El sábado pasado se realizó el encuentro de coordinación de las luchas del AMBA, que convocamos distintos sectores en conflicto y que impulsamos desde las corrientes de la izquierda clasista ANCLA/MST y MAC/PTS. En una primera reseña publicada en Periodismo de Izquierda, ya transmitimos la importancia que tuvo el evento y sus resoluciones consensuadas y votadas al final del evento, con centro en movilizar unitariamente junto a todos los sectores que convoquen el día 27 en ocasión de la reunión del Consejo del Salario, además de redoblar el apoyo a todos los sectores en lucha.
Los debates abordaron la situación general de la clase obrera que salió a reclamar ante los efectos de la crisis agravada por la pandemia y las medidas tomadas por el gobierno con los trabajadores y sectores populares como variable de ajuste y a favor de las patronales.
Fundamentalmente el carácter de las luchas actuales que se dan en todo el país, con la salud al frente, sector del cual nuestra corriente aportó la mayor parte de las delegaciones que resolvieron participar y también de diferentes sectores estatales y privados.
Planteamos la tremenda oportunidad que hay, por el vacío que deja la burocracia de todo pelaje que, pese a dividir, traicionar y no solo no tomar las medidas de paro y plan de lucha de nacional que harían falta, ni siquiera se animan a llamar a acciones menores por su apoyo al gobierno, pero también por el miedo al desborde. Que, a la vez que es una necesidad, significa una gran oportunidad para avanzar no solamente en unir las luchas, sino los procesos de organización para dar pasos en una nueva dirección clasista y democrática.
Algunos debates en el encuentro
Como todo evento obrero tiene acuerdos importantes y también debates lógicos que es bueno desarrollar. Por ejemplo, debatimos desde ANCLA que el proceso de luchas tiene diversas expresiones, partiendo de un gran común denominador: una rebelión desde las bases contra las viejas direcciones, un activismo nuevo y combativo que junto a los trabajadores se autodetermina, se autoorganiza para luchas y decidir todo. Hay autoconvocatorias extendidas como la de Neuquén, otras que dieron lugar a fundación de nuevos sindicatos como el de salud de Río Negro, todo el proceso de autoconvocatoria de enfermería de CABA que confluyó y está nutriendo el desarrollo de ALE como organización combativa, o el de la autoconvocatoria del Larcade que está cuajando en una nueva seccional de CICOP y nuevos delegados de ATE, entre otras. Justamente, no se puede separar ni menos contraponer, a los sindicatos e internas combativas con las autoconvocatorias que salen por fuera de los sindicatos, porque son parte de un mismo proceso que hay que unificar y coordinar. Debate que tuvimos en el encuentro y que también se expresa al interior del PSC.
Con los compañeros del MAC, compartiendo distintos temas y el balance positivo del encuentro, tuvimos debates. Que por ejemplo, se expresaron en una equivocada definición posterior, publicada en La Izquierda Diario, donde dicen: “Por parte del PTS/MAC se priorizó que hablaran los representantes de las distintas luchas en curso, mientras que el MST/ANCLA optó por darle voz prioritariamente a sus representantes de distintos gremios.”. Esto no es así. En primer lugar, porque la delegación que aportó nuestra corriente incluyó, entre otras, las principales luchas de la CABA en salud, encabezadas por sindicatos combativos que votaron en asambleas y directivas, luego de un debate democrático, concurrir al encuentro. Como la ALE con la pelea por el reconocimiento profesional y salarial de la enfermería, la Comisión Interna del Hospital Italiano, que está peleando por salarios, la Asociación de Profesionales y Técnicos del Garrahan que viene movilizando por salario y condiciones laborales, como la AGHIM del Moyano que moviliza por vacunas para el equipo de salud.
En segundo lugar, porque reconocer como “luchas” sólo a algunos sectores autoconvocados y contraponerlo a las demás expresiones de lucha de internas o sindicatos combativos, divide algo que hay que unir, para favorecer la coordinación y apoyar las luchas. Lo correcto es reconocer cada sector y su realidad y forma de organización, para así ayudar a desarrollar el recambio de dirección sindical que hace falta. Por eso impulsamos a fondo este encuentro e impulsaremos cada instancia que consideramos pueda ser útil, sin fomentar un nuevo espacio con los convocantes, sino actuando para unificar todo y pugnar por sacar de la parálisis al Plenario del Sindicalismo Combativo y avanzar uniendo todo para el polo de referencia que el nuevo activismo y los trabajadores necesitan.
La necesidad de reactivar y desarrollar el PSC
Las corrientes sindicales de PO e IS, pese a ser invitadas a tomar a fondo este evento, se negaron a ser convocantes limitándose a un saludo. Criticando previamente a la convocatoria por “divisionista”.
IS criticó el encuentro y a quienes lo impulsamos, y llama a sumarse a las acciones que resuelva la Mesa del PSC. Posición similar a la de la CSC del PO. Pero ninguno reconoce que el PSC no ha estado a la altura de las circunstancias, con ausencia de convocatorias de ningún tipo y de postulación, más allá de algún comunicado esporádico. Incluso, después de muchos meses de silencio, hubo una reunión de la Mesa del PSC que perfectamente podría haber confluido en la convocatoria y haberse logrado un evento más grande y potente.
Frente al proceso de luchas y al espacio que deja la burocracia, el PSC no puede estar ausente: tiene que postularse como alternativa y espacio de referencia para el activismo, con un método abierto y democrático hacia todos los sectores en lucha, como venimos sosteniendo desde ANCLA.
El PSC durante todo el año pasado ha estado tensionado por el debate de si había o no que movilizar, sobre el modelo sindical, sobre cómo actuar unidos en los conflictos y las elecciones sindicales, sobre no dividir la lucha y trabajo sindical con la disputa en el terreno político, máxime que todos integramos el Frente de Izquierda Unidad y queremos una salida de fondo, anticapitalista y socialista para el país.
Si no logramos actuar unidos en las luchas, si no logramos acuerdos para apoyar a los nuevos dirigentes, si no avanzamos en listas unitarias democráticamente integradas en los sindicatos, si no apoyamos todo proceso real de autoconvocatoria, el Plenario no va a progresar.
Se necesita fortalecer este frente único de las corrientes sindicales de la izquierda clasista, no dividirlo. Ponerlo al servicio de estos procesos de lucha y organización. La necesidad de una inteligencia común entre las fuerzas clasistas y de izquierda, para que el PSC, que todos integramos, se postule y ayude a que avance el activismo y no al revés.
Marcha del 27: una oportunidad para avanzar en la unidad
El 27 se está convocando desde diversos espacios a movilizar en ocasión de la reunión del consejo del salario. Convocaron los movimientos piqueteros, la Mesa del PSC y el Encuentro que hicimos el 17 también convoca. Asimismo, se planteó en el propio PSC, la necesidad de una reunión de todos los que quieran convocar, para consensuar el formato y potenciar unitariamente la marcha. Se necesita una gran movilización y marcha de las luchas, los sindicatos y comisiones internas combativas, el movimiento de desocupados independiente, junto a la izquierda y todos los que estamos en las calles para enfrentar el ajuste. Es una oportunidad para avanzar en la unidad.
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