El día de hoy, en el marco del 35° Encuentro Plurinacional de mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binaries, participamos desde Juntas y a la lzquierda, Alternativa Docente y el MST junto a otras organizaciones, de un gran pañuelazo con radio abierta en la Quinta de Olivos.
Catalina Coles
De camino al pañuelazo, meditaba que hoy estaríamos asistiendo a los últimos talleres, llevando a cabo nuestro típico “tetazo” frente a la Catedral y palpitando la movilización de miles y miles que todos los años nuclea a mujeres y disidencias de todo el país. Lamentablemente, la pandemia y el aislamiento nos impidió la realización del Encuentro, pero no nos imposibilitó seguir organizadxs, en las calles y luchando por todo lo que falta.
En la zona norte y en todo el país, nos organizamos porque nos parecía que en una fecha tan importante del calendario feminista, resultaba imprescindible salir a las calles para luchar por todas nuestras reivindicaciones y derechos cercenados con las medidas de distanciamiento social y bioseguridad necesarias. Lamentablemente hay sectores que siguen sosteniendo que no se puede salir, pero al respecto nosotrxs somos categoricxs: las actividades online no alcanzan, son muchas las penurias que estamos viviendo las mujeres y las disidencias, la situación económica, social y política evidencia lo peor de este sistema capitalista y patriarcal.
Se exacerbaron y crecieron las cifras de femicidios, travesticidios y denuncias de violencia de género, se ha profundizado la situación de precarización extrema de las mujeres y disidencias, el desempleo, la doble opresión relativa a las tareas del hogar hoy en cuarentena es más potente que nunca, somos mayoritariamente las mujeres quienes nos hacemos cargo además de nuestro trabajo “formal” de las tareas del hogar y de reproducción de la fuerza laboral, como así también de nuestrxs hijxs, su escolaridad y todo lo que ello conlleva. Sigue habiendo cientos de miles abortos clandestinos y en las peores condiciones sanitarias, personas con capacidad de gestar con complicaciones graves y más de cien muertxs por año por aborto séptico.
Creíamos – y creemos- que por todas estas cuestiones y muchas otras, era necesario ir a los centros de poder político a hacer oír nuestra voz, que en zona norte es la Quinta de Olivos. El presidente Alberto Fernández desde el inicio del mandato se pronunció a favor del aborto, prometió que enviaría al Congreso Nacional un proyecto de ley para su legalización, y manifestó empatizar y dio su palabra de modificar las distintas falencias del Estado para con las mujeres y disidencias creando un Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad. Lamentablemente a casi un año de gobierno podemos decir que todos estos dichos no quedaron en más que en eso, tuits, alocuciones y doble discurso.
Ante intensas requisitorias por la falta de presentación del proyecto de legalización del aborto, sigue excusándose en la pandemia, la falta de presupuesto, el colapso del sistema de salud y muchas otras mentiras. Contrariamente a lo que dicen los funcionarios y el presidente la legalización del aborto, ahorraría cientos de millones de dólares al Estado en ocupación de camas y tratamientos por abortos mal realizados, como así también –y lo que es mas importante- salvaría la vida de más de cien mujeres y personas con capacidad de gestar por año.
El movimiento feminista y la marea verde, ya tenemos un proyecto que está presentado que tiene estado parlamentario, el de la Campaña Nacional por el derecho al Aborto, Legal, Seguro y Gratuito, lo que falta es voluntad política.
Mientras tanto, seguiremos organizadxs, en las calles luchando por todas nuestras reivindicaciones hasta hacer posible lo necesario.