realidad más de 500 compañerxs se quedarían afuera de la cursada con esta reforma. Hay teóricos y prácticos vigentes de casi todas las carreras en los horarios de 21 a 23 horas y aunque hay poca oferta entre las 7 y las 9 horas el horario es conveniente para muchxs. La primera preocupación de El Colectivo y de la gestión, que se llenan la boca hablando de cómo el resultado electoral puede devenir en ajuste a la educación, debería ser cómo garantizar más oferta horaria en esos turnos, garantizar la triple franja horaria y hacer que no sea inaccesible para alguien que trabaja estudiar más de una materia por cuatrimestre.

¿Por qué crece la deserción estudiantil y cada vez somos menos cursando en Puan? Desde que se volvió a la presencialidad, las puertas de la facultad cierran a las 21 horas, la gestión le pide a lxs docentes que si dictan clases en la franja de las 21 a las 23 horas terminen antes “para que lxs estudiantes no lleguen tarde a sus casas” y la mayoría de los teóricos, por no decir todos, ya no se desgraban. La única garantía para quienes por cuestiones laborales no pueden asistir a un teórico es la solidaridad estudiantil de que lxs compañerxs de cursada graben la clase. La facultad es cada vez más inaccesible para lxs trabajadores.

¿Qué pasó en el Consejo Directivo?

Sin independencia política de los gobiernos y gestiones es imposible conquistar todas las demandas de lxs estudiantes, porque nuestros intereses son antagónicos. La conducción que supo hacer grandes promesas en campaña y festejar migajas y conquistas ajenas como propias expuso su verdadera naturaleza: ser la pata estudiantil de la gestión. A la sesión del pasado martes se movilizaron estudiantes a lxs que la gestión no pudo ni quiso darles respuesta, presentando una moción de orden para pasar a la votación directamente, negándole la palabra a todxs lxs estudiantes anotados para intervenir. Previo a esa censura, le dio espacio a las tres presidencias del CEFyL para que se expresaran y negaran que lo que se estaba votando fuera un recorte. Acusaron a estudiantes organizadxs en la izquierda e independientes de “desinformar aprovechando la frágil situación política luego de las PASO”. Escándalo tras escándalo, el CEFyL, bajo la presión de la movilización, presentó cinco minutos antes de votar un proyecto con leves modificaciones al original de la gestión, que incluía por ejemplo realizar un relevamiento luego de que el recorte fuese aplicado. Finalmente, entre abucheos, la gestión acompañó ese proyecto y fue aprobado.

Entre aparatos y burocracias

La posición del CEFyL frente a cualquier medida no puede ser determinada por la conducción unilateralmente, sin espacios de diálogo real con lxs estudiantes, para esto siempre es necesaria una asamblea. Desde que El Colectivo ganó la conducción del CEFyL (septiembre de 2019) solo ha convocado a 7 asambleas, 3 en 2020, 1 en 2021 y 2 en 2022. Ayer se dió la primera asamblea convocada por la conducción en todo el 2023, con métodos completamente burocráticos, dignos de la Franja Morada, y llamada con tres días de anticipación. Es muy claro que el interés de estos espacios no es organizar a lxs estudiantes en su herramienta gremial, única forma real de enfrentar a la derecha, sino pretender utilizar al CEFyL como un centro administrador de la gestión, que pase el ajuste y pueda hacer creer que votando a Massa en octubre se van a resolver todos nuestros problemas. Puro chamuyo. Se pasaron todas sus intervenciones alabando al ministro- candidato y llegando a hablar de “un supuesto ajuste”, como si no se viviera día a día la devaluación de nuestra economía, y no plantearon ningún tipo de plan de lucha para avanzar en nuestros reclamos estudiantiles. Para colmo, convocaron a todo su aparato político para votar en contra de las mociones resueltas en las asambleas autoconvocadas que se dieron en las últimas dos semanas en nuestra facultad, a las que ellos decidieron no ir. El mayor miedo de esta conducción es, claramente, la organización genuina de lxs estudiantes, que se está gestando por abajo muy a su pesar.

Una avanzada en toda la UBA y el increscendo del ajuste en la educación

Hay que ser claros, esta reforma es parte de un plan sistemático que se viene llevando a cabo en toda la educación pública en pos de recortar presupuesto. En un informe que realizó Argentinos por la Educación, basado en el proyecto de ley para el Presupuesto 2023, se encontró que “el presupuesto educativo de 2023 es el segundo más bajo de los últimos 11 años (el más bajo fue el de 2020). En la última década, la mitad de los presupuestos nacionales han implicado ajustes en educación. ”(1). Agregado a que no se cumple con lo estipulado por la Ley de Educación Nacional de 2006, que dictaminó que dicho presupuesto no puede ser menor al 6% del PBI Nacional, y la permanente devaluación -incluyendo el 22% del superministro Massa y el FMI el día siguiente a las PASO-, se comprueba que la comunidad educativa y la inversión en educación no es prioridad ni para este ni para ningún gobierno, cada vez hay menos plata para educación y día a día estudiar parece más un privilegio que un derecho. Venimos de un recorte de la franja horaria, reformas de los planes de estudios en Artes, Filosofía y próximamente Letras, y no solo en FFyL sino también en otras facultades como en Medicina, donde también recortan los planes a espaldas de estudiantes y docentes. Cada vez hay menos oferta de cursada, cada vez le pagan menos a lxs docentes e incluso seguimos teniendo docentes ad-honorem, a quienes este año el Consejo Superior les quitó la obra social. Faltan los comedores universitarios de gestión estudiantil, y seguimos sin tener un boleto universitario. Estas problemáticas se extienden a todo el ámbito educativo: escuelas en todo el país reciben viandas en mal estado o insuficientes, sin luz, sin gas, sin techos y con ratas; la avanzada en capital a manos de Larreta sobre los terciarios, cerrando inscripciones y haciendo pasar de facto la reforma de la uniCABA que no pudo pasar en la legislatura por la movilización estudiantil. Ajustan en el Gran Buenos Aires, en Capital Federal, en la UBA y en todo el país. Esas son las prioridades de Unidos por la Patria y JxC. Ni hablar de los repudiables discursos de Milei planteando que privatizar con bonos la educación pública es la herramienta para sacar el país adelante.

Nuestras reivindicaciones

Mientras sufrimos este recorte, las conducciones de los centros de estudiantes, en su mayoría paralizados y garantizando el ajuste, se niegan a convocar a elecciones utilizando de pretexto el Congreso de la FUBA completamente antidemocrático y antiestatutario que se dió el año pasado, en el que La Franja Morada y Nuevo Espacio definieron que las elecciones a centros de estudiantes serían cada dos años. Desde lo más rancio del radicalismo hasta lo más “progre” de Unión por la Patria se acoplaron encantados a esta medida y definieron negar las elecciones en todas las facultades.

(para leer más ingresá a https://periodismodeizquierda.com/escandalo-en-la-uba-nuevo-ataque-a-los-derechos-democraticos/)

Frente a tanta burocracia y discursos falaces, en Filosofía y Letras nos organizamos a pesar de la conducción de El Colectivo que se niega a convocar a espacios democráticos de participación y abandona al movimiento estudiantil, que se termina autoconvocando asambleas, como sucedió el jueves 31 de agosto y el martes 12 de septiembre. Lxs estudiantes coparon la “reunión abierta para enfrentar a la derecha” que citaron a finales de agosto para exigir que sea resolutiva y discutir un plan de lucha para combatir realmente a la derecha, empezando por enfrentar el recorte de la franja horaria. Todas las mociones presentadas en las dos asambleas autoconvocadas se suman al pliego histórico de reivindicaciones de lxs estudiantes de nuestra facultad, que se hicieron sentir en todas las intervenciones y por las que seguimos luchando:

  • Contra el recorte y para que se garantice la triple franja horaria con presupuesto real.
  • Que haya elecciones a centro de estudiantes.
  • Contra las reformas unilaterales e inconsultas de los planes de estudio.
  • Para que el nuevo edificio de la calle Bonifacio sea destinado 100% a aulas de grado, como se conquistó y a lo que la gestión se comprometió en la toma de la facultad en 2010.
  • Por un jardín materno-paternal para las infancias y un comedor universitario con gestión estudiantil y precios accesibles, conquista estudiantil del 2010.
  • Por la restauración urgente de nuestro centro cultural.
  • Por el boleto estudiantil.

Seguimos dando la pelea por una universidad pública, gratuita y de calidad, para que todxs podamos acceder a nuestra facultad.

Juntada masiva de firmas

Te invitamos a sumar tu firma en contra del recorte a través del siguiente link: https://forms.gle/P67SDunCou34rgLPA y a difundirlo en tu espacio de estudio o trabajo, ya que, como votamos en la asamblea, presentaremos la totalidad de las firmas en la próxima sesión del Consejo Directivo el martes 19/09, ¡Fortalecé nuestro reclamo por la derogación de este proyecto!

Tesis XI – Facultad de Filosofía y Letras

(1)https://argentinosporlaeducacion.org/informe/presupuesto-educativo-nacional-2023/

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